Te invito a visitar mi nueva biblioteca didƔctica en wordpress donde cuenta con exelente informacion educativa para que sigas ampliando tus conocimienots. Ir

China

1 INTRODUCCIƓN

China (en chino, Zhongghuó), paĆ­s del este de Asia, el tercero mĆ”s grande del mundo en superficie, despuĆ©s de Rusia y CanadĆ”, y el mayor en cuanto a población. Su nombre oficial es el de RepĆŗblica Popular China (ZhonghuĆ” RĆ©nmin GònghĆ©guó). Limita al norte con la RepĆŗblica de Mongolia y Rusia, al noreste con Rusia y Corea del Norte, al este con el mar Amarillo y el mar de la China Oriental, al sur con el mar de la China Meridional, Vietnam, Laos, Myanmar (antigua Birmania), India, ButĆ”n y Nepal, al oeste con PakistĆ”n, y TayikistĆ”n y al noroeste con KirguizistĆ”n y KazajstĆ”n. China cuenta con mĆ”s de 2.900 islas costeras, la mayor de las cuales es Hainan, en el mar de China Meridional. La superficie total de China es de 9.571.300 km², sin incluir el territorio perteneciente a la isla de Taiwan. La capital de China es PekĆ­n; la ciudad mĆ”s grande del paĆ­s es Shanghai.

MĆ”s de una quinta parte de la población mundial vive dentro de las fronteras de China. AquĆ­ nació una de las primeras civilizaciones del mundo y tiene una historia escrita que data de hace unos 3.500 aƱos. Zhongghuó, el nombre chino del paĆ­s, significa ‘tierra central’, una referencia a la creencia china de que su paĆ­s era el centro geogrĆ”fico de la Tierra y la Ćŗnica civilización verdadera. Hacia el siglo XIX, China se habĆ­a convertido en un Estado polĆ­tica y económicamente dĆ©bil. La llegada del gobierno comunista en 1949 es uno de los hechos mĆ”s importantes de su historia; en un periodo de tiempo muy corto tuvieron lugar unos cambios tan radicales que afectaron tanto a la economĆ­a como a la sociedad china. Desde la dĆ©cada de 1970, China ha abandonado el aislamiento que se habĆ­a impuesto respecto a la comunidad internacional y ha buscado modernizar su estructura económica.

2 TERRITORIO Y RECURSOS

China comprende una gran diversidad de paisajes y una gran variedad de recursos naturales. En tĆ©rminos generales, los picos mĆ”s altos de China se encuentran en el oeste, donde se encuentran algunas de las cadenas montaƱosas mĆ”s elevadas del mundo. Tres de ellas, el Tien Shan, los montes Kunlun y Qin Ling, datan de un episodio de la orogenia paleozoica que comenzó a finales del periodo carbonĆ­fero y terminó en el periodo pĆ©rmico, cuando todas las grandes masas de tierra se habĆ­an unido para formar un Ćŗnico supercontinente, Pangea (vĆ©ase GeologĆ­a: la escala del tiempo geológico). Una cuarta, el Himalaya, tiene un origen mĆ”s reciente, pues se formó cuando los sedimentos que habĆ­an sido depositados en un mar mesozoico, el mar de Tethys, fueron comprimidos y elevados por la colisión de la India con Eurasia, un hecho que comenzó durante la Ć©poca del oligoceno, del periodo terciario, hace unos 40 millones de aƱos. En la Ć©poca actual, perteneciente al periodo cuaternario, la actividad tectónica se ha producido en forma de devastadores terremotos que suelen ocurrir en un amplio arco que se extiende desde el extremo occidental de la cuenca de Sichuan, al noreste, hacia Bo Hai, el golfo de la orilla norte del mar Amarillo.

Las numerosas cadenas montaƱosas del paĆ­s encierran una serie de mesetas y cuencas, y suministran una gran riqueza de agua y recursos minerales. Hay una amplia variedad de tipos climĆ”ticos, desde el subĆ”rtico al tropical, y engloban grandes zonas de hĆ”bitats alpinos y desĆ©rticos con una notable diversidad de vida animal y vegetal.

Las montaƱas ocupan alrededor del 43% de la superficie terrestre de China; las mesetas montaƱosas suponen otro 26% y las cuencas, muy accidentadas y que estĆ”n situadas en su mayorĆ­a en las regiones Ć”ridas, cubren aproximadamente el 19% del territorio. Tan sólo el 12% de toda la superficie se puede calificar de llana.

2.1 Regiones fisiogrƔficas

China puede dividirse en seis grandes regiones geogrĆ”ficas, en cada una de las cuales hay una considerable diversidad geomorfológica y topogrĆ”fica.

2.1.1 El Noroeste

Esta región estĆ” formada por dos cuencas, la de Dzungaria (Junggar Pendi) en el norte y la del Tarim en el sur, y el elevado Tien Shan (Tian Shan). La depresión del Tarim contiene el desierto mĆ”s seco de Asia, el Takla Makan (Takela Man Shamo); las cadenas de dunas de su interior se elevan hasta unos 100 m de altitud. La depresión de Turfan (Turpan Pendi), la zona mĆ”s extensa de China situada por debajo del nivel del mar, preside la entrada meridional hacia el Tien Shan. La depresión de Dzungaria, aunque presenta zonas de desierto de arena y piedras, es ante todo una región de suelos fĆ©rtiles de estepa que mantiene agricultura de regadĆ­o.

2.1.2 Zonas fronterizas mongolas

Situada en la zona central del norte de China, es una región de mesetas formada sobre todo por desiertos de arena, piedra o grava que hacia el este se transforman en tierras de estepa con suelos fĆ©rtiles. Ɖsta es una región de llanuras, rotas por algunas cadenas montaƱosas de cumbres planas y estĆ©riles que cambian el paisaje. A lo largo de su frontera oriental estĆ” la zona montaƱosa del Gran Xingan (Da Hinggan Ling) mĆ”s elevada y con mayor vegetación.

2.1.3 El Noreste

Comprende todo Dongbei Pingyuan (Manchuria) al este del Gran Xingan, englobando la llanura de Dongbei Pingyuan (Manchuria) y las tierras altas que la bordean. La llanura tiene grandes extensiones de suelos productivos. Las tierras altas oscilan entre onduladas y montaƱosas, con numerosos y amplios valles, y laderas suaves. La penĆ­nsula de Liaodong, que se extiende hacia el sur, es muy conocida por sus excelentes puertos naturales.

2.1.4 El Norte

Esta región estĆ” situada entre las zonas fronterizas mongolas al norte y la cuenca del rĆ­o YangtzĆ© al sur, y estĆ” formada por varias unidades de relieve distintas. La meseta del Noroeste estĆ” formada por la acumulación de un sedimento fino arrastrado por el viento (loess), que al ser poco compacto se erosiona con facilidad; la superficie de la meseta la cruzan carreteras, valles de paredes verticales y numerosos barrancos. La región tiene extensas terrazas para el cultivo. La llanura norte de China, la mayor zona de tierras bajas llanas del paĆ­s, estĆ” formada por suelos fĆ©rtiles derivados del loess, por lo que gran parte de la misma estĆ” sometida a un intenso cultivo. Hacia el este en la penĆ­nsula de Shandong, se encuentran las tierras altas del mismo nombre, compuestas por dos Ć”reas montaƱosas distintas flanqueadas por colinas onduladas. La costa rocosa de la penĆ­nsula permite la ubicación de algunos puertos naturales. Hacia el suroeste aparecen las montaƱas centrales, que constituyen una gran barrera entre el norte y el sur.

2.1.5 El Sur

Esta región estĆ” formada por el valle del YangtzĆ© y otras regiones topogrĆ”ficamente diversas que se extienden hacia el sur. Este valle consiste en una serie de cuencas con suelos aluviales fĆ©rtiles surcadas por canales, tanto naturales como artificiales y salpicadas de numerosos lagos. La cuenca del Sichuan, situada hacia el oeste, estĆ” rodeada por los escarpados espolones de las tierras altas centrales y constituye un Ć”rea casi aislada de terreno montaƱoso; esta zona es muy conocida por una agricultura intensiva en terrazas. Las tierras altas del sur de China se extienden desde la meseta Tibetana a la costa oriental. Al oeste, la meseta de Yunnan-Guizhou, muy erosionada, estĆ” bordeada por una serie de cadenas montaƱosas, separadas por caƱones profundos de fuertes pendientes. En el este de Guizhou se encuentra uno de los paisajes mĆ”s pintorescos del mundo, donde el terreno estĆ” dominado por elevados pinĆ”culos de caliza y picos parecidos a pilares; al este se encuentran las colinas de Nan Ling, fuertemente deforestadas y erosionadas, y a lo largo de la costa estĆ”n las tierras altas del sureste, muy escarpadas, donde existen bahĆ­as con numerosas islas costeras que permiten la ubicación de puertos naturales. Hacia el sur de las colinas de Nan Ling estĆ” la depresión del Xi Jiang, una zona montaƱosa de suelos poco fĆ©rtiles; sin embargo, los numerosos arroyos de la región estĆ”n bordeados por valles aluviales planos y fĆ©rtiles. La amplia planicie deltaica del Zhu Jiang (rĆ­o Perla) se conoce comĆŗnmente como delta de Cantón.

2.1.6 La meseta Tibetana

En el extremo suroeste de China estĆ” la alta meseta del TĆ­bet, enmarcada por montaƱas; es la meseta mĆ”s elevada del mundo, con una altura de unos 4.900 m de promedio. Las cadenas montaƱosas que la rodean son el Himalaya al sur, Pamir y Karakorum al oeste, y los montes Kunlun y Qilian al norte. La superficie de la meseta estĆ” salpicada de lagos salados y pantanos; atravesada por varias cadenas montaƱosas, sirve de nacimiento de los principales rĆ­os asiĆ”ticos del sur y del este, como el Indo, el Ganges, el Brahmaputra, el Mekong, el YangtzĆ© y el Huang He (rĆ­o Amarillo). El paisaje es inhóspito, estĆ©ril y cubierto por rocas.

2.2 RĆ­os y lagos

Todos los grandes sistemas fluviales de China (Yangzi Jiang, Huang He y Xi Jiang) fluyen normalmente en dirección oeste-este hacia el ocĆ©ano PacĆ­fico. En general, alrededor del 50% del total hidrogrĆ”fico del paĆ­s drena hacia el PacĆ­fico, sólo alrededor del 10% lo hace hacia los ocĆ©anos ƍndico y Glacial Ɓrtico, mientras que el 40% restante no tiene salida al mar y drena hacia las cuencas Ć”ridas occidentales y septentrionales, donde los arroyos se evaporan para formar reservas de aguas subterrĆ”neas profundas; el principal de estos cursos es el Tarim.

El rĆ­o mĆ”s largo de China en el extremo norte es el Amur (o Heilong Jiang), que forma la mayor parte de la frontera nororiental con Rusia. Los rĆ­os Songhua (Songari) y Liao, asĆ­ como sus afluentes, drenan la mayor parte de la llanura de Dongbei Pingyuan (Manchuria) y sus tierras altas circundantes.

El principal rĆ­o del norte de China es el Huang He. Tradicionalmente se conoce como ‘el dolor de China’ a causa de las inundaciones periódicas de grandes regiones a lo largo de la historia de China. En su curso bajo, el rĆ­o estĆ” encauzado y su lecho se eleva por encima de la llanura circundante como resultado de la acumulación de sedimentos; en las tierras altas marginales de la meseta Tibetana el rĆ­o se eleva y sigue un curso tortuoso hasta el Bo Hai (o Po Hai), un brazo del mar Amarillo, y drena un Ć”rea de mĆ”s de dos veces la superficie de Francia. El rĆ­o YangtzĆ© de la China central tiene un caudal que supera en diez veces al del Huang He; es el rĆ­o mĆ”s largo de Asia (6.300 km) y tiene una vasta cuenca de drenaje. El YangtzĆ© se eleva cerca del nacimiento del Huang He, y desemboca en el mar en Shanghai, siendo su vĆ­a de transporte mĆ”s importante.

Los tramos inferiores en forma de estuario del Xi Jiang, el sistema fluvial mĆ”s importante del sur de China, sirven al mayor puerto de Cantón. El rĆ­o, que cuenta con numerosos afluentes y emisarios, tiene un caudal tres veces superior al del Huang He.

La mayor parte de los lagos importantes de China se encuentran a lo largo del curso medio y bajo del YangtzĆ©; los dos mĆ”s grandes en la zona media son el Dongting y el Poyang. Durante el verano estos lagos aumentan su Ć”rea dos o tres veces, y sirven de almacĆ©n para el exceso de agua. El lago Tai es el mĆ”s grande de los lagos presentes en el delta del YangtzĆ© y los lagos Hongze y Gaoyou se encuentran al norte del delta.

En la meseta Tibetana abundan los lagos salinos de un cierto tamaƱo. El de mayor extensión es el lago pantanoso Qinghai (tambiĆ©n conocido como Koko Nor), que se sitĆŗa en la parte menos elevada de la región Noreste, pero en la meseta elevada hay otros casi tan grandes como Ć©l. TambiĆ©n en el Ć”rido Noroeste y en las zonas fronterizas mongolas hay una serie de grandes lagos, muchos de los cuales son tambiĆ©n salinos; los mĆ”s destacados son los lagos Nur y Bosten, al este de la depresión del Tarim. El lago Ulansuhai, alimentado por el Huang He, se encuentra en el interior de Mongolia; el lago Hulun estĆ” situado al oeste del gran Xingan, en Dongbei Pingyuan (Manchuria).

A lo largo de todo el paĆ­s se han construido mĆ”s de 2.000 embalses, sobre todo para el regadĆ­o y controlar las inundaciones. La mayorĆ­a son de pequeƱo tamaƱo, pero el mayor (la presa Long Men en el Huang He) tiene una capacidad de 35.400 millones de metros cĆŗbicos.

2.3 Clima

Prevalece el clima templado; tambiĆ©n hay regiones desĆ©rticas y semiĆ”ridas en el interior occidental y una pequeƱa Ć”rea de clima tropical en el extremo sureste. Los climas de China, sin embargo, tienden a ser mĆ”s continentales y por tanto mĆ”s extremos, y los contrastes regionales suelen ser mayores, debido a la mayor masa continental de Asia respecto de AmĆ©rica del Norte.

El monzón (viento predominante) asiĆ”tico ejerce el control primario sobre el clima de China. Durante el invierno los vientos frĆ­os y secos soplan desde el sistema de altas presiones de Siberia central provocando el descenso de las temperaturas en todas las regiones al norte del rĆ­o YangtzĆ© y sequĆ­a en la mayor parte del paĆ­s. En el verano, un aire hĆŗmedo y cĆ”lido fluye hacia el interior desde el ocĆ©ano PacĆ­fico, lo que da lugar a precipitaciones en forma de tormentas ciclónicas. Enormes cantidades de lluvia caen rĆ”pidamente en las laderas de las montaƱas a sotavento. Las cuencas remotas del noroeste, en cambio, reciben escasas precipitaciones. Las temperaturas de verano son muy uniformes en la mayor parte del paĆ­s, pero los inviernos se caracterizan por diferencias extremas de temperatura entre el norte y el sur.

El sureste de China, hacia el sur del valle del YangtzĆ©, tiene un clima subtropical, y un clima tropical en el extremo sur. En esta región las temperaturas de verano alcanzan los 26 ĀŗC de promedio; en invierno las temperaturas descienden desde los 17,8 ĀŗC en el sur tropical hasta unos 3,9 ĀŗC a lo largo del rĆ­o YangtzĆ©. Un promedio de ocho tifones anuales, sobre todo entre julio y noviembre, provocan vientos y lluvias fuertes a las Ć”reas costeras. Hacia el suroeste, las llanuras montaƱosas y cuencas tambiĆ©n presentan climas subtropicales, con considerables variaciones locales. Como resultado de las mayores alturas, los veranos son mĆ”s frescos mientras que los inviernos son templados como consecuencia de la protección que ejercen, impidiendo la entrada de los vientos del norte. La depresión del Sichuan, es muy conocida por su alta humedad y nubosidad; las precipitaciones, especialmente abundantes durante el verano, exceden los 990 mm anuales en casi todas las regiones del sur de China.

La región china del Norte, que no tiene cadenas montaƱosas que formen una barrera protectora contra el flujo de aire de Siberia, experimenta un invierno frĆ­o y seco. Las temperaturas de enero varĆ­an desde los 3,9 ĀŗC en el extremo sur hasta unos -10 ĀŗC al norte de PekĆ­n y en las mayores alturas del oeste. Las temperaturas de julio suelen exceder los 26,1 ĀŗC y en la llanura septentrional del paĆ­s se acercan a los 30 ĀŗC. Las precipitaciones anuales totales son de menos de 760 mm, la mayorĆ­a durante el verano, y van disminuyendo hacia el noroeste que tiene un clima mĆ”s seco, de estepa. La variabilidad interanual de las precipitaciones en estas regiones es grande; este factor, combinado con la posibilidad de tormentas de arena o granizo, hacen que la agricultura sea precaria. Durante mĆ”s de cuarenta dĆ­as al aƱo hay niebla en el este, y durante mĆ”s de ochenta, a lo largo de la costa.

El clima de Dongbei Pingyuan (Manchuria) es similar al del norte de China, pero algo mĆ”s frĆ­o. Las temperaturas de enero sobre una gran parte de la llanura son de -17,8 ĀŗC de promedio, mientras que las de julio suelen exceder los 22,2 ĀŗC. Las precipitaciones se concentran en el verano, y su promedio oscila entre unos 510 y 760 mm en el este, disminuyendo hasta unos 300 mm al oeste del desierto del Gran Xingan.

En la frontera con Mongolia y en el Noroeste predominan los climas de estepa y desĆ©rticos. Las temperaturas de enero tienen un promedio por debajo de -10 ĀŗC en todas las zonas, excepto en la depresión de Tarim. Las temperaturas de julio suelen sobrepasar los 20 ĀŗC. Las precipitaciones anuales totales son de menos de 250 mm, y la mayor parte del Ć”rea recibe menos de 100 mm.

A causa de su altitud, la meseta Tibetana, en la región Suroeste, tiene un clima frĆ­o de montaƱa; las temperaturas de julio permanecen por debajo de 15 ĀŗC. El aire es seco a lo largo de todo el aƱo con precipitaciones anuales totales de menos de 100 mm en todos los lugares excepto en el extremo sureste.

2.4 Vida vegetal

A causa de la gran variedad climĆ”tica y topogrĆ”fica, China es rica en diferentes especies vegetales. La mayor parte de la vegetación original ha desaparecido a causa de siglos de asentamientos humanos y cultivos intensivos. Los bosques, que ocupan el 20,6% del territorio total, se han conservado generalmente en las regiones montaƱosas mĆ”s inhóspitas.

Al sur del valle de Xi Jiang se pueden encontrar densas selvas tropicales lluviosas, formadas por especies perennes de hoja ancha, algunas con mĆ”s de 50 m de altura, entremezcladas con palmeras. Una extensa región de vegetación subtropical se extiende al norte del valle del YangtzĆ© y al oeste de la meseta Tibetana. Esta región es muy rica en especies, como la encina, ginkgo, bambĆŗ, pino, azalea y la camelia. TambiĆ©n se pueden encontrar bosques con laureles y magnolias, y un sotobosque de arbustos mĆ”s pequeƱos y matorrales de bambĆŗ. A mayor altitud dominan las conĆ­feras y los pastos de montaƱa.

Al norte del valle del YangtzĆ© originalmente habĆ­a un bosque caducifolio de hoja ancha. Las principales especies que hoy se mantienen son diferentes variedades de robles, fresnos, olmos y arces; hacia el norte, en Dongbei Pingyuan (Manchuria), florecen el tilo y el abedul. Las mĆ”s importantes reservas madereras de China se encuentran en las montaƱas al norte de esta región, donde todavĆ­a quedan grandes bosques de conĆ­feras dominados por alerces. La llanura de Dongbei Pingyuan (Manchuria), que hoy se utiliza como superficie de cultivo, estuvo dominada por un bosque de estepa (herbĆ”ceas entremezcladas con Ć”rboles).

En la zona oriental de la frontera con Mongolia aparecen praderas o estepas cubiertas con hierbas resistentes a la sequĆ­a. La vegetación de esta región, sin embargo, ha sido reducida por el excesivo pastoreo y la erosión del suelo. Las regiones mĆ”s Ć”ridas del noroeste se caracterizan por macizos de plantas herbĆ”ceas separados por extensas Ć”reas estĆ©riles; aquĆ­ dominan las especies que viven en terrenos salinos. La vegetación de tundra, algo mĆ”s exuberante, formada por hierbas y flores, se encuentra en la mayor parte de la alta meseta del TĆ­bet. En localizaciones mĆ”s favorables, a lo largo de las regiones Ć”ridas, pueden darse algunas especies de arbustos grandes y hasta Ć”rboles, y en muchas Ć”reas de montaƱa se pueden encontrar bosques de abetos y pĆ­ceas.

2.5 Vida animal

Los diversos hĆ”bitats de China hacen posible la vida de una amplia variedad de fauna, desde especies Ć”rticas en Dongbei Pingyuan (Manchuria), hasta numerosas especies tropicales en el sur del paĆ­s. Algunas especies, ya extinguidas en otros lugares, aĆŗn sobreviven en China, como el gran pez poliodóntido del rĆ­o YangtzĆ©, especies de cocodrilos y salamandras, el panda gigante (que habita de forma exclusiva en el suroeste del paĆ­s) y el ciervo de agua chino (que se puede encontrar sólo en China y Corea).

En el sur tropical abundan distintos tipos de primates, entre los que se encuentran el gibón y el macaco, al igual que distintas especies de simios y monos. Confinados a las Ć”reas mĆ”s lejanas hay algunos ejemplares de grandes carnĆ­voros, como osos, tigres y leopardos, estos Ćŗltimos distribuidos en la periferia de las regiones mĆ”s pobladas; en el norte de Dongbei Pingyuan (Manchuria) hay leopardos, en el TĆ­bet se encuentran leopardos nivales, y en el extremo meridional se puede observar el leopardo moteado. Los carnĆ­voros de menor tamaƱo estĆ”n mĆ”s extendidos y son numerosos localmente, como el zorro, el lobo, el perro mapache y el gato de algalia. En las tierras altas y cuencas del oeste habitan antĆ­lopes, gacelas, gamuzas, caballos salvajes, venados y otros animales ungulados, mientras que en el norte de Dongbei Pingyuan (Manchuria) se puede encontrar el ratón de Alaska. Las aves son muy diversas y engloban faisanes, pavos reales, loros, garzas y grullas.

AdemĆ”s de los animales domĆ©sticos mĆ”s comunes se puede encontrar el bĆŗfalo de agua, un importante animal de carga en el sur, el camello, que se utiliza en los terrenos Ć”ridos del norte y oeste, y el yak, un animal similar al buey, semidomesticado, que se utiliza en las tierras altas del TĆ­bet.

La vida marina es abundante, especialmente a lo largo de la costa sureste y comprende platija, bacalao, atĆŗn, sepia, cangrejo marino, gambas, camarones y delfines. Los rĆ­os de China contienen una gran variedad de especies de carpas, asĆ­ como salmón, trucha, esturiones, siluro y el delfĆ­n de rĆ­o chino. Son muy frecuentes las piscifactorĆ­as en el interior de China.

2.6 Recursos minerales

A causa de su diversidad geológica, China posee una gran variedad de recursos minerales; aunque carece de vanadio, cromo y cobalto. Los depósitos minerales estĆ”n distribuidos de una manera muy amplia a lo largo de todo el paĆ­s; las principales regiones mineras son el sur de Dongbei Pingyuan (Manchuria), la penĆ­nsula de Liaodong y las tierras altas del sur. Sólo en la meseta del TĆ­bet y en las altas montaƱas que la rodean no se han descubierto depósitos minerales de importancia.

China estĆ” bien dotada de recursos energĆ©ticos. Se cree que las reservas de carbón llegan hasta los 11 trillones de t, la mayor parte de ellas en Dongbei Pingyuan (Manchuria) y Ć”reas adyacentes del norte de China. Las reservas de petróleo se estiman en mĆ”s de 20.000 millones de t, cuyo nĆŗcleo ha sido descubierto en la costa. Sus reservas petroleras estĆ”n consideradas las segundas del mundo, despuĆ©s de Arabia SaudĆ­. Otros depósitos se localizan en Dongbei Pingyuan (Manchuria) y en las provincias noroccidentales de Shaanxi, Gansu y Qinghai, y en la región autónoma uigur de Xinjiang. Los depósitos de pizarras bituminosas estĆ”n localizados sobre todo en Liaoning y Guangdong.

Entre las menas de minerales metĆ”licos, las de mineral de hierro se estiman en mĆ”s de 40.000 millones de t. La mayor parte de los grandes depósitos, sobre todo en el sur de Dongbei Pingyuan (Manchuria), norte de Hebei y Mongolia Interior (Nei Monggol), son en su mayorĆ­a de baja calidad. Hay algunos depósitos de hematites de gran pureza en Liaoning y Hubei, en el valle del YangtzĆ©; tambiĆ©n se han descubierto extensos depósitos en Hainan. Existen importantes reservas de mineral de aluminio, que se encuentran sobre todo en Liaoning y Shandong; en 2004 la producción anual fue de 6.670.000 de toneladas. Ese mismo aƱo se extrajeron 110.000 t de estaƱo (un 8% de la producción mundial), un metal que se encuentra en Yunnan y la región autónoma zhuang de Guangxi. China tiene las mayores reservas mundiales tanto de antimonio como de tungsteno; este Ćŗltimo se puede encontrar en las tierras altas del norte de Xi Jiang y los mayores depósitos de antimonio estĆ”n en Hunan.

China tambiĆ©n tiene grandes reservas de magnesita, molibdeno, mercurio y manganeso. Sin embargo, las reservas de plomo, cinc y cobre son menores. Se ha encontrado uranio en distintas localidades, en especial en Dongbei Pingyuan (Manchuria) y en el Noroeste. Otros recursos que existen en bastante cantidad son fosfatos, sal, talco, mica, cuarzo, sĆ­lice y fluorita.

2.7 Temas medioambientales

La Constitución china de 1978 fue la primera que proporcionó algunas medidas de protección medioambiental en un paĆ­s que hasta ese momento habĆ­a tenido una dedicación exclusiva al aumento de la producción nacional. Se ha establecido una Oficina de Protección Medioambiental bajo la autoridad del Consejo de Estado que, aunque no cuenta con poderes de regulación, sĆ­ coordina soluciones para los problemas medioambientales. El Instituto Nacional de Protección Medioambiental vigila el uso de productos quĆ­micos, herbicidas e insecticidas. El principal avance en este campo, viene dado por la reforestación, control de la erosión y conservación del agua. Se han realizado proyectos a gran escala para aprovechar los principales sistemas fluviales del paĆ­s. Un importante componente de la protección medioambiental en China son las terrazas, un mĆ©todo de cultivo que se ha practicado con Ć©xito durante siglos; combinadas con la plantación de Ć”rboles y la construcción de pequeƱas presas, proporcionan un importante control de la erosión y una importante medida en el Ć”mbito local para garantizar el abastecimiento de agua.

La población enorme y en aumento de China, y su notable crecimiento económico, puede afectar tanto al medioambiente global como a los ecosistemas dentro de sus fronteras. Las restricciones de agua en todo el paĆ­s, especialmente en las Ć”reas urbanas, pueden constituir un problema aĆŗn mĆ”s serio a medida que el futuro aumento de la cantidad de agua utilizada amenace los recursos disponibles. La mayorĆ­a de los rĆ­os de la nación, especialmente en las Ć”reas urbanas, estĆ”n seriamente contaminados. No obstante, se estĆ” poniendo en prĆ”ctica un sistema de autorizaciones para eliminar aguas residuales, junto con un sistema impositivo sobre la contaminación, segĆŗn el cual los que contaminan pagan los costos de la limpieza. El consumo de energĆ­a de China en 1990 llegó a representar casi el 11% de las emisiones de monóxido de carbono planetarias. El carbón, que suministra el 80% de las necesidades energĆ©ticas de China, es la causa en muchas ciudades, de una fuerte contaminación del aire, asĆ­ como de la lluvia Ć”cida. La conversión de carbón a electricidad contribuirĆ­a a reducir la gravedad de estos problemas. El 20,6% de la superficie de China estĆ” cubierta de bosques, pero la deforestación estĆ” amenazando el hĆ”bitat de muchas de las miles de especies que habitan en este paĆ­s, algunas de las cuales son Ćŗnicas de China. TambiĆ©n se ha producido un rĆ”pido incremento del Ć”rea desĆ©rtica, y la erosión del suelo es un serio problema como contrapartida de la producción agrĆ­cola. No obstante, se estĆ”n realizando esfuerzos para mejorar la situación como la puesta en prĆ”ctica de programas de reforestación, que en gran parte se orienta al suministro de combustible de leƱa. TambiĆ©n se han plantado bosques como barreras de arena para combatir la desertización. Con el fin de preservar el hĆ”bitat animal, el gobierno chino ha establecido 400 zonas de protección nacional que cubren el 14,8% de la superficie total del paĆ­s, y ha ratificado numerosos acuerdos internacionales relacionados con la conservación.

3 POBLACIƓN

La población china es aproximadamente en un 93% de etnia china o han. Los chinos pertenecen sobre todo al grupo mongoloide y se diferencian no tanto por su etnia, como por las variaciones lingüísticas. El 7% de la población minoritaria se asienta sobre casi el 60% de la superficie de China, otorgĆ”ndoles una importancia mayor de lo que su porcentaje podrĆ­a sugerir.

3.1 Grupos Ʃtnicos

MĆ”s de 70 millones de personas componen las 56 minorĆ­as nacionales existentes en el paĆ­s. La mayor parte de estos grupos se distinguen de los chinos por el idioma o la religión, mĆ”s que por sus caracterĆ­sticas raciales. Las principales minorĆ­as son los zhuang, relacionados con los thai, que constituyen alrededor de 14,6 millones de habitantes, situados mayoritariamente en la región autónoma de Guangxi; los hui, alrededor de 7,9 millones, en la región autónoma hui de Ningxia, en Gansu y en Qinghai; los turco hablantes uigures, alrededor de 6,5 millones, en la región autónoma uigur de Xinjiang; los yi, alrededor de 5,9 millones, en Sichuan, Yunnan y Guangxi; los miao, alrededor de 5,5 millones, en Guizhou, Hunan y Yunnan; los tibetanos, alrededor de 4,3 millones, en la región autónoma del TĆ­bet y en Qinghai, y los mongoles, alrededor de 3,7 millones, en la región autónoma de Mongolia Interior, en Gansu y en Xinjiang. Otros grupos son coreanos, bonyei y manchĆŗes; estos Ćŗltimos son descendientes de los pueblos que conquistaron China en el siglo XVII y establecieron la dinastĆ­a Qing o ManchĆŗ. Son casi imposibles de distinguir de los chinos han.

3.2 Características de la población

El primer censo nacional desde la llegada al poder de los comunistas se realizó en 1953, en un esfuerzo para evaluar los recursos humanos disponibles para el primer plan quinquenal. En ese momento, se descubrió que la población de China ascendĆ­a a 582.600.000 habitantes. Un segundo censo realizado en 1964 mostró un crecimiento de hasta 694.580.000 habitantes; el tercero, en 1982, revelaba una población (excluyendo a Hong Kong, Macao y Taiwan) de 1.008.180.000 habitantes, haciendo de China el primer paĆ­s del mundo que sobrepasó los mil millones. Entre 1953 y 2008 la tasa de mortalidad cayó desde 22,5 hasta 7 fallecidos por cada 1.000 habitantes; la tasa de natalidad ha descendido desde el 45‰ en 1953 al 13,70 ‰ en 2008. Como resultado de ello, la tasa de crecimiento de la población ha descendido desde el 1,50% (1950–1960) hasta el 0,63% (2008). A pesar de todo, a ese ritmo China duplicarĆ” su nĆŗmero de habitantes en 110 aƱos.

El descenso en la fertilidad registrado entre las dĆ©cadas de 1950 y 1980 se vio muy favorecido por los esfuerzos gubernamentales para promocionar el matrimonio tardĆ­o y mĆ”s recientemente para inducir a las familias chinas a tener un Ćŗnico hijo. Este programa se ha complementado con la expansión continua de los servicios de salud pĆŗblicos que proporcionan información sobre el control de la natalidad y mĆ©todos anticonceptivos con un costo muy pequeƱo o incluso nulo. En 1984 se estimaba oficialmente que el 70% de todas las parejas casadas en edad fĆ©rtil utilizaban mĆ©todos anticonceptivos y que 24 millones de parejas habĆ­an prometido formalmente no tener mĆ”s que un hijo. El aborto es legal y hay presiones sociales hacia las mujeres que tienen ya un hijo o mĆ”s y se quedan embarazadas en el sentido de que no continĆŗen adelante con ese embarazo. Las minorĆ­as nacionales, generalmente, han sido excluidas del programa gubernamental de control de la natalidad, como respeto hacia las culturas y creencias de otras etnias, con el fin de no daƱar la amplia autonomĆ­a cultural de la que gozan.

En 1980 el gobierno informó de que el 65% de la población era menor de 30 aƱos, por lo tanto una gran parte de la población china estarĆ” en una edad fĆ©rtil durante al menos algunas dĆ©cadas mĆ”s. En septiembre de 1982, la cĆŗpula del Partido Comunista Chino (PCCh) declaró que la nación debĆ­a limitar su población a 1.200 millones hacia finales de siglo, una meta que requerĆ­a la intensificación de los esfuerzos de control de la población. Gracias a las numerosas medidas aplicadas, se ha conseguido una tasa de fertilidad de tan sólo 1,77 hijos por mujer (2008).

China tiene una población (segĆŗn estimaciones para 2008) de 1.330.044.600 habitantes. La densidad de población es de 143 hab/km², aunque la distribución geogrĆ”fica es muy desigual. La gran mayorĆ­a de la población se encuentra en las diecinueve provincias del este, que históricamente han formado el corazón de China; esto refleja el distinto uso del suelo que se ha hecho históricamente, asĆ­ como modelos de asentamiento diferenciados entre los chinos han (en el este) y las demĆ”s etnias (en el oeste). Desde la dĆ©cada de 1960 el gobierno chino ha promocionado el asentamiento en las tierras de las provincias occidentales y las regiones autónomas.

A pesar de la industrialización, China sigue siendo un paĆ­s predominantemente rural y agrĆ­cola. Aunque ya existĆ­an grandes concentraciones urbanas, incluso antes de la Ć©poca del Imperio romano, el paĆ­s en su conjunto se ha ido urbanizando poco a poco. Sin embargo, alrededor del 59% de la población se puede clasificar como rural.

La migración espontĆ”nea desde el campo a las ciudades fue prohibida desde mediados de la dĆ©cada de 1950 a causa de la falta de trabajo para los habitantes que llegaban a la ciudad. Esta prohibición fue consecuencia de la idea de Mao Zedong de que las distinciones de clases entre la población urbana y la rural era la gran causa de las desigualdades sociales en China. Durante la dĆ©cada de 1960 y la primera mitad de la de 1970 (en especial durante el periodo de la Revolución Cultural) los chinos desarrollaron una campaƱa para enviar al campo durante varios aƱos, o incluso de manera definitiva, a jóvenes educados en las ciudades. Este movimiento debĆ­a proporcionar ciertas habilidades a las zonas rurales y por lo tanto reducir el interĆ©s de los campesinos por emigrar a la ciudad. La importancia del programa de ‘ruralización’ fue decayendo tras la muerte de Mao en 1976 y fue eliminado de hecho a finales de 1978, momento en que empezó a aumentar la migración hacia la ciudad.

El cambio de residencia dentro de las ciudades tambiĆ©n estĆ” controlado por el gobierno: una persona debe tener la aprobación gubernamental y la garantĆ­a de una residencia y empleo antes de trasladarse. Se ha producido un cierto movimiento dentro de las grandes ciudades como consecuencia de la destrucción a gran escala de viviendas antiguas en mal estado y su sustitución por edificios de apartamentos de cuatro y cinco pisos.

3.3 Divisiones administrativas

El territorio chino estĆ” integrado por 22 provincias (Anhui, Fujian, Gansu, Guangdong, Guizhou, Hainan, Hebei, Heilongjiang, Henan, Hubei, Hunan, Jiangsu, Jiangxi, Jilin, Liaoning, Qinghai, Shaanxi, Shandong, Shanxi, Sichuan, Yunnan y Zhejiang), 5 regiones autónomas (Guangxi, Mongolia Interior, Ningxia, TĆ­bet y Xinjiang) y 4 municipalidades especiales (PekĆ­n, Shanghai, Tianjin, Chongqing). Las regiones autónomas fueron establecidas en Ć”reas que originalmente tenĆ­an poblaciones de etnia no china. TĆ­bet, una de las regiones autónomas chinas, tiene un gobierno en el exilio considerado por parte de un sector de la opinión pĆŗblica internacional como el legĆ­timo representante de un Estado soberano ocupado. Taiwan, por su parte, es considerada por el gobierno de la China continental como una provincia renegada. Finalmente, Hong Kong adquirió en 1997 la categorĆ­a de Región Administrativa Especial tras su retrocesión a China, al igual que sucedió con Macao en 1999.

3.4 Ciudades principales

Las ciudades mĆ”s antiguas de China evolucionaron en el siglo XV a.C. bajo la dinastĆ­a Shang. Las ciudades han sido importantes desde hace muchos siglos para cubrir las funciones ceremoniales (administrativas y religiosas), asĆ­ como de lugar de residencia de la corte china y como lugar de intercambio comercial. En el siglo XX, y especialmente desde la dĆ©cada de 1950, las ciudades chinas han ganado gran relevancia como centros industrialmente productivos. Sin embargo, han mantenido su significado ceremonial bajo el gobierno comunista.

SegĆŗn estimaciones para 1992, China tenĆ­a 40 ciudades cuyas poblaciones superaban el millón de habitantes. La ciudad mĆ”s grande de China y su principal puerto es Shanghai (13.680.800 habitantes); PekĆ­n (11.807.000 habitantes), la capital y centro cultural de China; Tianjin (9.393.100 habitantes), una ciudad portuaria en la unión del rĆ­o Hai y el Gran Canal; Shenyang (6.800.000 habitantes); Wuhan (7.811.900 habitantes), una ciudad portuaria en la confluencia de los rĆ­os Han y YangtzĆ©, y Cantón (7.607.220 habitantes), ciudad portuaria en el Zhu Jiang (rĆ­o Perla). Todas estas ciudades han desarrollado grandes zonas industriales.

3.5 Idioma

Los chinos han disfrutado de un idioma escrito desde hace mĆ”s de 3.000 aƱos. Aunque el idioma chino estĆ” formado por mĆ”s de una docena de grandes dialectos hablados, toda el sistema de escritura se realiza con los mismos caracteres. Esta unidad literaria ha sido importante para la unidad histórica del pueblo chino desde la dinastĆ­a Shang (c. 1766-c. 1027 a.C.).

Uno de los ambiciosos esfuerzos del gobierno comunista chino desde 1949 ha sido la modificación de la lengua china. El idioma hablado de forma oficial por los chinos es el putonghua (habla corriente); a veces los occidentales lo conocen como mandarĆ­n y es el dialecto del norte de China. En 1955 este dialecto fue declarado idioma comĆŗn en la Conferencia Nacional de la Reforma del Idioma Chino Escrito. Se han realizado grandes esfuerzos tambiĆ©n para modificar el idioma escrito. El uso de caracteres simplificados (caracteres escritos con menos trazos), se ha incrementado poco a poco, lo que ha facilitado el objetivo del gobierno de ampliar la alfabetización.

En 1977 los chinos realizaron una petición formal a las Naciones Unidas para utilizar los caracteres del alfabeto latino en la escritura o grafĆ­a pinyin (ortografĆ­a fonĆ©tica) con el fin de poder transcribir los nombres de lugares en China de acuerdo a pautas comprensibles para el resto del mundo; se creó este mĆ©todo de transcripción a finales de la dĆ©cada de 1950 y ha sufrido modificaciones constantes. Algunos dirigentes chinos aseguran que el pinyin llegarĆ” finalmente a reemplazar los caracteres chinos y se convertirĆ” en el idioma chino escrito; sin embargo, no se espera que esto ocurra en un futuro cercano.

Los mĆ”s de 70 millones de personas que componen las minorĆ­as Ć©tnicas de China tienen sus propios idiomas hablados, entre los que se encuentran mongol, tibetano, miao, tai, uigur y kazajo. Antes muchos de estos idiomas minoritarios no tenĆ­an una forma escrita, pero el gobierno chino ha animado el desarrollo de formas escritas de estos idiomas, utilizando el pinyin. TambiĆ©n se anima a estos grupos a continuar las tradiciones que promocionarĆ”n el conocimiento de su herencia etnolingüística. El dialecto mandarĆ­n es el que se enseƱa en las escuelas, generalmente como segundo idioma y su conocimiento es indispensable en toda China. VĆ©ase Lengua china.

3.6 Religión

Una de las primeras acciones del Partido Comunista Chino (PCCh) al obtener el control en 1949 fue eliminar, de modo oficial, la religión organizada. Antes, las religiones dominantes en China habĆ­an sido el confucianismo, el taoĆ­smo y el budismo. A causa de la naturaleza casi secular del confucianismo, y debido a que la mayor parte de los chinos estaban vinculados a las tres grandes creencias, por lo que carecĆ­an de una fuerte fidelidad a una sola religión, la población ofreció muy poca resistencia al cambio del ejecutivo.

AdemĆ”s del budismo y taoĆ­smo, las principales religiones formales de China, eran el cristianismo y el islam. La mayor parte de los templos y escuelas de estas cuatro religiones se secularizaron. Sólo con la Constitución de 1978 se permitió el desarrollo oficial de las religiones organizadas en China, aunque tambiĆ©n establecĆ­a que la población tenĆ­a el derecho a no tener creencias religiosas y ‘a propagar el ateĆ­smo’.

Desde que se han garantizado los derechos religiosos, los grupos cristianos en las ciudades y las sectas budistas tanto en el campo como en la ciudad han sido muy activas. Los chinos musulmanes Ć©tnicos (o hui) asĆ­ como los pueblos musulmanes minoritarios como los uigur, kazajos y kirguises, mantienen su fe en el islam, pero hoy practican su religión de un modo mĆ”s abierto.

4 EDUCACIƓN Y CULTURA

China tiene una larga y rica tradición cultural en la cual ha desempeƱado un importante papel la educación. A lo largo de todo el periodo imperial (221 a.C.-1912 d.C.) tan sólo los que tenĆ­an una educación tenĆ­an posiciones de liderazgo social y polĆ­tico. La primera Universidad se estableció en el aƱo 124 a.C. para formar a los futuros funcionarios pĆŗblicos en el conocimiento del confucianismo y los clĆ”sicos chinos. Sin embargo, a lo largo de la historia muy pocos chinos han sido capaces de llegar a aprender de forma total y correcta el complejo idioma y su literatura. Se estima que en 1949 tan sólo el 20% de la población de China sabĆ­a leer y escribir. Para los comunistas chinos, el analfabetismo era un obstĆ”culo para la promoción de sus programas polĆ­ticos, por lo que combinaron la propaganda polĆ­tica con el desarrollo educativo.

4.1 Educación

Uno de los programas mĆ”s ambiciosos del Partido Comunista ha sido el establecimiento de la educación pĆŗblica universal para toda la población. En los dos primeros aƱos del nuevo gobierno (1949-1951) mĆ”s de 60 millones de campesinos acudieron a las ‘escuelas de invierno’, establecidas para aprovechar la estación de descanso de los trabajadores agrĆ­colas. Mao declaró que una meta primordial de la educación era reducir las diferencias de clase por lo que era fundamental reducir las distancias sociales entre el trabajo manual y el intelectual, entre los residentes en la ciudad y el campo, y entre el obrero y el campesino.

El desarrollo mĆ”s radical en la educación de China tuvo lugar entre 1966 y 1978. Durante la Revolución Cultural de 1966 a 1969, se cerraron prĆ”cticamente todas las escuelas del paĆ­s. Los 131 millones de jóvenes que estaban inscritos en las escuelas primarias y secundarias tuvieron que abandonarlas; muchos se involucraron en los esfuerzos de Mao por crear una nueva elite china, en la que hubiera jóvenes crĆ­ticos que revisaran los programas polĆ­ticos gubernamentales. En 1968 y 1969 se volvieron a abrir, pero hasta el periodo de 1970 a 1972 todas las instituciones de educación superior permanecieron cerradas.

Las polĆ­ticas gubernamentales respecto a la educación cambiaron de un modo drĆ”stico. Los trece aƱos tradicionales desde el jardĆ­n de infancia hasta el grado 12 se vieron reducidos a un plan de 9 o 10 aƱos para la escuela primaria y secundaria (o media). Las escuelas universitarias que tradicionalmente habĆ­an tenido una duración de cuatro o cinco aƱos, adoptaron un programa de tres aƱos, y parte de este tiempo se dedicaba a un trabajo productivo para apoyar a la escuela. TambiĆ©n se hizo indispensable un periodo de dos aƱos de trabajos manuales para la mayor parte de los graduados de la escuela secundaria que deseaban continuar estudios universitarios.

Tras la muerte de Mao en 1976 se revisó profundamente esta polĆ­tica. Como resultado de ello, y a causa de un creciente interĆ©s por el desarrollo de las Ć”reas cientĆ­ficas, el sistema educativo volvió a ser similar a la de los aƱos anteriores a la Revolución Cultural. Los programas para la escolarización primaria y secundaria (en sus dos ciclos) se fueron reajustando gradualmente para volver a los doce aƱos de estudio, y los graduados del segundo ciclo de la escuela secundaria o preparatoria ya no tuvieron que ir a trabajar al campo durante dos aƱos para poder acceder a las escuelas universitarias.

Un cambio importante en el sistema educativo ha sido la reinstauración de pruebas o exĆ”menes normalizados para el acceso a la universidad. Estos exĆ”menes formaban parte del mecanismo de ascensos existente en China antes de la Revolución Cultural. Durante esos aƱos, los antitradicionalistas fueron capaces de eliminar los exĆ”menes de ingreso argumentando que se favorecĆ­a a una elite que tenĆ­a una herencia intelectual que procedĆ­a de sus familias. Cuando se volvieron a abrir las universidades, entre 1970 y 1972, se permitió la admisión de muchos candidatos por sus actividades polĆ­ticas, sus actividades dentro del partido y por el apoyo que recibĆ­an del mismo. Este mĆ©todo de selección terminó en 1977 cuando los dirigentes chinos lanzaron su nueva campaƱa para las ‘cuatro modernizaciones’. El gobierno estableció como objetivo la rĆ”pida modernización de la agricultura, industria, defensa, ciencia y tecnologĆ­a que requerĆ­a niveles elevados de preparación. Estos programas educativos tenĆ­an que basarse necesariamente en habilidades teóricas y formales, mĆ”s que en actitudes polĆ­ticas o en el espĆ­ritu revolucionario.

En la actualidad, la tasa de alfabetización es del 87,3% de adultos. En el curso 1998–1999 habĆ­a 145 millones de alumnos en las escuelas primarias y alrededor de 90,7 millones de estudiantes en las secundarias; en 1949 habĆ­an sido alrededor de 24 millones los estudiantes de escuela primaria y 1.250.000 los de las secundarias. Se estima que unos 12,1 millones de estudiantes estĆ”n inscritos en las mĆ”s de 1.000 instituciones chinas de educación superior.

La educación superior china estĆ” caracterizada en la actualidad por el ‘sistema de punto clave’. Bajo este programa, los estudiantes mĆ”s prometedores son colocados en escuelas seleccionadas de puntos considerados bĆ”sicos, que se especializan en el entrenamiento de una elite acadĆ©mica. Los estudiantes que terminan la escuela secundaria pueden acudir a escuelas universitarias y a distintas escuelas tĆ©cnicas y de formación profesional. Entre las universidades mĆ”s importantes de China destacan la Universidad de PekĆ­n (1898), la Universidad de Hangzhou (1952), la Universidad Fudan (1905), en Shanghai, y la Universidad de Ciencia y TecnologĆ­a de China (1958), en Hefei. Toda la educación superior en China es gratuita. Una innovación en el sistema educativo de China es la Universidad por Televisión (vĆ©ase Comunicaciones, mĆ”s adelante).

4.2 Vida cultural

Las metas educativas del gobierno comunista chino han sido fomentadas por otros medios ademĆ”s de la educación formal. Durante la dĆ©cada de 1960 y la de 1970, se consideró que las obras de teatro, la ópera, la literatura popular y la mĆŗsica tenĆ­an capacidad de ser utilizados como elementos educativos; en 1964 la Ɠpera de PekĆ­n, con una historia de 200 aƱos de actuaciones ininterrumpidas en China, presentó el Festival de la Ɠpera de PekĆ­n en Temas ContemporĆ”neos, bajo la organización de Jiang Qing, la esposa de Mao. Se escribieron nuevas obras que combinaban drama e ideologĆ­a, con tĆ­tulos como Tomando la montaƱa Tigre por estrategia. Se introdujeron modificaciones culturales similares en el ballet chino, donde se introdujeron elementos de bailes populares tradicionales, artes marciales, gimnasia y ballet clĆ”sico en producciones populares. Estos espectĆ”culos se representaban no sólo en las grandes ciudades sino tambiĆ©n en las ciudades pequeƱas y en el campo.

Con el aumento, desde mediados de la dĆ©cada de 1970, de intercambios culturales extranjeros, la actitud oficial hacia los aspectos propagandĆ­sticos de las artes se habĆ­a relajado. La literatura extranjera, prohibida en la dĆ©cada de 1960, comenzó a reaparecer en China. En 1978 y 1979 la Editorial Popular de Literatura realizó unas 200 traducciones de trabajos extranjeros, entre ellas numerosas obras de Ć©xito en Occidente.

En la mĆŗsica popular el cambio fue celebrado oficialmente en un informe, en el que se indicaba que las nuevas canciones que aparecĆ­an a comienzos de la dĆ©cada de 1980 se debĆ­an a que los chinos ‘estaban cansados de las viejas canciones y las directrices con que crecieron’. El gobierno chino reconocĆ­a tambiĆ©n que las artes proporcionan una salida social Ćŗtil; los cines estaban repletos y los grupos de acróbatas, artistas de circo y juglares, asĆ­ como espectĆ”culos de ballet y ópera itinerantes actuaban en teatros abarrotados, en pequeƱas ciudades y centros de comunas. Durante la dĆ©cada de 1980, China ha mostrado una creciente apertura hacia los mĆŗsicos clĆ”sicos y populares occidentales.

El ambiente cultural en China es poco estable a causa de los cambios repentinos por parte de las autoridades. En 1957, durante la campaƱa de las ‘cien flores’, se animó a escritores e intelectuales a exponer en pĆŗblico sus opiniones y proporcionar perspectivas de progreso en el gobierno para asĆ­ conocer las necesidades de la población. Las crĆ­ticas suscitadas por esta campaƱa fueron tan fuertes que inmediatamente el gobierno se volvió atrĆ”s y muchos intelectuales se vieron perseguidos por las opiniones que habĆ­an expresado. Semejantes actitudes llevaron a los artistas, escritores, compositores y cineastas de China a responder con cautela al estĆ­mulo gubernamental de una expresión cultural independiente a finales de la dĆ©cada de 1970 y comienzos de la siguiente.

4.3 Instituciones culturales

PekĆ­n, Shanghai y Cantón, desempeƱan un papel dirigente en la cultura de China; la mayor parte de los museos, teatros y exposiciones culturales mĆ”s conocidos se encuentran en estas ciudades.

PekĆ­n sigue siendo el corazón cultural de la nación. Cerca de la famosa plaza de Tiananmen estĆ”n la Ciudad Prohibida, antigua residencia del emperador convertida hoy en museo abierto al pĆŗblico; el Mausoleo de Mao Zedong y el Museo de la Revolución China. TambiĆ©n se encuentra en PekĆ­n el famoso ‘muro de la democracia’ donde se colocaban carteles y pósteres que expresaban la opinión de los ciudadanos sobre los cambios en la polĆ­tica gubernamental tras la muerte de Mao en 1976 (fueron oficialmente prohibidos a finales de la dĆ©cada). Cerca de PekĆ­n estĆ”n el palacio de Verano, el templo del Cielo, las tumbas de la dinastĆ­a Ming y la Gran Muralla china; estos grandes monumentos de las dinastĆ­as Ming y Qing proporcionan un amplio foco cultural para una población china cada vez mĆ”s cambiante.

En Shanghai se encuentran el Museo de Arte e Historia, que alberga una de las mejores colecciones de arte de China y el Museo de Ciencias Naturales. TambiĆ©n se encuentra aquĆ­ el jardĆ­n del mandarĆ­n Yu, que ejemplifica un importante programa de apoyo gubernamental a las artes; despuĆ©s de 1949 el gobierno comunista abrió muchas casas privadas, jardines y parques de los mĆ”s ricos hacendados, convirtiĆ©ndolos en museos pĆŗblicos. En todas las ciudades se han convertido en lugares populares de paseo y encuentro para tomar el tĆ©, hablar con los amigos y para conocer las diferencias de clase entre los ricos y los pobres antes de 1949.

En Cantón se encuentra uno de los mayores zoológicos de China, el Museo de Cantón, el Mausoleo Sun Yat-sen, el parque Yuexiu, con la pagoda Zhenhai de la dinastĆ­a Ming; el templo de los Seis Ɓrboles Banyan y la mezquita Huaisheng, fundada en el aƱo 627 d.C. Cerca de Xi’an (Sian) se ubica uno de los mĆ”s impresionantes trabajos de la antigüedad china: un ejĆ©rcito de terracota de mĆ”s de 6.000 figuras de tamaƱo natural descubiertas en la tumba del emperador Qing, QuinShi Huangdi, que murió en el 210 a.C.

La promoción de ampliar el conocimiento nacional desde la revolución de 1949, ha llevado a establecer a cada ciudad algĆŗn tipo de monumento que haya contribuido al desarrollo cultural de China. En las ciudades que carecen de museos, por lo general se transforman antiguas haciendas en jardines abiertos o lugares de encuentro, lo que les confiere un carĆ”cter mĆ”s urbano.

5 GOBIERNO

China ha tenido un gobierno organizado desde el establecimiento de la dinastĆ­a Shang, alrededor del 1726 a.C., convirtiĆ©ndola en una de las naciones mĆ”s antiguas del mundo. A lo largo de la historia, el control polĆ­tico de la enorme población china fue administrado por una serie de gobiernos locales de fuerte control, por una capital central y por una corte cuyo carĆ”cter polĆ­tico varió segĆŗn las circunstancias históricas. Desde que el 1 de octubre de 1949 llegaron al poder los comunistas chinos, se ha hecho evidente una tendencia hacia el establecimiento de un gobierno nacional centralizado en PekĆ­n. Esta unidad se ha logrado en gran parte a travĆ©s de la autoridad personal y el liderazgo de Mao, y a la estructura gubernamental establecida por el Partido Comunista Chino. A esta estructura moderna le fue dando forma la primera Constitución promulgada en 1954 y revisada en 1975. En 1978 se promulgó una tercera Constitución (efectiva desde el 1 de enero de 1980) que reflejaba los cambios en las polĆ­ticas gubernamentales despuĆ©s de la muerte de Mao. El 4 de diciembre de 1982 fue promulgada una nueva Constitución (que serĆ­a enmendada en 1993, 1999 y 2004).

5.1 Poder ejecutivo

Por esta Constitución el presidente es elegido para un mandato de cinco aƱos por la Asamblea Nacional Popular. Sin embargo, el cargo de presidente es sobre todo ceremonial. Los poderes ejecutivos residen en el Consejo de Estado, encabezado por el primer ministro que es el encargado de administrar los diferentes Ć”mbitos de la administración estatal. El mando de las fuerzas militares nacionales corresponde a la Comisión Central Militar. Por lo general, los cargos de mayor autoridad en el gobierno chino son los de primer ministro y secretario general del Partido Comunista; para ocupar estos cargos influye en gran manera la personalidad.

5.2 Poder legislativo

La Asamblea Nacional Popular es el órgano mĆ”s alto del poder estatal en China. Sus miembros son elegidos para periodos de cinco aƱos a travĆ©s de una serie de elecciones indirectas; cada provincia elige un representante (o diputado) para la Asamblea por cada 400.000 personas, habiendo al menos diez diputados representando a cada provincia. La V Asamblea Nacional Popular, elegido en 1978, estaba formado por 3.497 diputados, casi la mitad de ellos trabajadores y campesinos. La VI Asamblea Nacional Popular, que se reunió en junio de 1983, tenĆ­a 2.978 delegados. La VII Asamblea se reunió en marzo de 1988, la VIII Asamblea en marzo de 1993 y la IX Asamblea en marzo 1998.

La Asamblea Nacional Popular tiene poder para aprobar leyes, enmendar la Constitución y aprobar el presupuesto nacional y los planes económicos. TambiĆ©n tiene el poder de elegir y sustituir a los miembros del Consejo de Estado, que es el mĆ”s alto componente en la estructura del gobierno chino.

En la prĆ”ctica, sin embargo, la Asamblea Nacional Popular tiene un poder bastante limitado. A causa de su gran tamaƱo, la Asamblea se reĆŗne sólo de manera irregular para llevar a cabo los temas necesarios. Mientras la Asamblea no tiene sesión, actĆŗa en su lugar un ComitĆ© Permanente, elegido entre sus miembros que tambiĆ©n representa a la Asamblea en una gran variedad de funciones gubernamentales, entre las que se encuentran recibir a delegaciones extranjeras y ratificar o anular tratados con gobiernos extranjeros.

El Consejo de Estado es el cuerpo central gubernamental de la Asamblea Nacional Popular. EstĆ” encabezado por el primer ministro y el viceprimer ministro chinos. Distintos ministros, comisiones y agencias son responsables ante el Consejo.

5.3 Poder judicial

Los chinos han tenido una tradición legislativa y judicial bastante diferente de las de los Estados occidentales. El ordenamiento civil ha sido históricamente competencia de la familia, el vecindario o el gobierno local. De manera general, el proceso judicial chino ha estado mĆ”s interesado por comprender las circunstancias de un crimen individual, para comprender sus causas, que en crear un sistema judicial formalizado. Desde la promulgación de la Constitución de 1978, sin embargo, China ha realizado un esfuerzo considerable para alinear su sistema jurĆ­dico con los modelos occidentales; la Constitución de 1982 garantiza el derecho a una defensa legal. El sistema legal chino tiene tres componentes: un sistema de tribunales, una administración de seguridad pĆŗblica, o componente policial, y una oficina del procurador o fiscal. El mĆ”s alto órgano es el Tribunal Supremo Popular, que asegura el cumplimiento de la Constitución y las regulaciones del Consejo de Estado. En los Ć”mbitos provincial, de condado y municipal se pueden encontrar oficinas de las tres ramas judiciales, mientras que las oficinas de seguridad pĆŗblica funcionan desde el rango de vecindario local.

Una de las razones de que en China no se haya desarrollado un marco legal formal es que el Partido Comunista Chino siempre ha actuado como un mediador informal entre las partes agraviadas. Este papel le ha dado al partido una importante función en los trabajos diarios de la sociedad china, como por ejemplo en la resolución de disputas vecinales, divorcios, peleas familiares y robos menores; por lo general, el secretario local del partido era el mediador en estos casos.

En ocasiones los juicios pĆŗblicos tienen mucha publicidad intentando que sean instructivos para el pĆŗblico chino; el mĆ”s famoso fue el juicio de la ‘banda de los cuatro’ en 1980 y 1981. Mientras los chinos se mueven hacia unas relaciones mĆ”s cercanas con los Estados occidentales, se incrementan las presiones para instituir un cuerpo legislativo y jurĆ­dico mĆ”s formal. Es posible que esto a su vez genere una red asociada de abogados, juzgados y unos procedimientos legales mĆ”s formales.

5.4 Gobierno local

El gobierno local en China estĆ” organizado en tres niveles administrativos bĆ”sicos: las provincias, los condados y las ciudades y localidades administrativas. En el primer nivel, bajo el teórico control del gobierno central, estĆ”n las 22 provincias, 5 regiones autónomas y 4 municipalidades gobernadas directamente (PekĆ­n, Shanghai, Tianjin y Chongqing). En este nivel cabe seƱalar que el gobierno chino incluye a Taiwan como vigĆ©sima tercera provincia, si bien desde 1949 Ć©sta se encuentra en manos de grupos nacionalistas que hubieron de huir a la isla tras la derrota del Guomindang en la guerra civil librada en la China continental. Hong Kong y Macao tienen el rango de regiones administrativas especiales cuya autonomĆ­a estĆ” preservada por sus respectivas constituciones. En el segundo Ć”mbito estĆ”n las prefecturas, condados y municipalidades; en el Ćŗltimo se encuentran las subdivisiones municipales, ciudades y localidades administrativas. En cada uno de estos niveles existen entidades autónomas en Ć”reas donde habitan sobre todo minorĆ­as no chinas.

Desde finales de la dĆ©cada de 1950 hasta la dĆ©cada de 1970, en la mayor parte del territorio chino el nivel correspondiente a las ciudades y localidades administrativas fue reemplazado por comunas como unidades administrativas bĆ”sicas, que con posterioridad fueron divididas en brigadas de producción. Con posterioridad a 1984 se llevó a cabo un programa continuado de reformas administrativas que preveĆ­a la transferencia de la administración de los condados desde las prefecturas a las ciudades dĆ”ndoles un rango similar, asĆ­ como la formación de asambleas populares con el objetivo de generar un crecimiento económico rural bajo el liderazgo urbano. En 1985, dentro de este programa de reformas instauradas por Deng Xiaoping, se completó una campaƱa quinquenal para desmantelar 56.000 comunas rurales.

Aunque cada Ć”mbito de la estructura gubernamental es responsable ante el nivel superior, existe un fuerte nivel de autogobierno en las pequeƱas unidades locales. Esta promesa fue importante para la victoria de los comunistas chinos en 1949. El gobierno desarrolló este gobierno local, que servĆ­a para la discusión pĆŗblica y formaba parte del proceso de gobernación de China. El gobierno en el nivel local es en la actualidad desarrollado mediante un sistema de elecciones libres que ha dado un óptimo resultado.

El eje de la polĆ­tica gubernamental en la dĆ©cada de 1980 consistió en delegar autoridad con el fin de promover el crecimiento. AsĆ­, en 1983 siete ciudades (Chongqing, Wuhan, Shenyang, Dalian, Cantón, Harbin y Xi’an) fueron exoneradas de la jurisdicción provincial y se les permitió tratar con la autoridad central de manera directa; Shanghai obtuvo un estatus similar en 1990. Del mismo modo, las provincias, que pasaron a disponer de sus propias asambleas populares a partir de 1980, obtuvieron un grado similar de autonomĆ­a, de modo tal que incrementaron su poder decisorio para atenuar o desatender las órdenes llegadas del gobierno central. Las reformas económicas privatizadoras de la dĆ©cada de 1980, asĆ­ como la reducción del control central, han hecho que un buen nĆŗmero de autoridades locales en los niveles inferiores se hayan preocupado mĆ”s por obtener beneficios económicos que por la actividad polĆ­tica como tal, lo que ha dado lugar a la aparición de numerosos casos de corrupción.

5.5 Partidos polĆ­ticos

De acuerdo con la Constitución de 1982, China es una dictadura del proletariado encabezada por el Partido Comunista y basada en un frente unido que engloba a otros partidos. En la prĆ”ctica, el Partido Comunista lleva la actividad polĆ­tica nacional. La gran mayorĆ­a de cargos oficiales son ocupados por miembros del mismo.

El Partido Comunista Chino (PCCh) tiene mĆ”s de 52 millones de miembros: aunque esto representa sólo a cerca del 4,5% de la población total, lo convierte en el mayor del mundo. Organizó su primer congreso nacional en 1921 cuando sólo tenĆ­a 57 miembros; el nĆŗmero de Ć©stos creció hasta 10 millones hacia 1956. La organización y funciones del Partido se establecieron con su fundación; en 1982 se aprobó la sexta reorganización del partido durante el XII Congreso; en Ć©l se subrayó la autoridad de su mĆ”ximo dirigente, cuyo tĆ­tulo cambió de presidente a secretario general. El Congreso Nacional es el principal órgano decisorio del partido. El ComitĆ© Central, elegido por el Congreso Nacional, elige al Politburó y a su ComitĆ© Permanente, asĆ­ como al secretario general.

Hay algunas organizaciones polĆ­ticas menores en China, asĆ­ como otros grupos dependientes del rĆ©gimen. Entre estos estĆ”n la Liga DemocrĆ”tica China, la Federación AtlĆ©tica de toda China y la Federación de Mujeres de toda China, pero el Ćŗnico que tiene algĆŗn potencial para influir polĆ­ticamente es la Liga de Jóvenes Comunistas, con unos 50 millones de miembros a finales de la dĆ©cada de 1980. Esta organización desempeƱa un importante papel en el reclutamiento de los jóvenes que quieren prepararse para ingresar en el Partido Comunista al cumplir los 18 aƱos de edad.

5.6 Salud y bienestar social

El gobierno de China cubre todos los servicios sanitarios de sus ciudadanos. Las metas de los servicios sociales fueron un elemento importante en la llegada al poder del Partido Comunista. Los grandes programas pĆŗblicos de bienestar se han encargado de prestar otros servicios tales como la vivienda, la oportunidades profesionales, las pensiones de jubilación y los servicios funerarios.

Los logros mĆ”s impresionantes son los del Ć”rea de sanidad. En 1949 la esperanza de vida en China era de 45 aƱos y en 2008 los datos se habĆ­an elevado hasta 71,4 aƱos para los varones y 75,2 para las mujeres. Durante el mismo periodo, el nĆŗmero de mĆ©dicos se incrementó considerablemente: a pesar del rĆ”pido crecimiento general de la población, China tenĆ­a en 2005 un mĆ©dico por cada 662 habitantes, frente al porcentaje de uno por cada 27.000 en 1949. En los pueblos y distritos hay clĆ­nicas, y los hospitales estĆ”n en su mayor parte localizados en la ciudad capital del condado. El coste por un aƱo de cobertura en una clĆ­nica, por cada individuo es equivalente a dos dĆ­as y medio de trabajo aproximadamente; cuando un paciente visita la clĆ­nica se le impone una tarifa nominal. Para un tratamiento mĆ”s exhaustivo en las instalaciones mĆ©dicas municipales o provinciales, el coste lo suele pagar la unidad de trabajo o el gobierno central.

Uno de los cambios mĆ”s profundos que han tenido lugar recientemente en los servicios de salud ha sido el renovado interĆ©s por la medicina china tradicional, a travĆ©s de tratamientos con hierbas locales, y acupuntura. Este tipo de tratamientos son hoy mĆ”s comunes en China que la medicina occidental. Los denominados ‘doctores descalzos’ desempeƱan un importante papel al llevar los servicios de salud a la gente. Este personal estĆ” preparado para consultas de higiene, medicina preventiva, acupuntura y tratamientos rutinarios de las enfermedades mĆ”s comunes; trabajan en las zonas rurales donde los mĆ©dicos son escasos. Para millones de campesinos este doctor es su primer encuentro con los servicios de salud del Estado.

China ha promocionado campaƱas masivas en el campo de la sanidad. El gobierno ha promovido ampliamente la inmunización de niƱos, la erradicación de la esquistosomiasis y la disminución de las enfermedades venĆ©reas. Se han lanzado campaƱas de gran Ć©xito en contra de la tuberculosis, malaria, filariasis y otras enfermedades que anteriormente estaban muy extendidas. El gobierno no ha vacilado en su apoyo a la planificación familiar a travĆ©s de programas de control de la natalidad que se incrementaron desde la Revolución Cultural, a finales de la dĆ©cada de 1960. La polĆ­tica de familias de un solo hijo estĆ” apoyada por la propia Constitución. El gobierno tambiĆ©n establece programas de ayuda social para los discapacitados, ancianos y por maternidad.

5.7 Defensa

La Constitución de 1982 dio el mando supremo de las Fuerzas Armadas a la Comisión Central Militar. La fuerza militar del paĆ­s es el EjĆ©rcito de Liberación Popular (ELP), denominado asĆ­ desde 1946. En 2004 el ELP estaba integrado por unos 2 millones de hombres y mujeres, y como tal, era la fuerza militar mĆ”s grande del mundo. Sin embargo, es una fuerza armada escasamente sofisticada. La Armada tenĆ­a 255.000 miembros, englobando unos 25.000 pertenecientes a la fuerza aĆ©rea naval y otros 6.000 en la infanterĆ­a de marina; la Fuerza AĆ©rea tenĆ­a 400.000 miembros, entre los que se encuentran 220.000 de la defensa aĆ©rea. A los 1.600.000 miembros del EjĆ©rcito de Tierra se suma una milicia nacional de unos 12 millones de personas.

La Armada tenĆ­a mĆ”s de 1.700 barcos de guerra, con mĆ”s de 90 submarinos, uno de ellos armado con misiles nucleares. La Fuerza AĆ©rea tenĆ­a aproximadamente unos 5.000 aviones de combate. China ha realizado grandes progresos en el desarrollo de armas nucleares, pero en comparación con los de Estados Unidos o los de la antigua Unión de RepĆŗblicas Socialistas SoviĆ©ticas (URSS), su arsenal es pequeƱo. El ELP tambiĆ©n desempeƱa un importante papel en la producción económica y en grandes proyectos de construcción como presas, proyectos de regadĆ­o y programas de recuperación de tierras. El ELP gobernó prĆ”cticamente el paĆ­s durante los aƱos mĆ”s caóticos de la gran Revolución Cultural proletaria (1966-1969) y en junio de 1989 reprimió duramente manifestaciones a favor de la democracia en PekĆ­n.

6 ECONOMƍA

Durante mĆ”s de 2.000 aƱos la economĆ­a china operó bajo un tipo de sistema feudal; la tierra estaba concentrada en las manos de un grupo relativamente pequeƱo de terratenientes cuyo medio de vida dependĆ­a de las rentas de sus campesinos arrendatarios. A esa carga que soportaban los campesinos habĆ­a que aƱadir los impuestos agrĆ­colas por parte del gobierno imperial y lo imprevisible de las cosechas que estaban sujetas a sequĆ­as e inundaciones periódicas. En estas condiciones, la agricultura se mantuvo infradesarrollada, organizada en pequeƱas unidades, donde se utilizaban mĆ©todos primitivos para garantizar una subsistencia bĆ”sica. El fin de las guerras del Opio en 1860, inició formalmente un periodo de penetración occidental de China desde los puertos costeros, en los que la presencia occidental se habĆ­a establecido bajo tratados diplomĆ”ticos impuestos. Se construyeron ferrocarriles y autopistas, y se comenzó un cierto desarrollo industrial. Toda esta actividad tuvo, sin embargo, un impacto menor sobre el conjunto de la economĆ­a china, puesto que China estaba repartida en varias esferas de influencia controladas por potencias coloniales en competencia por ampliar su Ć”rea de dominio. Japón, que habĆ­a intentado unir China a su esfera de coprosperidad del este de Asia, sólo fue capaz de crear centros aislados de una economĆ­a moderna.

El Partido Comunista Chino emergió en la dĆ©cada de 1920, en un marco de crisis económica causada por la intervención extranjera y por la mayor influencia de los terratenientes en el campo. Durante mĆ”s de dos dĆ©cadas, expandió su control sobre grandes zonas rurales al introducir un programa de reforma agraria basado en el control de la renta, el ahorro y en dar poder a las asociaciones agrarias. El 1 de octubre de 1949 el Partido Comunista consiguió por primera vez desde el fin del periodo imperial en 1912 establecer un gobierno nacional unificado y una polĆ­tica económica conjunta para la zona continental. Desde 1949 hasta 1952 lo mĆ”s importante era detener la inflación y acabar con la falta de alimentos y el desempleo. El nuevo gobierno inició un programa de reforma agraria que distribuyó tierras a 300 millones de campesinos sin recursos. Durante el primer plan quinquenal (1953-1957) el 92% de la población agrĆ­cola estuvo organizada en granjas cooperativas. En 1958 se establecieron las comunas rurales populares que han dominado la agricultura china hasta comienzos de la dĆ©cada de 1980. La comuna estaba basada en la propiedad colectiva de toda la tierra y del utillaje agrario por parte de sus miembros, que debĆ­an alcanzar las metas planificadas por el Estado y eran recompensados de acuerdo con el trabajo que realizaban, aunque las necesidades bĆ”sicas de todos sus miembros estaban garantizadas.

En la ciudad, la propiedad estatal de las empresas industriales y comerciales se fue extendiendo gradualmente. La industria creció debido a las fuertes inversiones bajo el primer plan quinquenal, y el sector estatal alcanzó una gran importancia. El segundo plan quinquenal se introdujo en 1958 y ese mismo aƱo el rĆ©gimen se embarcó en su Gran Salto adelante al que se dio una gran publicidad. Este programa se caracterizó por las grandes inversiones en la industria pesada y el establecimiento a pequeƱa escala, de industrias como las refinerĆ­as de acero. Sin embargo, el programa dio lugar a graves trastornos en la gestión económica, impidiendo un crecimiento económico racional y en 1960 se habĆ­a abandonado el Gran Salto adelante. La economĆ­a china entró entonces en un periodo de reajustes, pero hacia 1965 la producción en muchos campos se aproximaba de nuevo al nivel de finales de la dĆ©cada de 1950. El tercer plan quinquenal comenzó en 1966, pero tanto la producción agrĆ­cola como la industrial habĆ­an sido restringidas por los efectos de la Revolución Cultural; en 1971 comenzó un cuarto plan quinquenal al comenzar una recuperación de la economĆ­a.

Tras eliminar los vestigios de la Revolución Cultural en 1976, los dirigentes chinos decidieron moverse a un paso mĆ”s rĆ”pido en todos los frentes económicos para compensar las pĆ©rdidas que habĆ­an sufrido en los diez aƱos precedentes. Un quinto programa quinquenal comenzó en 1976 pero se interrumpió en 1978, cuando se lanzó el programa de las ‘cuatro modernizaciones’ exigĆ­a la modernización completa de la agricultura, industria, defensa nacional, ciencia y tecnologĆ­a para finales de siglo de manera que la economĆ­a pudiera estar en las primeras posiciones mundiales. Un plan de diez aƱos desde 1976 hasta 1985 reforzó las mejoras económicas y un papel mayor para empresas de propiedad privada y colectiva (frente a las que pertenecĆ­an al Estado). Este programa fue sustituido por un plan decenal mĆ”s modesto desde 1981 hasta 1990, pero continuaron los esfuerzos por atraer la tecnologĆ­a e inversiones occidentales, al igual que el programa de incentivos para incrementar la producción agrĆ­cola. Las polĆ­ticas introducidas en octubre de 1984 exigĆ­an una mayor descentralización de la planificación económica y una mayor confianza en las fuerzas del mercado para determinar el precio de los bienes de consumo. El plan quinquenal de 1986 a 1990 anticipó una tasa anual de crecimiento económico del 7%, pero la economĆ­a se frenó despuĆ©s de la crisis polĆ­tica que tuvo lugar en 1989. Sin embargo, el retraso fue temporal y la economĆ­a china se recuperó rĆ”pidamente a comienzos de la dĆ©cada de 1990 mientras el gobierno continuaba moderando los controles en la economĆ­a; en 1992 la economĆ­a creció en un 13%. Este rĆ”pido crecimiento ha dado lugar a algunos problemas, como las altas tasas de inflación en las Ć”reas urbanas.

6.1 Producción nacional

El producto interior bruto (PIB) de China en 2006 era de 2.644.681 millones de dólares, lo que equivalĆ­a a 2.016,10 dólares per cĆ”pita. La producción agrĆ­cola (que tambiĆ©n engloba algunas industrias de pequeƱa escala en zonas rurales, silvicultura y pesca) contribuĆ­a con un 11,7% al PIB, la industria con un 48,4% y los servicios con un 39,9%. Entre 1965 y 1979 el PIB creció a un ritmo de 6,4% anual, mientras que entre 1980 y 1988 el crecimiento fue de un 10,3%. La tasa de crecimiento cayó por debajo del 4% en 1989; en el periodo 2006 se situó en el 10,70 por ciento.

6.2 Agricultura

La agricultura ha sido tradicionalmente el pilar económico de China y sigue siendo un sector de gran importancia en la economĆ­a nacional, que sostiene a la mayor parte de la población. El 44% de la población activa trabajaba en este sector en 2002. Tan sólo el 16,7% de la superficie total de China estĆ” cultivada (situada sobre todo en su parte oriental). Casi la mitad de la tierra cultivada es irrigada; China es uno de los paĆ­ses con mayor superficie irrigada. A pesar de los grandes beneficios en la producción nacional desde 1949, el crecimiento tan rĆ”pido de la población ha provocado que el aumento de la renta per cĆ”pita haya sido de menor importancia. Por ejemplo, entre 1959 y 1979 la producción anual de grano creció en un 103%, pero la producción per cĆ”pita de grano sólo lo hizo en un 20%. Hacia 1979, aunque se pusieron en cultivo nuevas superficies, especialmente en Dongbei Pingyuan (Manchuria) y noroeste de China, la pĆ©rdida de tierra cultivada dedicada para usos no agrĆ­colas fue aĆŗn mĆ”s rĆ”pida lo que provocó, con el gran crecimiento de la población, que el promedio per cĆ”pita se redujera de 0,18 ha en 1949 a sólo 0,08 ha en 1995.

6.2.1 Organización de la actividad agraria

El aumento constante en la producción agraria de China, puede atribuirse en parte a una mayor eficiencia en la productividad. Hacia 1979, alrededor de 838 millones de habitantes que formaban la población rural se habĆ­an organizado en unas 52.000 comunas populares. Como unidad socioeconómica, la comuna recibĆ­a las metas de producción del Estado y, ademĆ”s se aseguraba de que se consiguieran esos objetivos. Las comunas estaban formadas por distintas brigadas de producción, cada una de las cuales se subdividĆ­a en equipos de producción. Cada uno de estos grupos tenĆ­a su propio terreno, herramientas y otros materiales, siempre de forma comunal, para desarrollar su labor. Unos 6 millones de equipos de producción representaban las unidades bĆ”sicas del sistema.

Con el sistema de comunas fue posible organizar una experimentación agrĆ­cola a gran escala para establecer una agricultura cientĆ­fica, plantar cultivos en zonas donde el suelo y otras condiciones naturales son menos favorables, y desarrollar el regadĆ­o y drenaje eficazmente. Aunque la tierra era de propiedad comunal, cada familia rural generalmente tenĆ­a acceso a un pequeƱo terreno privado, que podĆ­an utilizar como quisieran. TambiĆ©n se daba autonomĆ­a a los equipos de producción y a los hogares individuales para producir otros cultivos para el mercado, una vez que se hubieran alcanzado los objetivos oficiales.

A comienzos de la dĆ©cada de 1980, en un intento por mitigar la falta de alimentos pertinaz en China, mientras se permitĆ­a un aumento en el consumo de alimentos per cĆ”pita, el gobierno chino reestructuró una vez mĆ”s el sector agrĆ­cola. El sistema de comunas y las brigadas de producción se desmantelaron, y las familias se convirtieron en la unidad principal de producción agrĆ­cola. Con este ‘sistema de responsabilidad’, cada familia, despuĆ©s de un contrato con las autoridades locales para producir su cuota de las cosechas especificadas, era libre para vender cualquier producción adicional en el mercado. Tales ventas representaban alrededor del 60% de la producción agrĆ­cola china a finales de esa dĆ©cada.

6.2.2 Mejora y planificación agraria

Dada la tremenda presión sobre la tierra agrĆ­cola, es de una gran importancia la planificación racional de los usos del suelo. Durante las dĆ©cadas de 1960 y 1970 se puso gran Ć©nfasis en el cultivo de cereales, lo que llevó a la eliminación de otros cultivos, huertos y Ć”rboles, descuido de los animales y daƱos medioambientales. Desde entonces, el gobierno ha promocionado una economĆ­a agrĆ­cola mixta que estĆ© de acuerdo con las condiciones medioambientales locales y que tambiĆ©n proporcione ingresos en metĆ”lico.

Se ha buscado denodadamente la mecanización agrĆ­cola, aunque permanece en los primeros estadios de desarrollo y se considera impracticable en muchos lugares a causa del tamaƱo reducido de las Ć”reas cultivadas. Desde finales de la dĆ©cada de 1950 se han realizado proyectos a gran escala para controlar las inundaciones asĆ­ como otros de regadĆ­o, que suponen la construcción de presas, canales y embalses. En el mismo periodo han tenido lugar cambios importantes en los modelos de cultivo en China. Con el desarrollo de los recursos de agua y un uso mĆ”s intenso de fertilizantes, se podĆ­a lograr una segunda cosecha en los valles de los tres rĆ­os de la llanura del norte de China. Los tramos medio e inferior del valle del YangtzĆ©, que ya era un Ć”rea de arrozales de doble cosecha, pasaron a dar tres cosechas de arroz anuales. En Ć©poca mĆ”s reciente, sin embargo, se ha discutido la posibilidad de volver al esquema de dos cosechas, porque la tercera supone un importante gasto en abonos.

Para aumentar la producción agrĆ­cola, los diferentes Ć”mbitos gubernamentales manejan mĆ”s de 2.000 granjas estatales. Hay unidades a gran escala que se organizan para la experimentación agrĆ­cola y la producción comercial de ciertos cultivos comercializables y alimentos para los mercados urbanos o la exportación; suelen estar situados en tierra virgen o en nuevas zonas recuperadas donde la densidad de población rural no es excesiva y la maquinaria moderna se puede utilizar de manera efectiva.

6.2.3 Cultivos alimenticios

Alrededor del 80% de los sembrados en China se dedica a cultivos alimenticios. El mĆ”s importante es el arroz, que ocupa alrededor de un tercio del Ć”rea cultivada total. Se cultiva mayoritariamente al sur del rĆ­o Huai, sobre todo en el valle medio e inferior del rĆ­o Yangzi Jiang, en el delta del rĆ­o Perla en la región de Cantón y en la cuenca roja de Sichuan. En 2006, la producción de arroz fue de 184 millones de toneladas.

El segundo cultivo alimenticio en importancia es el trigo, que crece sobre todo al norte del rĆ­o Huai. Las principales Ć”reas dónde se cultiva son la llanura del norte de China y los valles de los rĆ­os Wei y Fen, en la región del loess. Aunque el Ć”rea cultivada con trigo es casi tan grande como la del arroz, la cosecha es menor. La producción de trigo en 2006 fue de 104 millones de toneladas.

El kaoliang (un tipo de sorgo) y el mijo son tambiĆ©n importantes cultivos alimenticios en el norte de China y en Dongbei Pingyuan (Manchuria). El primero se utiliza tambiĆ©n para alimentar a los animales y para convertirlo en bebida alcohólica; los tallos se utilizan para fabricar papel y como material Ćŗtil para construir techos en las viviendas. El maĆ­z ocupa alrededor del 20% del Ć”rea cultivada. La avena es importante sobre todo en la Mongolia Interior y en el oeste, sobre todo en el TĆ­bet. La producción total de cereales estĆ” en torno a las 445.355.150 toneladas.

Otros cultivos alimenticios son batatas, patatas blancas (papas) y frutas variadas y verduras. Las batatas predominan en el sur y las patatas blancas en el norte. Las frutas varĆ­an desde variedades tropicales como piƱas y plĆ”tanos, que crecen en la isla de Hainan, hasta manzanas y peras, cultivadas en las provincias septentrionales de Liaoning y Shandong. Los cĆ­tricos, en especial naranjas y mandarinas, son un importante producto del sur de China.

Las semillas oleaginosas tienen un importante papel en la agricultura china, al proporcionar aceites comestibles e industriales y una importante parte de las exportaciones. El cultivo oleĆ­cola mĆ”s importante es la soja (soya), que ocupa alrededor del 8% del total del Ć”rea cultivada; se cultiva sobre todo en el norte de China y en Dongbei Pingyuan (Manchuria). Su producción es la tercera del mundo, pero China tambiĆ©n es uno de los principales productores mundiales de manĆ­, que se cultiva en Shandong y Hebei. Otros importantes cultivos de este tipo son las semillas de sĆ©samo, girasol y colza. El Ć”rbol tung tambiĆ©n proporciona un valioso aceite; mĆ”s de la mitad del aceite de tung producido en China es originario de Sichuan. La producción de oleaginosas alcanzó en 2006 los 83,3 millones de toneladas.

El tĆ© es uno de los cultivos comerciales tradicionales de China, que sigue siendo uno de los mayores productores, con mĆ”s del 20% del abastecimiento mundial; su producción anual es de 1.049.500 toneladas. Las principales plantaciones de tĆ© estĆ”n en las colinas del tramo medio del valle del rĆ­o YangtzĆ© y en las provincias del sureste de Fujian y Zhejiang.

China obtiene azĆŗcar tanto de la caƱa de azĆŗcar como de la remolacha azucarera. La caƱa de azĆŗcar crece sobre todo en las provincias de Guangdong y Sichuan; en 2006, la producción fue de 101 millones de toneladas. La remolacha azucarera, un cultivo relativamente nuevo para el paĆ­s, se cultiva en la provincia de Heilongjiang, en Dongbei Pingyuan (Manchuria) y en tierras de regadĆ­o en la Mongolia Interior.

6.2.4 Cultivos para la obtención de fibras

El gobierno comunista de China ha prestado una creciente atención a la expansión de cultivos para el desarrollo de la industria textil. El mĆ”s importante de estos cultivos es el algodón: se producen anualmente 6,73 millones de toneladas, lo que hace de China el principal productor mundial de algodón. Este producto, que se puede cultivar en casi todas las partes del paĆ­s, se realiza sobre todo en la llanura del norte de China (que aporta casi la mitad de la producción total del paĆ­s), la región del loess, el delta y la llanura media del YangtzĆ©.

Otras fibras a destacar son el rami y el lino, que se utilizan para confeccionar ropa de cama y otros tejidos finos, el yute y el cƔƱamo, con los que se fabrican sacos (costales) y cuerdas. El rami, una hierba originaria de China y similar al cƔƱamo, se cultiva sobre todo en el valle del rĆ­o YangtzĆ©; el lino es un cultivo del norte. Las principales Ć”reas de cultivo del yute son Zhejiang y Guangdong. Otro producto tradicional chino es la seda en bruto. La sericultura (crĆ­a de gusanos de seda) es muy comĆŗn en el centro y sur del paĆ­s, en especial en el delta del YangtzĆ©.

6.2.5 GanaderĆ­a

China mantiene una gran cabaƱa ganadera. El ganado porcino es numeroso; hay 511 millones de cabezas, lo que representa mĆ”s del 40% del total mundial. El paĆ­s es el principal exportador de cerdas de puerco. En las Ć”reas occidentales, la ganaderĆ­a de rebaƱos nómadas tambiĆ©n constituye la principal ocupación rural. La mayor parte de los rebaƱos estĆ”n formados por ganado ovino, caprino y camellos. En las tierras altas del TĆ­bet el yak es una fuente de alimentos y combustible (los excrementos se queman) y su pelo y piel proporcionan materiales para cobijarse y vestir. La cabaƱa ganadera se estima que tiene 174 millones de cabezas de ganado ovino, 199 millones de ganado caprino, 118 millones de ganado vacuno, 22,8 millones de bueyes, 7,40 millones de caballos, 3,74 millones de mulas y unos 266.000 camellos.

6.3 Silvicultura

Los recursos forestales de China son limitados a causa de siglos de sobretala para obtener combustible y materiales de construcción. Los programas de reforestación han incrementado la extensión de los bosques desde un 8% del Ć”rea total en 1949 hasta mĆ”s de un 20,6% en 2005. Sin embargo, el abastecimiento de madera sigue siendo pequeƱo; la producción de madera en 2006 fue de 298 millones de metros cĆŗbicos.

La distribución de los bosques es muy desigual. El noreste y suroeste contienen la mitad de los bosques y tres cuartas partes de los recursos forestales. Las principales especies taladas son pinos, abetos, alerces y robles, y en el extremo sur, teca y caoba. Otras especies comerciales son el tung, Ć”rbol de laca, alcanfor y bambĆŗ. Las campaƱas nacionales de plantaciones de Ć”rboles han sido llevadas a cabo tanto por el Estado como por colectividades: las comunas rurales han sido responsables de la plantación del 70% del total del Ć”rea reforestada. Los Ć”rboles se plantan alrededor de los asentamientos, de carreteras, junto a rĆ­os o arroyos y junto a las casas de los campesinos. Un gran proyecto es el establecimiento de un cinturón boscoso a lo largo de la frontera noroccidental de las regiones semiĆ”ridas, en la llanura del norte de China y en el oeste de Dongbei Pingyuan (Manchuria).

6.4 Pesca

El total de capturas de pescado, marisco y moluscos se estima en 60,6 millones de toneladas anuales. La actividad piscĆ­cola de agua dulce es importante y el gobierno ha animado el desarrollo de piscifactorĆ­as junto a otras actividades agrĆ­colas. Las principales regiones productoras son aquĆ©llas cercanas a los nĆŗcleos urbanos en el valle medio y bajo del YangtzĆ© y del delta del rĆ­o Perla (Zhu Jiang). Los estanques de carpas, una fuente de alimentación tradicional china durante miles de aƱos, suponen una parte importante del total.

Al contrario de lo que ocurre con la pesca de agua dulce del interior, que es una actividad importante, la pesca marina estĆ” relativamente subdesarrollada, si bien en los Ćŗltimos aƱos las capturas marinas se han duplicado. En la dĆ©cada de 1960 la mayor parte de los pescadores fueron reasentados en comunas pesqueras costeras y se les animó a combinar las actividades agrĆ­colas con las propias de la pesca. Estas comunas tambiĆ©n practicaban la acuicultura marina. Utilizando artes pequeƱas y trabajando en las aguas territoriales de China, en 2005 los pescadores capturaron en el litoral chino 37,9 millones de t de pescado.

6.5 Industria

El sector industrial estĆ” compuesto, para los propósitos de planificación del gobierno, de industria, minerĆ­a, producción de energĆ­a elĆ©ctrica y construcción. Entre 1965 y 2006 la proporción de la industria en el producto interior bruto subió desde el 39% hasta el 48,4%; la industria pesada representa la mayor parte de ese crecimiento. Hacia mediados de la dĆ©cada de 1980 habĆ­a mĆ”s de 300.000 empresas industriales diseminadas por todo el paĆ­s, formando sistemas regionales independientes, pero integrados. Las ciudades de tamaƱo grande y mediano y muchas pequeƱas ciudades y pueblos han desarrollado una base industrial considerable. Este sector ocupa en la actualidad al 18% de la población activa.

6.5.1 Planificación industrial

A finales de la dĆ©cada de 1970, el gobierno revisó sus objetivos industriales en un intento por remediar una serie de problemas causados por una mala planificación. En muchas ciudades se habĆ­a permitido crecer la autosuficiencia a expensas de la especialización y las empresas industriales se encontraron duplicando sus funciones. AdemĆ”s, el rĆ”pido crecimiento de la industria pesada habĆ­a daƱado algunos entornos urbanos y absorbido fondos que se podrĆ­an haber dedicado mejor a la agricultura, la industria ligera y la mejora de las instalaciones urbanas; incluso el desarrollo tecnológico llegó a estancarse.

El programa de reajustes requerĆ­a un crecimiento mĆ”s lento de la industria pesada; asĆ­, se dio prioridad a las industrias ligeras en recibir fondos para el desarrollo, porque se consideraba que eran capaces de recuperar las inversiones en un corto periodo de tiempo, facilitando su propia expansión rĆ”pidamente. Los fondos económicos tambiĆ©n se dirigieron a la industria de la construcción para mejorar las condiciones de vida de la población urbana y para crear oportunidades de trabajo para los desempleados de las ciudades.

Recientemente se ha garantizado la autonomĆ­a a las empresas de propiedad estatal para determinar —despuĆ©s de alcanzar las metas estatales— cómo manejar la producción, las ventas y los beneficios. China tambiĆ©n ha enviado al extranjero numerosos tĆ©cnicos cualificados y administradores de fĆ”bricas para que adquieran experiencia administrativa y se familiaricen con las tĆ©cnicas modernas. La entrada de tecnologĆ­a extranjera ha facilitado la aparición de nuevas zonas industriales.

6.5.2 Actividad industrial

La industria siderĆŗrgica ha recibido prioridad en China desde 1949. El paĆ­s produce hoy una gran variedad de productos de acero, como acero de tungsteno, acero inoxidable, lĆ”minas de acero pesado y tuberĆ­as continuas. Las principales zonas productoras son Dongbei Pingyuan (Manchuria), norte de China y el valle del YangtzĆ©.

Hay grandes plantas siderĆŗrgicas en Anshan, Benxi, PekĆ­n, Baotou, Taiyuan, Wuhan, Ma’anshan, Panzhihua, Chongqing, Shanghai y Tianjin. China produce anualmente 102 millones de t de hierro y 80 millones de t de acero en crudo.

Entre las industrias pesadas de China destacan los astilleros de construcción naval y las destinadas a la fabricación de locomotoras, material rodante, tractores, maquinaria minera, equipos para generar energĆ­a y maquinaria para prospecciones y refinado de petróleo.

La industria petroquĆ­mica tambiĆ©n tiene plantas en la mayor parte de las provincias y regiones autónomas; las mayores se encuentran en PekĆ­n, Shanghai, Lanzhou, Shengli, Yueyang, Anqing y Cantón. Sus productos engloban fibras sintĆ©ticas, plĆ”sticos y productos farmacĆ©uticos. Una caracterĆ­stica peculiar de la industria petroquĆ­mica china es la presencia muy extendida de pequeƱas fĆ”bricas de abonos nitrogenados que utilizan una tĆ©cnica de producción desarrollada en China. En 2004 las fĆ”bricas chinas produjeron 32 millones de t de fertilizantes.

La industria textil china es la mayor del mundo y da trabajo a mĆ”s de 4 millones de empleados. La producción de hilos de algodón era de 4,8 millones de t a comienzos de la dĆ©cada de 1990. La mayor parte de las nuevas hilanderĆ­as de algodón se han construido en las Ć”reas de cultivo del mismo de las provincias de Hubei (Hupeh), Hunan, Hebei y Shaanxi. No obstante, a pesar de un gran incremento en la producción desde 1949, la industria no estĆ” produciendo para abastecer a toda la población, lo que hace necesario continuar con el racionamiento de las telas de algodón.

Otras importantes industrias (con su producción a comienzos de la dĆ©cada de 1990) eran cemento (405 millones de t), papel y cartón (20 millones de t), bicicletas (40,9 millones de unidades), mĆ”quinas de coser (9,9 millones de unidades), vehĆ­culos a motor (1.402.000 unidades) y televisores en color (17 millones de unidades).

6.6 MinerĆ­a

China tiene ricos recursos minerales, que engloban grandes depósitos de algunos minerales industrialmente importantes.

La industria de la minerĆ­a del carbón es la mayor del mundo, con una producción anual que llegó a 1.483.223.100 t en 2003. A lo largo de todo el paĆ­s hay numerosas minas de carbón de pequeƱo tamaƱo, pero los grandes centros se encuentran al norte del rĆ­o YangtzĆ©, especialmente en Shaanxi. El carbón es el principal combustible tanto domĆ©stico como industrial y representa una gran parte de la mercancĆ­a transportada por los ferrocarriles.

El rĆ”pido desarrollo de la industria petrolera desde la dĆ©cada de 1950 ha convertido a China en uno de los mayores productores mundiales; la producción anual en 2004 estaba cifrada en 1.245.090.100 barriles. En 1963 pasó a ser autosuficiente en gasolina y hacia 1973 era capaz de exportar tanto crudo como productos petroleros refinados. A finales de la dĆ©cada de 1950 se descubrió y desarrolló el campo petrolero de Daqing, en la provincia de Heilongjiang y hoy es el mĆ”s productivo de todo el paĆ­s. Las mayores reservas de la nación, estimadas aproximadamente en unos 10.000 millones de barriles, se encuentran en la Ć”rida depresión de Tarim, en la región autónoma uigur de Xinjiang.

La producción de mineral de hierro ha crecido de manera muy rĆ”pida desde la dĆ©cada de 1970. China es ademĆ”s el mayor productor mundial de grafito natural, con una producción de 310.000 t en 1994. Otros minerales que se producen en el paĆ­s en cantidades importantes son sal (29 millones de t), fosfatos (7,65 millones de t), bauxita (15 millones de t), cinc (2,26 millones de t), cobre (620.000 t), estaƱo (110.000 t), azufre, magnesita, plomo, mineral de antimonio, tungsteno y mercurio.

6.7 EnergĆ­a

China es uno de los principales productores mundiales de electricidad, con una producción anual estimada de 1.806.757 millones de KWh en 2003. Con todo, la producción de electricidad no es suficiente para cubrir las necesidades nacionales, especialmente en las ciudades donde el gobierno ha dado prioridad al desarrollo económico.

La energĆ­a hidroelĆ©ctrica representa el 15,42% de la producción elĆ©ctrica anual de China; el 82,15% de la energĆ­a se genera en centrales tĆ©rmicas de carbón. Las mĆ”s importantes centrales hidroelĆ©ctricas del paĆ­s estĆ”n en Liujia Xia, en el Huang He, en Gansu, Danjiangkou en el rĆ­o Han, en Hubei, Gongu en el rĆ­o Dadu, en Sichuan, y otra en el Xin’an Jiang en Zhejiang. A finales de las dĆ©cadas de 1970 y 1980 habĆ­a en construcción otras grandes centrales, una en el rĆ­o YangtzĆ©, debajo de las gargantas de este rĆ­o y otra en el Huang He, donde abandona la pradera de Qinghai. Entre las nuevas centrales tĆ©rmicas de carbón varias se construyeron junto a los grandes campos de carbón del norte de China. Existe una central nuclear en Shanghai.

Los recursos de energĆ­a hidroelĆ©ctrica son mĆ”s abundantes que en cualquier otro paĆ­s. Una destacada caracterĆ­stica de la industria energĆ©tica china ha sido la construcción de pequeƱas centrales locales para generar energĆ­a. Los gobiernos locales y las comunas rurales han aprovechado el potencial hidroelĆ©ctrico como parte integral de sus programas de conservación de agua, especialmente en el sur, donde las precipitaciones son fuertes y los rĆ­os rĆ”pidos, y a menudo tienen pendientes muy marcadas. En la dĆ©cada de 1980 algunas centrales comenzaron a utilizar como combustible el metano desprendido de la quema de basuras.

6.8 Turismo

Desde comienzos de la dĆ©cada de 1970 las fuertes restricciones de los viajes a China se han ido levantando gradualmente. En 1979 el gobierno chino estableció un plan quinquenal para desarrollar el turismo; este plan requerĆ­a la construcción de nuevos hoteles y restaurantes a lo largo de todo el paĆ­s y preparar al personal para recibir el creciente nĆŗmero de visitantes. En 2006 visitaron el paĆ­s 49,9 millones de turistas que reportaron unos ingresos de 24.322 millones de dólares.

6.9 Moneda y banca

La unidad monetaria china es el yuan, con el jiao y el fen como monedas fraccionarias (en 2006, 8 yuanes equivalĆ­an a un dólar estadounidense). El sistema bancario estĆ” completamente bajo control estatal. El Banco Popular de China es la institución financiera central y la Ćŗnica fuente para emitir moneda. Sin embargo, el Banco de China, que cuenta con casi 50 sucursales en el extranjero entre las que hay oficinas en Hong Kong, Singapur y Londres, se ocupa principalmente de las cuentas internacionales y los acuerdos sobre monedas extranjeras. AdemĆ”s, China tiene otros tres grandes bancos: la Corporación Internacional de Inversiones y Trusts de China, que reĆŗne fondos para la inversión en el interior y organiza empresas conjuntas en el paĆ­s y en el extranjero; el Banco Popular de la Construcción de China, que se ocupa de los fondos para las construcciones bĆ”sicas, y el Banco AgrĆ­cola de China, que es el responsable de los prĆ©stamos al sector rural de la economĆ­a.

6.10 Comercio

La circulación de mercancĆ­as, anteriormente determinada por la planificación central, estĆ” hoy en gran medida orientada por los agentes del mercado. Entre 1978 y 1984 la participación de las ventas al por menor controladas por el sector estatal descendieron desde el 90,5% hasta el 45,8%; durante ese mismo periodo, las de las colectividades aumentaron su participación desde el 7,4% hasta el 39,6% y las empresas privadas desde el 2,1% hasta el 14,6 por ciento.

Hasta finales de la dĆ©cada de 1970 las materias primas y el equipamiento que necesitaban las empresas propiedad del Estado, por lo general, no eran adquiridas como mercancĆ­as sino que se las proporcionaba el gobierno. DespuĆ©s de completar la producción, los productos se devolvĆ­an al gobierno para su distribución. Los bienes de consumo que necesitaba la población rural los distribuĆ­a la oficial Cooperativa de Suministros. Los artĆ­culos esenciales como cereales alimenticios, aceite, carne, azĆŗcar y telas de algodón estaban racionadas porque eran escasas a causa de que se fijaban bajos precios para garantizar su acceso a toda la población. Los cereales para la alimentación los distribuĆ­an los equipos de producción a los domicilios rurales como una parte importante de la remuneración por el trabajo realizado.

Desde 1979 las empresas propiedad del Estado son libres para obtener parte de sus suministros y disponer de parte de sus productos en el mercado; tambiĆ©n se ha hecho evidente un uso mĆ”s amplio de la publicidad como fuente de información. En los centros urbanos, esta reorganización del comercio ha ocasionado un rĆ”pido crecimiento de los negocios de propiedad colectiva e individual, como los restaurantes, casas de tĆ©, hostales, estudios fotogrĆ”ficos, sastrerĆ­as y todo tipo de servicios de reparación y mantenimiento. Se han vuelto a abrir los mercados rurales, donde se permite a los campesinos deshacerse del excedente de sus productos o bien abastecerse de ellos.

6.11 Comercio exterior

El comercio exterior estĆ” completamente monopolizado por el Estado. En 1979 China levantó algunas restricciones comerciales, preparando el camino para el aumento de las, hasta entonces, relativamente pequeƱas inversiones extranjeras y actividad comercial. En 2004 las exportaciones anuales suponĆ­an un total de 593.325 millones de dólares y las importaciones 561.229 millones. Las principales exportaciones chinas eran petróleo crudo y refinado, telas de algodón, seda, ropas, arroz, cerdo, gambas o camarones congelados y tĆ©. Entre las importaciones destacan la maquinaria, productos de acero, otros metales, automóviles, artĆ­culos sintĆ©ticos, productos quĆ­micos para la agricultura, caucho, trigo y barcos. La mayor parte del comercio tiene lugar con paĆ­ses no comunistas; Japón es el principal, seguido por la Región Administrativa Especial de Hong Kong y Estados Unidos. China tambiĆ©n tiene buenas relaciones con paĆ­ses como Alemania y Singapur. Las relaciones comerciales con Estados Unidos estuvieron en peligro en 1993 cuando amenazaron con no renovar la condición comercial de China de nación mĆ”s favorecida (NMF), hasta que las condiciones de los derechos humanos no mejoraran. Sin embargo, en mayo de 1994 Estados Unidos renovó el nombramiento de China de nación mĆ”s favorecida, aun cuando el gobierno chino hizo muy pocos progresos en la mejora de los derechos humanos.

6.12 Transporte

El medio de transporte mĆ”s importante es el ferrocarril, que mueve unos dos tercios del trĆ”fico de pasajeros y la mitad del de mercancĆ­as. Desde 1949 la longitud total de los ferrocarriles se ha duplicado y en la actualidad es de 62.200 km. Las nuevas lĆ­neas construidas han extendido las dos rutas mayores norte-sur (Cantón-PekĆ­n y Shanghai-PekĆ­n) hacia el noreste, Mongolia y Rusia, y al sureste. La mayor lĆ­nea este-oeste, desde Lianyungang a Lanzhou, ha sido unida a Ürümqi en el extremo noroccidental. Las nuevas lĆ­neas proporcionan una densa red en las regiones muy pobladas y económicamente importantes del noreste, centro y suroeste de China. Cuando se complete la lĆ­nea Lanzhou-Lhasa (TĆ­bet), harĆ” que todas las provincias y regiones autónomas sean accesibles por ferrocarril.

Las carreteras y autopistas chinas han crecido desde una longitud de unos 80.000 km (en 1949), que sólo proporcionaba conexiones entre los puertos costeros con presencia colonial extranjera y el interior inmediato, hasta un sistema de 1.930.543 km, de los cuales aproximadamente el 85% estĆ” pavimentado. En la actualidad hay carreteras que unen PekĆ­n a las capitales de todas las provincias y regiones autónomas, asĆ­ como a los mayores puertos y nudos ferroviarios. La red se extiende tambiĆ©n a las zonas rurales, que hace accesibles por carretera a la mayor parte de las localidades. En los centros urbanos el transporte pĆŗblico motorizado estĆ” bien desarrollado y las bicicletas son de uso comĆŗn para viajar distancias cortas. Sin embargo, la tasa de vehĆ­culos es sólo de 15 por cada mil habitantes.

China tiene mĆ”s de 170.000 km de canales interiores navegables. La navegación interior representa una quinta parte de los bienes embarcados y su potencial para un mayor desarrollo es enorme. Los mayores canales interiores estĆ”n en el rĆ­o Yangzi Jiang, el cuarto mayor rĆ­o del mundo. Unos 18.000 km de este rĆ­o y sus afluentes son navegables para barcos de vapor; sus principales puertos son Chongqing, Yichang y Wuhan. Sin embargo, el canal mĆ”s transitado es el Gran Canal, que se extiende desde PekĆ­n a Hangzhou; su parte sur estĆ” integrada en un sistema local de canales y lagos, convirtiendo a ciudades como Suzhou, Wuxi y Changzhou en importantes puertos interiores. En algunas partes de la China rural los campesinos utilizan los canales de regadĆ­o y drenaje como vĆ­as fluviales.

La larga lĆ­nea de costa de China y la localización de algunas de las mĆ”s importantes ciudades industriales en ella han convertido a la navegación costera en un importante medio de transporte. El incremento del transporte marĆ­timo internacional es un fenómeno mĆ”s reciente, que alcanzó su punto mĆ”s alto antes de la II Guerra Mundial (1939-1945) y volvió a ser importante en la dĆ©cada de 1960. China tiene una flota mercante de 3.799 grandes buques (la mayorĆ­a de construcción nacional) que visitan puertos en mĆ”s de 100 paĆ­ses.

El transporte aĆ©reo recibió un gran impulso con la compra en 1979 de tres aviones Jumbo y la apertura de un nuevo aeropuerto internacional en PekĆ­n en 1980; desde entonces, el transporte aĆ©reo entre China y el resto del mundo se ha intensificado. Los vuelos nacionales ahora unen mĆ”s de 90 ciudades, muchas de las cuales se encuentran en la China occidental.

6.13 Comunicaciones

El gobierno comunista de China puso un gran hincapiĆ© en la radio cuando quiso ganarse el mĆ”ximo apoyo para su polĆ­tica a comienzos de la dĆ©cada de 1950. Se ubicaron altavoces en los campos comunitarios y los lugares de trabajo desde la dĆ©cada de 1950 hasta la de 1970, y la gente se fue acostumbrando gradualmente a la presencia continua de los medios de comunicación; en 1997 habĆ­a mĆ”s de 417 millones de aparatos de radio. Entre 1977 y 1981 el nĆŗmero de receptores de televisión de propiedad privada aumentó desde 630.000 hasta los 7 millones; China tenĆ­a 380 millones de receptores de televisión en 2000. En PekĆ­n, el promedio era de dos receptores de televisión por cada tres hogares. Un sĆ­mbolo del clima de apertura en el Ć”mbito económico y social fue la inauguración en el sur de China, en 1986, de estaciones comerciales de radio.

La Cadena Central Popular de Televisión se estableció en PekĆ­n en 1958, el mismo aƱo que se empezaban a fabricar los primeros aparatos de televisión chinos en la Planta Estatal de Radio de Tianjin. PekĆ­n ha aumentado la programación normal de la Cadena Central Popular de Televisión con dos canales mĆ”s y muchas ciudades o provincias tienen sus propias cadenas locales. La composición media de la programación es de un 20% de noticias, 25% de deportes, programas de servicios pĆŗblicos, cientĆ­ficos, programas infantiles y para una audiencia especializada, y el 55% de diversión.

La Universidad por Televisión, bajo la administración de la Televisión Central Popular, es otro de los aspectos destacados de las comunicaciones de China. En PekĆ­n se ofrecen nueve horas diarias de programas educativos por televisión; son miles los estudiantes que siguen estos programas universitarios por televisión. Este sistema es muy Ćŗtil para China debido a la enorme población en edad universitaria.

La cadena internacional de radio mĆ”s antigua fue Radio PekĆ­n; se estableció en 1950 con programas en siete idiomas. En 1978 se le cambió el nombre por el de Radio Internacional de la RepĆŗblica Popular China y su esquema de emisiones se amplió a 38 idiomas extranjeros.

Hay 963 periódicos diarios, con una circulación total de 48 millones de ejemplares. El periódico mĆ”s importante es el Renmin Ribao (Diario Popular), publicado en PekĆ­n. Se encuentra bajo el control directo del ComitĆ© Central del Partido Comunista. Su circulación diaria es de unos 5 millones de ejemplares. La mayor parte de las noticias provienen de Xinhua (agencia de noticias Nueva China). Los observadores extranjeros consideran que Ć©sta es la fuente fundamental para conocer noticias del paĆ­s. Otros grandes periódicos y revistas son Guangming Ribao (Diario de Kuangming), Jiefang Ribao (Diario Liberación), Renmin Huabao (Revista Ilustrada Popular) y Tiyu Kexue (Ciencia de los Deportes).

China tiene una activa industria editorial. El impulso del gobierno para conseguir la educación de toda la población ha dado como resultado un aumento del interĆ©s pĆŗblico, tanto por las obras de ficción como por los tĆ­tulos de pensamiento, asĆ­ como por las obras traducidas de autores extranjeros.

Los servicios postales y de telecomunicaciones estĆ”n controlados por el Estado. El servicio telefónico llega a casi todas las poblaciones, pero muy pocos hogares tienen su propio telĆ©fono. En 2005 habĆ­a 269 telĆ©fonos y 41 equipos informĆ”ticos en uso por cada mil habitantes.

6.14 Trabajo

Se estima que la población activa china es de mĆ”s de 781 millones de personas. El desempleo (un 4,2% en 2005) y subempleo han dado lugar a una caĆ­da de la productividad laboral y de los ingresos, problemas directamente unidos al gran tamaƱo y la tasa de crecimiento de la población. A comienzos de la dĆ©cada de 1980 alrededor de un tercio de la población tenĆ­a 15 aƱos o menos, lo que supone que cada aƱo un gran nĆŗmero de jóvenes pasan a formar parte de la población activa. Aunque un 44% de la población activa estĆ” formada por trabajadores agrĆ­colas, el programa gubernamental de reparto de trabajo no engloba las zonas rurales y aquĆ­ la nueva mano de obra tiene que ser absorbida por la economĆ­a colectiva y familiar. Se estima que la familia rural recibe un 75% de sus ingresos de la economĆ­a colectiva y el resto de actividades suplementarias.

7 HISTORIA

De acuerdo con la tradición, el pueblo chino se originó en el valle del Huang He o rĆ­o Amarillo. Las leyendas hablan de un creador, P’an Ku, al que sucedieron una serie de soberanos celestiales, terrestres y humanos. Las pruebas arqueológicas son escasas, aunque fueron encontrados restos de Homo erectus, cerca de PekĆ­n, que datan de hace 460.000 aƱos, y que recibieron el nombre de Sinanthropus pekinensis. Se cultivaba arroz en la China oriental aproximadamente en el 5500 a.C. y unos cinco siglos despuĆ©s se desarrolló una sociedad agrĆ­cola en el valle del Huang He. Hay pruebas fehacientes de la existencia de dos culturas con cerĆ”mica, la cultura de Yangshao (c. 3950-c. 1700 a.C.) y la cultura de Longshan (c. 2000-c. 1850 a.C.).

7.1 Las dinastĆ­as primitivas

La tradición dice que los Xia (1994-1766 a.C.) fueron la primera dinastĆ­a china hereditaria, que sólo desapareció cuando fue expulsado su Ćŗltimo gobernante debido al poder tirĆ”nico que ejerció sobre su pueblo. Sin embargo, no hay restos arqueológicos que confirmen esta historia; la primera dinastĆ­a de la cual hay evidencias históricas es la Shang.

7.1.1 La dinastĆ­a Shang (1766-1027 a.C.)

La dinastĆ­a Shang gobernó en el territorio que ocupan las actuales provincias de Henan, Hubei, Shandong y la parte septentrional de Anhui, en el centro y norte de China. La capital, desde alrededor del 1384 a.C. en adelante, estaba situada en Anyang cerca de la frontera norte de Henan. La economĆ­a estaba basada en la agricultura; se cultivaba mijo, trigo, cebada y posiblemente arroz. TambiĆ©n se cuidaban gusanos de seda, y se criaban cerdos, perros, ovejas y bueyes. Se han encontrado recipientes de bronce, armas y otras herramientas, lo cual indica el conocimiento de la metalurgia y la existencia de artesanĆ­a. La sociedad creada por los Shang era aristocrĆ”tica. Al frente estaba el rey, que presidĆ­a una nobleza militar y elegĆ­a a los gobernantes territoriales, que estaban obligados a ayudarle en sus empresas militares. Entre esta clase aristocrĆ”tica y los plebeyos habĆ­a un estrato sacerdotal culto que se ocupaba de los documentos de gobierno y era responsable de la adivinación. Los Shang adoraban a sus antepasados y a una multitud de dioses, el principal de los cuales era conocido como Shang Ti, ‘el SeƱor en lo Alto’.

El relato de la caĆ­da de la dinastĆ­a Shang que aparece en las historias tradicionales chinas sigue el modelo legendario de la defección de los Xia. El Ćŗltimo monarca Shang, un tirano cruel y libertino, fue expulsado por un enĆ©rgico Zhou de un estado en el valle del rĆ­o Wei. Situada en las franjas noroccidentales del dominio Shang, la cultura de los Zhou era una sĆ­ntesis de los elementos bĆ”sicos de la civilización Shang y ciertas tradiciones marciales caracterĆ­sticas de los pueblos no chinos del norte y del oeste.

7.1.2 La dinastĆ­a Zhou (1122-256 a.C.)

Durante este periodo la civilización china se fue extendiendo gradualmente hacia el norte, ocupando el valle del rĆ­o YangtzĆ©. La amplia expansión por este territorio y el primitivo estado de las comunicaciones terrestres hicieron imposible que los Zhou ejercieran un control directo sobre toda la región; por lo tanto delegaron la autoridad en vasallos, cada uno de los cuales gobernaba por lo general sobre una ciudad amurallada y su territorio circundante. La jerarquĆ­a de estos estados de tipo feudal estaba encabezada por el seƱor, cargo que era hereditario; por debajo de Ć©l estaba la clase guerrera y en la base social se encontraban los campesinos y esclavos domĆ©sticos. Con el tiempo, estos estados vasallos se fueron haciendo cada vez mĆ”s autónomos.

La sociedad Zhou estaba organizada alrededor de la producción agrĆ­cola. La tierra estaba dividida idealmente en extensiones cuadradas, cada una de las cuales se subdividĆ­a en nueve parcelas que formaban un espacio con forma de triĆ”ngulo equilĆ”tero. Las ocho parcelas exteriores estaban asignadas a ocho familias campesinas, quienes unĆ­an sus esfuerzos y recursos para cultivar la parcela central propiedad de la clase dirigente. No estĆ” claro hasta quĆ© extremo se utilizaba este sistema de distribución de tierras, pero las dinastĆ­as posteriores pensaron que era la manera mĆ”s equitativa de dividir la tierra.

Las prĆ”cticas religiosas se correspondĆ­an con el sistema social jerĆ”rquico. Los Zhou creĆ­an en el poder que emanaba del Cielo, que autorizaba el poder de los reyes; Ć©stos hacĆ­an sacrificios al SeƱor en lo Alto, ahora llamado Tian (‘Cielo’) y a sus antepasados. El seƱor de los estados hacĆ­a sacrificios a la naturaleza local y a deidades agrĆ­colas, asĆ­ como a sus antepasados. Las familias individuales tambiĆ©n ofrecĆ­an sacrificios a sus antepasados para evitar infortunios y calamidades.

7.1.2.1 Los Zhou del este

Los reyes Zhou fueron capaces de mantener un control efectivo sobre sus dominios hasta que finalmente, en el 770 a.C., algunos de los estados se rebelaron y junto con invasores nómadas del norte expulsaron a los Zhou de su capital, cerca de la actual Xi’an. Con posterioridad, los Zhou establecieron una nueva capital hacia el este, en Luoyang. Aunque ahora estaban mĆ”s a salvo de los ataques de los bĆ”rbaros, los Zhou del este no podĆ­an ya ejercer una gran autoridad polĆ­tica o militar sobre los estados vasallos, muchos de los cuales habĆ­an crecido hasta ser mĆ”s poderosos que el poder central Zhou. Sin embargo, como guardianes del mandato celestial, los Zhou continuaron la prĆ”ctica de confirmar el derecho de los nuevos seƱores a gobernar sobre sus tierras y por lo tanto permanecieron como jefes supremos hasta el siglo III a.C. Desde el siglo VIII al III a.C. tuvo lugar un rĆ”pido crecimiento económico y un profundo cambio social en el marco de una inestabilidad polĆ­tica extrema y un estado de guerra casi incesante. Durante estos aƱos China entró en la edad del hierro; el arado de hierro tirado por bueyes, junto con mĆ”s perfeccionadas tĆ©cnicas de regadĆ­o, llevaron a conseguir mejores cosechas, que a su vez, mantuvieron el constante crecimiento demogrĆ”fico, el cual estuvo acompaƱado por la aparición de una nueva clase de mercaderes y comerciantes. Se mejoraron las comunicaciones por el progresivo uso del caballo como animal de transporte.

La integración económica permitió a los gobernantes ejercer el control sobre mayores extensiones de territorio. Los estados situados en las fronteras exteriores de la zona cultural china se expandieron a costa de sus vecinos no chinos, menos avanzados, y al expandirse se estimuló y diversificó su propia cultura al adquirirse elementos culturales de las civilizaciones exteriores. Por ejemplo, por aculturación de las culturas no chinas del noroeste, los chinos de las regiones fronterizas adoptaron por primera vez el uso de unidades de caballerĆ­a montada. Para los estados de la llanura del norte de China, la expansión significó una agresión contra otras organizaciones polĆ­ticas que compartĆ­an la misma civilización bĆ”sica, y la uniformidad cultural entre los estados tendĆ­a a promocionar el estancamiento cultural. Hacia el siglo VI a.C. siete poderosos estados sitiaron a los mĆ”s pequeƱos y relativamente dĆ©biles de la llanura del norte de China.

Con la caĆ­da de la autoridad polĆ­tica de la dinastĆ­a Zhou y la aparición de poderosos estados perifĆ©ricos, las relaciones interestatales se volvieron cada vez mĆ”s inestables. Durante los siglos VII y VI a.C., se consiguieron breves periodos de estabilidad al organizarse alianzas interestatales bajo la hegemonĆ­a del miembro mĆ”s fuerte. Sin embargo, hacia el siglo V a.C. el sistema de alianzas era insostenible y la China de los Zhou desembocó en el denominado periodo de los Reinos Combatientes (481-221 a.C.), caracterizado por la anarquĆ­a.

7.1.2.2 La edad dorada de la filosofĆ­a china

La respuesta intelectual a la extrema inestabilidad e inseguridad polĆ­tica produjo las fórmulas filosóficas que moldearon el crecimiento del Estado y la civilización china durante los dos milenios siguientes. El mĆ”s antiguo y mĆ”s influyente de los filósofos del periodo fue Kongfuzi o Confucio. En esencia, las propuestas de Confucio representaban la restauración de las instituciones polĆ­ticas y sociales de comienzos de la dinastĆ­a Zhou. CreĆ­a que los sabios gobernantes de ese periodo habĆ­an trabajado para crear una sociedad ideal, por lo que intentó crear una clase de caballeros virtuosos y cultivados que pudieran desempeƱar los altos cargos del gobierno y guiar al pueblo a travĆ©s de su ejemplo personal.

Las doctrinas del taoĆ­smo, la segunda gran escuela filosófica existente durante el periodo de los Reinos Combatientes, se exponen en el Tao TĆŖ-King, que se atribuye a la figura semihistórica de Laozi, y a los trabajos de Zhuangzi. Los taoĆ­stas desdeƱaban el sistema estructurado que preconizaban los confucianos para el cultivo de la virtud humana y el establecimiento del orden social. En al aspecto polĆ­tico, el taoĆ­smo abogaba por un retorno a las comunidades agrĆ­colas primitivas, en las cuales la vida podĆ­a seguir un curso mĆ”s natural.

Una tercera escuela de pensamiento que floreció durante el mismo periodo y posteriormente ejerció una influencia duradera en la civilización china fue el legalismo. Razonando que los grandes desórdenes de su momento exigĆ­an nuevas y drĆ”sticas medidas, los legalistas abogaban por el establecimiento de un orden social basado en leyes estrictas e impersonales, que rigieran cada aspecto de la actividad humana. Para reforzar este sistema propugnaban el establecimiento de un Estado rico y poderoso, en el cual el soberano tendrĆ­a una autoridad incontestable. Los legalistas instaban a la socialización del capital, el establecimiento del monopolio gubernamental y otras medidas económicas designadas para enriquecer al Estado, reforzar su poder militar y centralizar el control administrativo.

7.2 La creación del Imperio

Durante el siglo IV a.C., el reino de Qin, uno de los estados perifĆ©ricos emergentes del noroeste, se embarcó en un programa de reformas administrativas, económicas y militares, siguiendo las doctrinas legalistas. Al mismo tiempo, el poder de los Zhou pasó a ser cada vez mĆ”s dĆ©bil hasta que el rĆ©gimen se colapsó en el 256 a.C. Una generación despuĆ©s, los Qin habĆ­an sojuzgado a los demĆ”s estados.

7.2.1 La dinastĆ­a Qin (221-206 a.C.)

En el 221 a.C., el rey de Qin se autoproclamó Qin Shi Huangdi, o primer emperador de la dinastĆ­a Qin. El nombre China deriva de esta dinastĆ­a.

Con la ayuda de un ministro legalista, Li Si, el emperador unificó el mosaico de estados feudales en un imperio administrativamente centralizado y culturalmente unificado. Se abolieron las aristocracias hereditarias y sus territorios se dividieron en provincias gobernadas por burócratas nombrados por el emperador. La capital de Qin, cerca de la actual ciudad de Xi’an, se convirtió en la primera sede de la China imperial. Se adoptó un sistema de escritura y su uso se hizo obligatorio en todo el Imperio. Para promocionar el comercio interno y la integración económica, los Qin unificaron los pesos y medidas, la acuƱación de moneda y las medidas de las hachas. Se adoptó la propiedad privada de la tierra y se aplicaron leyes e impuestos con igualdad. La bĆŗsqueda de la uniformidad cultural llevó a los Qin a ilegalizar muchas escuelas filosóficas que habĆ­an florecido a finales del Ćŗltimo periodo Zhou. Sólo se dio la aprobación oficial a los legalistas y en el 213 a.C. se quemaron los libros de todas las otras escuelas, a excepción de los ejemplares que se guardaban en la biblioteca imperial Qin.

El primer emperador tambiĆ©n intentó extender las fronteras exteriores de China. En el sur sus ejĆ©rcitos marcharon hacia el delta del rĆ­o Rojo, lo que en la actualidad es Vietnam. En el suroeste su dominio se extendió para englobar la mayor parte de las actuales provincias de Yunnan, Guizhou y Sichuan. En el noroeste sus conquistas alcanzaron Lanzhou, en la actual provincia de Gansu y el noreste, un sector de lo que hoy es Corea, reconoció la superioridad de los Qin. El centro de la civilización china, sin embargo, permaneció en el valle del Huang He. Aparte de la unificación y expansión del Imperio, el logro mĆ”s conocido de la dinastĆ­a Qin fue la terminación de la Gran Muralla china.

El coste económico y humano de las conquistas extranjeras de los Qin y la construcción de la Gran Muralla y otras obras pĆŗblicas fue enorme. El peso siempre creciente de los impuestos, el servicio militar y los trabajos forzados crearon un hondo resentimiento contra la dinastĆ­a Qin entre las clases populares del Imperio. AdemĆ”s, las clases intelectuales estaban ofendidas por la polĆ­tica gubernamental de control del pensamiento, en especial la quema de libros. El sucesor de Qin Shi Huangdi cayó bajo la influencia de un astuto eunuco de palacio. Siguió una lucha por el poder, mutilando la administración central y el pueblo indignado se levantó en una rebelión.

7.2.2 Los Han anteriores u occidentales (206 a.C.-9 d.C.)

De los tumultos y estado de guerra que marcaron los Ćŗltimos aƱos de la dinastĆ­a Qin, destacó un dirigente de origen humilde, Liu Bang (vĆ©ase Gaozu). Aplastó a otros pretendientes al trono y se proclamó a sĆ­ mismo emperador en el 206 a.C. La dinastĆ­a Han por Ć©l fundada serĆ­a la mĆ”s duradera de la era imperial. Los Han se constituyeron sobre la base unificada que habĆ­an dejado los Qin, modificando la polĆ­tica que habĆ­a conducido a su derrocamiento. Las leyes onerosas fueron suspendidas, los impuestos se redujeron sensiblemente y se adoptó una polĆ­tica favorecedora del comercio que permitió la recuperación económica. En principio Liu Bang concedió reinos hereditarios a algunos de sus aliados y familiares, pero hacia mediados del siglo II a.C. la mayor parte de estos reinos habĆ­an sido reintegrados y casi todo el territorio chino estaba bajo la jurisdicción del Imperio de los Han.

Una de las contribuciones mĆ”s importantes de esta dinastĆ­a fue el establecimiento del confucianismo como ideologĆ­a oficial; sin embargo, en un intento por proporcionar una ideologĆ­a completa al Imperio, los Han incorporaron al confucianismo ideas de otras muchas escuelas filosóficas y emplearon supersticiones populares para incrementar las enseƱanzas de Confucio. En el funcionamiento administrativo heredado de los Qin, los emperadores Han siguieron el principio confuciano de elegir a los hombres sobre la base del mĆ©rito mĆ”s que por su nacimiento, siendo elegidos los mĆ”s cualificados mediante exĆ”menes escritos. A finales del siglo II a.C. se fundó una universidad imperial en la cual se formaban los futuros funcionarios en los cinco clĆ”sicos de la escuela confuciana.

Los primitivos Han alcanzaron el cenit de su poder bajo el emperador Wudi (reinó desde el 140 al 87 a.C.). Casi todo el territorio que hoy engloba China pasó a estar bajo poder imperial, aunque muchas regiones, en especial al sur del rĆ­o Yangzi Jiang, no estaban totalmente asimiladas. La autoridad china se estableció en el sur de Dongbei Pingyuan (Manchuria) y norte de Corea. En el oeste, los ejĆ©rcitos Han lucharon con una tribu conocida como los xiongnu, que probablemente estaban emparentados con los hunos y penetraron en el actual territorio de KazajstĆ”n. En el sur, la isla de Hainan pasó a estar bajo control Han y se establecieron colonias alrededor del delta del Xi Jiang, en Annam y en Corea.

Las polĆ­ticas expansionistas del emperador Wudi consumieron los excedentes económicos que se habĆ­an ido acumulando durante las administraciones de sus predecesores y fue necesaria la restauración de polĆ­ticas legalistas para reponer las arcas del estado. Se subieron los impuestos, reaparecieron los monopolios estatales y la moneda se devaluó. Las penurias que sufrĆ­an los campesinos se vieron agravadas por el crecimiento demogrĆ”fico, lo cual provocó la reducción del tamaƱo de las parcelas individuales en un momento en que los impuestos se incrementaban. Durante el siglo I a.C., las condiciones empeoraron aĆŗn mĆ”s. En varias ocasiones el trono fue heredado por prĆ­ncipes en edad infantil, cuyas madres a menudo completaban las responsabilidades del gobierno con miembros no cualificados de su propia familia. Las facciones y la incompetencia debilitaron el gobierno imperial. Grandes familias terratenientes de la provincia desafiaron a las autoridades que recaudaban los impuestos del gobierno central y adquirieron una especie de privilegio para la exención de impuestos, lo que redujo los ingresos del gobierno y gravó duramente a los campesinos. Los levantamientos agrarios y el bandolerismo reflejaron el descontento popular.

7.2.3 La dinastĆ­a Xin (9 d.C.-23 d.C.)

Durante este periodo de desórdenes, un ministro ambicioso, Wang Mang, envenenó al emperador Pingdi, aĆŗn niƱo y para el que habĆ­a estado actuando como regente, estableciendo la efĆ­mera dinastĆ­a Xin. Wang Mang intentó revitalizar el gobierno imperial y mitigar la situación de los campesinos. Actuó contra los grandes estados exentos de impuestos al nacionalizar toda la tierra y redistribuirla entre los verdaderos cultivadores; se abolió la esclavitud, se reforzaron los monopolios imperiales sobre la sal, el hierro y la acuƱación de moneda y se crearon otros nuevos. El Estado fijaba los precios para proteger a los campesinos de los comerciantes sin escrĆŗpulos y proporcionó prĆ©stamos a bajo interĆ©s a los que necesitaban capital para comenzar empresas productivas. La resistencia de las poderosas clases propietarias de la tierra fue tan dura que Wang Mang fue obligado a revocar su legislación sobre la tierra. La crisis agraria se intensificó y la situación empeoró con la ruptura de los grandes sistemas de control del agua del norte de China, que habĆ­an sido descuidados por un gobierno debilitado fiscalmente. En el norte estalló una rebelión campesina a gran escala bajo el protagonismo de un grupo conocido como ‘Cejas Rojas’. Muy pronto las grandes familias terratenientes se unieron a ellos y al final consiguieron matar a Wang Mang y reinstaurar la dinastĆ­a Han.

7.2.4 Los Han posteriores u orientales (25-220)

La debilidad administrativa y la ineficacia lastraron la Ćŗltima dinastĆ­a Han u oriental desde sus inicios. Al igual que bajo los Han anteriores u occidentales, el gobierno central entró en decadencia al ser elegidos familiares maternos incompetentes en representación de los emperadores infantiles. Con la ayuda de los eunucos de la corte, los emperadores posteriores consiguieron deshacerse de ellos, pero sólo a costa de conceder una responsabilidad igualmente grande a los eunucos cortesanos. Como resultado de ello, el gobierno de nuevo estuvo dividido en facciones. Entre el 168 y el 170 surgió el conflicto entre los eunucos y los burócratas, que sentĆ­an que los primeros habĆ­an usurpado su legĆ­tima posición de influencia en el gobierno. Hacia el 184 se produjeron dos grandes rebeliones, encabezadas por un grupo taoĆ­sta denominado Turbantes Amarillos, que saquearon Shandong y las Ć”reas adyacentes. En el 215 fue sofocada otra rebelión taoĆ­sta dirigida por la Sociedad de los Cinco Montones de Arroz de Sichuan.

7.2.5 Periodo de desunión

La dinastĆ­a Han comenzó a desmembrarse cuando las grandes familias terratenientes, aprovechĆ”ndose de la debilidad del gobierno imperial, establecieron sus propios ejĆ©rcitos privados. Finalmente, en el 220, Cao Pei fundó la dinastĆ­a y reino Wei (220-265) en las provincias del norte. La dinastĆ­a Shu Han (221-263) se estableció en el suroeste y la dinastĆ­a Wu (222-280) en el sureste. Los tres reinos libraron incesantes guerras entre sĆ­. En el 265, Sima Yang, un poderoso general de la dinastĆ­a Wei, usurpó el trono y estableció la dinastĆ­a Xi Jin (265-317) en el norte de China. Hacia el 280 habĆ­a reunificado el norte y el sur bajo su mandato. Sin embargo, poco despuĆ©s de su muerte en el 290, el Imperio empezó a derrumbarse. Una importante razón para esta inestabilidad interna era la influencia de las principales familias terratenientes. Hicieron que su poder se sintiera a travĆ©s de un sistema de nueve grados de funcionarios, mediante el cual se dio a individuos destacados en cada zona administrativa la autoridad para jerarquizar a las familias locales, de acuerdo con su potencial de servicio al gobierno. A causa de la arbitrariedad con que algunas personas importantes decidieron la clasificación, a menudo reflejaba mĆ”s los deseos de las familias dirigentes en el territorio que el mĆ©rito de aquĆ©llos que habĆ­an sido elegidos.

Las tribus no chinas del norte, a las que los Han habĆ­an combatido hasta conseguir detenerlos a lo largo de la frontera, aprovecharon la oportunidad que les ofrecĆ­a la debilidad del gobierno para extender su ansia de tierras de pastos dentro de la fĆ©rtil llanura del norte de China. Las invasiones comenzaron en el 304, y hacia el 317 los xiongnu habĆ­an arrebatado a la dinastĆ­a Xi Jin el norte de China. Durante casi tres siglos este territorio estuvo gobernado por varias dinastĆ­as no chinas, mientras en el sur lo hacĆ­an una sucesión de cuatro dinastĆ­as chinas, todas ellas centradas en el Ć”rea de la actual ciudad de Nanjing. Ninguna de las dinastĆ­as invasoras fue capaz de extender su control sobre la totalidad de la llanura del norte hasta el 420, aƱo en que lo hizo la dinastĆ­a Bei Wei (o Bei del Norte, 386-534).

Durante la segunda mitad del siglo V los Bei del Norte adoptaron una polĆ­tica de unificación. Se administró burocrĆ”ticamente la región agrĆ­cola del norte de China, como habĆ­a ocurrido con dinastĆ­as chinas anteriores, y se impuso el servicio militar obligatorio a los miembros de las tribus. Se adoptaron las ropas y costumbres chinas y el chino se convirtió en el idioma oficial de la corte. Los jefes tribales, presionados por esta polĆ­tica unificadora, se rebelaron y en el 534 derrocaron a la dinastĆ­a. Durante los siguientes 50 aƱos, el norte de China fue gobernado nuevamente por dinastĆ­as no chinas.

7.3 El restablecimiento del Imperio

China fue reunificada bajo la dinastĆ­a Sui (581-617). El primer emperador fue Yang Chien, un militar que en el 581 usurpó el trono del norte. Durante los siguientes ocho aƱos terminó la conquista del sur de China y estableció su capital en Chang’a (hoy Xi’an). Los Sui restablecieron el sistema administrativo centralizado de los Han y reinstauraron los exĆ”menes para la selección de funcionarios. Aunque el confucianismo fue instaurado oficialmente, tambiĆ©n el taoĆ­smo y el budismo fueron admitidos en la formulación de la nueva ideologĆ­a imperial. Floreció el budismo, introducido en China desde la India durante la Ćŗltima dinastĆ­a Han y el periodo subsiguiente de desunión.

El breve reinado de la dinastĆ­a Sui fue una etapa de gran actividad: se reparó la Gran Muralla con un gran coste en vidas humanas, se construyó un sistema de canales, que posteriormente darĆ­a lugar al Gran Canal, para transportar los ricos productos agrĆ­colas del delta del Yangzi Jiang hasta Luoyang y el norte, y se reasentó el control chino sobre el norte de Vietnam y, en menor medida, sobre las tribus de Asia central. Sin embargo, una larga y costosa campaƱa militar en el norte de Corea terminó en derrota. Con su prestigio seriamente empaƱado por el empobrecimiento de su población, la dinastĆ­a Sui cayó en el 617 ante el levantamiento dirigido por Li Yuan.

7.3.1 La dinastĆ­a Tang (618-907)

Fundada por Li Yuan, la dinastĆ­a Tang supuso una Ć©poca de fuerza y brillantez sin precedentes en la historia de la civilización china. El sistema de exĆ”menes para reclutar a los funcionarios pĆŗblicos de la administración era tan refinado para su momento que, en su forma bĆ”sica, ha sobrevivido hasta el siglo XX. Se reestructuraron los órganos del gobierno imperial y local, que se ampliaron para proporcionar una administración centralizada, y se decretó un elaborado código de leyes administrativas y penales. Chang’an, capital de los Tang, fue un centro de tolerancia cultural y religiosa. Se practicaban muchas religiones, incluso el cristianismo nestoriano. Se desarrolló un importante comercio exterior con Asia central y Occidente, desarrollĆ”ndose las rutas de las caravanas, y mercaderes de Oriente Próximo comerciaban a travĆ©s del puerto de Cantón. Bajo los Tang, la influencia china se extendió sobre Corea, sur de Dongbei Pingyuan (Manchuria) y norte de Vietnam; en el oeste, por medio de alianzas con tribus de Asia central, los Tang controlaron la depresión de Tarim y al final hicieron que su influencia llegara hasta lo que hoy es AfganistĆ”n.

7.3.1.1 Sistema administrativo

La fuerza económica y militar del Imperio Tang se basaba en un sistema de reparto equitativo de la tierra para la población adulta masculina. El impuesto agrĆ­cola per cĆ”pita que pagaban los propietarios por cada parcela de tierra era la fuente principal de ingresos para el gobierno y el servicio militar periódico que se les exigĆ­a era la base del poder militar Tang. Sin embargo, surgieron dificultades porque el gobierno seguĆ­a exonerando a los estados libres de impuestos y hacĆ­a grandes concesiones de tierra a aquĆ©llos que les eran favorables. Como resultado del crecimiento de la población hacia el siglo VIII, los propietarios de parcelas individuales heredaban unos terrenos de tierra muy reducidos, pero el impuesto anual mantenĆ­a su cuantĆ­a, por lo que los campesinos abandonaban sus parcelas, reduciendo de ese modo los ingresos del Estado y mermando la eficiencia de las fuerzas armadas. Las Ć”reas fronterizas ya no podĆ­an estar protegidas por las fuerzas militares, por lo que se encargó su defensa a tropas no chinas dirigidas por un sistema en el que tenĆ­an grandes privilegios los jefes militares.

7.3.1.2 Rebelión de An Lushan

Los primeros gobernantes Tang, tambiĆ©n la emperatriz Wu Zetian (reinó desde el 683 hasta el 705), una antigua concubina imperial, por lo general fueron gobernantes capaces. Sin embargo, el brillante emperador Xuanzong, se enamoró de la cortesana Yang Guifei, una mujer mucho mĆ”s joven que Ć©l y descuidó sus deberes permitiĆ©ndole situar a sus amigos y familiares en cargos importantes del gobierno. Uno de los favoritos de Yang era el competente general An Lushan, quiĆ©n luchó con el hermano de Yang por el control del gobierno, de manera que precipitó una revuelta en el 755; no se restableció la paz hasta el 763 y aĆŗn entonces sólo por medio de alianzas que los Tang habĆ­an formado con tribus de Asia central. Tras la rebelión de An Lushan, el gobierno central nunca mĆ”s fue capaz de controlar a los comandantes militares de las fronteras, algunos de los cuales convirtieron sus puestos en reinos hereditarios y retuvieron con regularidad los impuestos destinados al gobierno central. Esta situación se expandió a otras regiones de la propia China y hacia el siglo IX la zona que se encontraba bajo el control efectivo del gobierno central estaba limitada a la provincia de Shaanxi.

Durante los Ćŗltimos aƱos de los Tang tuvo lugar un gran florecimiento cultural; los poetas Li Bo, Du Fu y el maestro de la prosa Han Yu aparecieron en un momento en que ya habĆ­a comenzado el proceso de declive polĆ­tico. La impresión de libros promovió la unidad cultural.

7.3.1.3 Persecución religiosa y desunión

La decadencia del budismo y la reaparición del confucianismo a finales de la era Tang dieron lugar a la aparición de una nueva y vigorosa ideologĆ­a, que proporcionó la base para el crecimiento de una civilización perdurable en los siglos siguientes. Aunque el budismo habĆ­a alcanzado el punto mĆ”s alto de su popularidad durante los aƱos de paz y prosperidad de los primeros Tang, se habĆ­a desarrollado una clase oficial culta, principalmente de creencias confucianas hacia mediados de la dinastĆ­a que consideraba al budismo una fuerza perjudicial para la sociedad china. En el 845, el emperador comenzó una dura persecución contra los budistas; mĆ”s de 4.600 monasterios y 40.000 templos y santuarios fueron destruidos, y mĆ”s de 260.000 monjes budistas se vieron obligados a volver a la vida secular. TambiĆ©n otros grupos religiosos pasaron a estar bajo control estatal.

El crecimiento social y económico tendĆ­a a preservar la unidad durante los aƱos de fragmentación polĆ­tica. Durante el periodo de gobierno de los Ćŗltimos Tang se desarrollaron los gremios de artesanos, el uso de papel moneda y la centralización comercial.

La dispersión del poder polĆ­tico y económico que marcó la disolución de la dinastĆ­a Tang dio lugar al llamado periodo de las Cinco DinastĆ­as (907-960). No sólo se sucedieron cinco cortas dinastĆ­as en el valle del Huang He del norte de China, sino que se establecieron diez estados independientes, la mayor parte de ellos en el sur del paĆ­s. A pesar de ello, los invasores extranjeros no asolaron China durante este periodo; la dinastĆ­a Liao (907-1125) de los mongoles Khitan, con base en Dongbei Pingyuan (Manchuria) y Mongolia, fue capaz de extender su influencia sobre las provincias de Hebei y Shaanxi. PekĆ­n se convirtió en la capital del sur del imperio conjunto chino-khitan.

7.3.2 Maduración cultural y gobierno extranjero

El periodo de las Cinco DinastĆ­as terminó en el 960, cuando un jefe militar, Zhao Guangyin, accedió al trono y proclamó el establecimiento de la dinastĆ­a Song (960-1279). Hacia el 978 los Song controlaban la mayor parte de China, de la que quedaban excluidos tan sólo aquellos territorios en el norte de las provincias de Hebei y Shaanxi en poder de la dinastĆ­a Liao de los mongoles Khitan. El periodo suele subdividirse en la etapa de los Song del norte (960-1126), cuando la capital estaba situada en Kaifeng, y la de los Song del sur (1127-1279), cuya capital se encontraba en Hangzhou y la dinastĆ­a Tan sólo controlaba el sur de China.

7.3.2.1 Los Song del norte

Los primeros Song limitaron en gran manera el poder de los militares de las provincias y subordinaron el ejĆ©rcito al gobierno civil, por miedo a dispersar el poder militar hacia las fronteras, un desarrollo que habĆ­a debilitado a los Tang. AsĆ­, los funcionarios (burócratas) civiles dominaban cada aspecto del gobierno y la sociedad. El sistema Tang de realizar exĆ”menes o pruebas para los funcionarios pĆŗblicos se expandió para proporcionar a la dinastĆ­a un constante flujo de talentos. Los Song reorganizaron el gobierno imperial, centralizando el control efectivo en la capital de una manera mucho mayor que hasta entonces. La estructura administrativa local permaneció segĆŗn el modelo diseƱado por los Tang. La literatura, las artes y la filosofĆ­a siguieron su desarrollo a lo largo de las lĆ­neas que se habĆ­an establecido en el Ćŗltimo periodo Tang. La educación floreció y la economĆ­a siguió su expansión y diversificación. Sin embargo, la debilidad militar se convirtió en un problema crónico.

DespuĆ©s de numerosas derrotas a manos de los Liao, los Song firmaron un tratado en el 1004, cediendo de forma permanente el Ć”rea que los Liao ocupaban a lo largo de la frontera norte y aceptando pagar un tributo anual. Tras una lucha prolongada con los Xi Xia, una tribu de la frontera noroccidental, los Song de nuevo compraron la paz en 1044, aceptando el pago de un tributo. Hacia mediados del siglo XI, los Song comenzaron a experimentar dificultades fiscales. El crecimiento demogrĆ”fico habĆ­a sobrepasado las tasas del crecimiento económico y los gastos militares asociados a la defensa de la frontera norte al igual que los costes administrativos de una burocracia civil en constante crecimiento consumĆ­an la mayor parte de los ingresos anuales. Mientras se deterioraba la situación militar y fiscal, la burocracia civil estaba dividida en grupos que proponĆ­an diferentes medidas reformistas.

En 1069, un joven emperador Song eligió al capaz Wang Anshi como su consejero principal. Wang concibió una serie de reformas tajantes destinadas a incrementar los ingresos gubernamentales, reducir los gastos y reforzar el ejĆ©rcito. Al darse cuenta de que los ingresos del gobierno estaban relacionados con la prosperidad de los campesinos individuales que pagaban impuestos, propuso una reforma agraria que darĆ­a terrenos iguales a todos, prĆ©stamos para ayudar a los agricultores en la siembra y cosecha, la eliminación de trabajo obligatorio para los campesinos, un impuesto gradual sobre la riqueza y la compra por parte del Estado de los excedentes de bienes para su redistribución en tiempos de hambre. Se adoptaron algunos de estos programas de Wang, pero pronto se abandonaron a causa de la oposición de la burocracia.

7.3.2.2 Los Song del sur

Incitados por la propia debilidad militar y fiscal, los Song se aliaron, a comienzos del aƱo 1120 con la dinastĆ­a Jin (1122-1234) del norte de Dongbei Pingyuan (Manchuria) en contra de los Liao. DespuĆ©s de la derrota de Ć©stos, los Jin se volvieron contra los Song y marcharon hacia el norte de China, tomando la capital, Kaifeng, en 1126. Los Song se retiraron y en 1135 restablecieron su capital en Hangzhou, en la provincia de Zhejiang.

Bajo los Song del sur, la China meridional siguió desarrollĆ”ndose con rapidez. La prosperidad económica y los logros intelectuales sobrepasaron a los de sus hermanos conquistados del norte; el rĆ”pido desarrollo económico permitió al gobierno reforzar sus defensas en mayor grado que lo que habĆ­an conseguido los Song del norte; el confucianismo, sintetizado en su forma final por Zhu Xi, siguió como un sistema de pensamiento centrado en el hombre, aunque tomó prestadas doctrinas metafĆ­sicas del budismo para presentar una filosofĆ­a del Universo mĆ”s equilibrada y duradera. Aunque el deterioro administrativo fue en aumento, los Song del sur no mostraban signos de inestabilidad interna; sin embargo la dinastĆ­a fue sometida por una fuerza militar claramente superior tras algunos aƱos de duros enfrentamientos.

En 1206, una asamblea de todas las tribus turcomongolas se reunió en Karakorum, en Mongolia exterior, para confirmar el establecimiento de la unidad mongola bajo la jefatura de Gengis Kan. Los mongoles iniciaron inmediatamente una serie de conquistas que dieron como resultado el establecimiento del mayor imperio conocido hasta entonces. En China fue la dinastĆ­a extranjera Jin la que primero cayó ante los ejĆ©rcitos mongoles. Gengis Kan conquistó PekĆ­n en 1215 y por tanto extendió su poder sobre el resto del norte de China. La conquista de los Song del sur no se completó hasta el 1279, despuĆ©s de que Kublai Kan, nieto de Gengis Kan, heredara la dirección de las fuerzas mongolas.

7.3.2.3 Mandato mongol

Kublai trasladó la capital mongola desde Karakorum hasta un lugar cercano a PekĆ­n, desde donde gobernó un imperio que se extendĆ­a desde la Europa oriental hasta Corea y desde el norte de Siberia al sur de la frontera norte de la India. Kublai y sus sucesores adoptaron gran parte de la maquinaria administrativa que habĆ­a existido bajo los Song. Gobernaron como emperadores de China con el tĆ­tulo dinĆ”stico de Yuan (1279-1368) y asĆ­ son considerados por los chinos. El reinado de Kublai Kan fue el punto mĆ”s alto del poder mongol. Se mejoraron mucho las comunicaciones y las rutas de comercio de Asia central, bajo control mongol, eran ahora mĆ”s seguras que nunca, favoreciendo el trĆ”fico comercial desde Occidente a Oriente. Llegaron a China misioneros y comerciantes, y con ellos aparecieron nuevas ideas, tĆ©cnicas, alimentos y medicinas. El mĆ”s conocido de los extranjeros que llegaron a China fue el mercader veneciano Marco Polo, cuyos escritos describieron muy vivamente el esplendor del Imperio mongol.

Mientras tanto, existĆ­a un creciente descontento dentro de China. La clase oficial confuciana estaba resentida por las prohibiciones mongolas para que los chinos ocuparan puestos importantes. La inflación y los impuestos oprimĆ­an a los campesinos chinos. Las dĆ©cadas de 1330 y 1340 estuvieron marcadas por las malas cosechas y el hambre en el norte de China, y por fuertes inundaciones del Huang He. Durante la dĆ©cada de 1340 tuvieron lugar levantamientos en casi todas las provincias. En la siguiente dĆ©cada aparecieron destacados dirigentes rebeldes y en la dĆ©cada de 1360 Chu Yuanziang, un antiguo monje budista, fue capaz de extender su poder a travĆ©s del valle del Yangzi Jiang. En 1371, mientras los mongoles estaban paralizados por rivalidades internas, marchó hacia el norte y tomó PekĆ­n. Finalmente los mongoles se retiraron a su territorio de Mongolia, desde donde continuaron hostigando a los chinos.

7.4 Poder imperial

Dos grandes dinastĆ­as dominaron la historia china tras la llegada al poder de los Chu.

7.4.1 La dinastĆ­a Ming (1368-1644)

Fundada por Chu, los Ming establecieron su capital en principio en Nanjing y revitalizaron la civilización china de los Tang y los Song. Su poder se asentó firmemente en China y a lo largo de Asia oriental, se restableció el gobierno civil, se fomentó la literatura, se fundaron escuelas y se reformó la administración de justicia; se amplió la Gran Muralla y se mejoró el Gran Canal. El imperio se dividió en 15 provincias, la mayor parte de las cuales aĆŗn mantienen sus nombres originales. Cada provincia estaba supervisada por tres comisionados —uno para las finanzas, otro para los temas militares y un tercero para los temas judiciales. El comisionado financiero, que encabezaba la administración, fue sustituido en los Ćŗltimos aƱos de la dinastĆ­a por un gobernador.

Los primeros Ming tambiĆ©n restablecieron el sistema de relaciones tributarias mediante las cuales los estados no chinos de Asia oriental reconocieron la supremacĆ­a cultural y moral de China y enviaron periódicamente tributos a la corte china. Durante el primer cuarto del siglo XV, las tribus de Mongolia fueron derrotadas definitivamente y la capital volvió a ubicarse en PekĆ­n. Las expediciones navales chinas extendieron el poder del imperio Ming a lo largo de todo el sureste de Asia, la India y Madagascar. Sin embargo, desde mediados del siglo XV, el poder Ming comenzó a declinar. El protagonismo imperial se habĆ­a deteriorado y los eunucos de la corte llegaron a ejercer un gran control sobre el emperador, alentando el descontento y la creación de grupos disidentes en el gobierno. El tesoro imperial se habĆ­a reducido a causa del coste de la defensa contra las repetidas incursiones mongolas y las incursiones de los piratas japoneses que habĆ­an asolado la costa sureste durante todo el siglo XVI. Una campaƱa de siete aƱos contra las tropas japonesas en Corea a finales del siglo XVI dejó a los Ming exhaustos.

Durante el periodo de decadencia de los Ming, se iniciaron las relaciones marĆ­timas entre Occidente y China. Los primeros en llegar fueron los portugueses, en 1521, y hacia 1557 habĆ­an adquirido una factorĆ­a comercial en Macao. DespuĆ©s de 1570 comenzó el comercio entre China y los asentamientos espaƱoles en Filipinas. En 1619 los holandeses se asentaron en Taiwan y tomaron posesión de las cercanas islas Pescadores. Mientras tanto, en la Ćŗltima mitad del siglo XVI, habĆ­an llegado a China desde Europa misioneros jesuitas y comenzaron a predicar el cristianismo. La sabidurĆ­a y los conocimientos de los jesuitas pronto les dieron acceso a la corte Ming, ante la oposición de los sabios neoconfucianos que permanecĆ­an preocupados con problemas de orden social. Los jesuitas fueron incapaces de implantar el cristianismo y de arraigar en China el pensamiento cientĆ­fico occidental.

La caĆ­da de los Ming se ocasionó por una rebelión que estalló en la provincia de Shaanxi como resultado de la incapacidad gubernamental para proporcionar ayudas en momentos de hambre y desempleo. Cuando los rebeldes llegaron a PekĆ­n en 1664, las tropas Ming estaban desplegadas en la Gran Muralla, procurando frenar la invasión de los manchĆŗes, una tribu tungĆŗsica que habĆ­a obtenido recientemente el poder en Dongbei Pingyuan (Manchuria). Los Ming decidieron aceptar la ayuda manchĆŗ para expulsar a los rebeldes de la capital, pero tras prestar esa colaboración, los manchĆŗes se negaron a abandonar PekĆ­n, lo que forzó a los Ming a retirarse al Sur de China, donde intentaron, sin Ć©xito, restablecer su rĆ©gimen.

7.4.2 La dinastĆ­a ManchĆŗ o Qing (1644-1912)

Bajo la dinastĆ­a Qing, los manchĆŗes siguieron absorbiendo la cultura de China. Su organización polĆ­tica se basaba en la de los Ming, aunque estaba mĆ”s centralizada; el mĆ”ximo organismo administrativo fue una nueva institución, el Gran Consejo, que tramitaba los asuntos militares y polĆ­ticos del Estado bajo la supervisión directa del emperador. Los funcionarios (burócratas) principales en la capital tenĆ­an tanto un jefe chino como manchĆŗ. Desaparecieron tanto la burocracia tradicional como los exĆ”menes para funcionarios pĆŗblicos, que eran elegidos por su conocimiento del confucianismo.

Hacia finales del siglo XVII, los Qing habĆ­an eliminado toda la oposición Ming y sofocado una rebelión encabezada por generales chinos, quienes en principio habĆ­an ayudado a los manchĆŗes y a los que se habĆ­an otorgado dominios semiautónomos en el sur. A mediados del siglo XVIII, durante el reinado del emperador Qianlong, la dinastĆ­a Qing llegó al apogeo de su poder. Dongbei Pingyuan (Manchuria), Mongolia, Xinjiang y el TĆ­bet se encontraban bajo el control Qing, hasta Nepal notó la influencia china; Birmania enviaba periódicamente tributos a la corte Qing, al igual que las islas RyÅ«kyÅ«; Corea y Vietnam del Norte reconocieron ambos la soberanĆ­a china y Taiwan fue anexionada.

El orden interno que los manchĆŗes implantaron hizo del siglo XVIII un periodo de paz y prosperidad sin precedentes en China; la población se duplicó, pero la producción fue incapaz de expandirse al mismo ritmo. Hacia finales del siglo XVIII, la situación económica del campesinado chino habĆ­a empezado a declinar. Los recursos financieros del gobierno estaban gravemente mermados por el coste de la expansión exterior y a finales del reinado de Qianlong estaban casi agotados por la corrupción oficial. Las tropas manchĆŗes situadas a lo largo de toda China fueron una causa mĆ”s de deterioro de la economĆ­a y, debilitadas por su escasa experiencia bĆ©lica al servir como simples guarniciones, fueron poco capaces de empuƱar las armas en su propia defensa.

A finales del siglo XVIII los manchĆŗes aceptaron con reservas las relaciones comerciales con Occidente; el comercio estaba limitado al puerto de Cantón y los comerciantes extranjeros tenĆ­an que llevar a cabo sus intercambios comerciales a travĆ©s de un nĆŗmero limitado de comerciantes chinos (sistema del Cohong). Los paĆ­ses mĆ”s activos eran Gran BretaƱa, Francia y Estados Unidos, aunque el comercio britĆ”nico era el mĆ”s importante. Inicialmente el balance comercial era favorable a China, pues Gran BretaƱa compraba tĆ© y hacĆ­a sus pagos en plata. Para invertir la balanza comercial, durante la dĆ©cada de 1780, los comerciantes britĆ”nicos introdujeron en China opio procedente de la India. Hacia 1800 el mercado del opio se habĆ­a desarrollado muy rĆ”pidamente y la balanza comercial se habĆ­a inclinado a favor de Gran BretaƱa. La pĆ©rdida de la plata china como resultado del creciente comercio del opio agravó las dificultades fiscales a las que ya se tenĆ­a que enfrentar el gobierno Qing.

7.4.2.1 Presión extranjera

El siglo XIX estuvo caracterizado por un rĆ”pido deterioro del sistema imperial y un crecimiento continuo de la presión extranjera desde Occidente y mĆ”s tarde desde Japón. El tema de las relaciones comerciales entre China y Gran BretaƱa dio lugar al primer conflicto serio. Los britĆ”nicos estaban ansiosos por expandir sus contactos comerciales mĆ”s allĆ” de los lĆ­mites restrictivos impuestos en Cantón. Para llevar a cabo esta expansión, intentaron establecer relaciones diplomĆ”ticas con el Imperio chino de la misma forma que existĆ­an entre Estados soberanos en Occidente. China, con su larga historia de autosuficiencia económica, no estaba interesada en incrementar el comercio; ademĆ”s, desde el punto de vista chino las relaciones internacionales, si tenĆ­an que existir de alguna manera, debĆ­an ser segĆŗn un sistema tributario en el que se reconociera la hegemonĆ­a china. Por otra parte, los chinos estaban ansiosos por detener el comercio del opio, que estaba socavando las bases fiscal y moral del Imperio. En 1839, oficiales chinos confiscaron y destrozaron grandes cantidades de opio de barcos britĆ”nicos en el puerto de Cantón y aplicaron fuertes presiones a la comunidad britĆ”nica de esa ciudad. Los britĆ”nicos se negaron a restringir aĆŗn mĆ”s la importación de opio y las hostilidades surgieron a finales de 1839.

7.4.2.2 Guerras comerciales y tratados desiguales

La primera guerra del Opio terminó en 1842 con la firma del Tratado de Nanjing. China habĆ­a sido vencida y los tĆ©rminos del tratado garantizaban a Gran BretaƱa las prioridades comerciales que buscaba. Durante los dos aƱos siguientes, tanto Francia como Estados Unidos obtuvieron tratados similares. China vio estos tratados como desagradables pues eran concesiones dictadas por bĆ”rbaros ingobernables; sin embargo, su sumisión a las clĆ”usulas comerciales respecto a la expansión del comercio estaba muy por debajo de las expectativas de las potencias occidentales. Tanto Gran BretaƱa como Francia encontraron pronto ocasión para renovar las hostilidades y durante la segunda guerra del Opio (1856-1860), aplicaron la presión militar a la capital de la región en el norte de China. Se firmaron nuevos tratados en Tianjin en 1858, que extendieron las ventajas occidentales. Cuando el gobierno de PekĆ­n se negó a ratificarlos, se reabrieron las hostilidades. Una fuerza expedicionaria franco-britĆ”nica penetró hasta PekĆ­n. DespuĆ©s de que el palacio de Verano fuera incendiado como venganza por las atrocidades chinas infligidas a los prisioneros occidentales, se firmaron las Convenciones de PekĆ­n, en las que se ratificaban los tĆ©rminos de los tratados anteriores.

Estos tratados, conocidos en su conjunto en China como los ‘tratados desiguales’, determinaron las relaciones chinas con Occidente hasta 1943, cambiaron el curso del desarrollo social y económico chino y obstaculizaron de manera permanente la polĆ­tica de la dinastĆ­a ManchĆŗ. De acuerdo con sus disposiciones, los puertos chinos se volvieron a abrir al comercio internacional, se permitió la instalación de colonias de residentes extranjeros, y se cedieron de forma permanente a Gran BretaƱa los territorios de Hong Kong y Kowloon. AdemĆ”s se garantizó a los sĆŗbditos de los Estados firmantes de los tratados la extraterritorialidad, de modo que casi todos los extranjeros en China quedaban bajo la Ćŗnica jurisdicción de sus consulados y sólo estaban sujetos a las leyes de sus paĆ­ses de origen. Todos los tratados presentaban una clĆ”usula de nación mĆ”s favorecida, bajo la cual cualquier privilegio que extendĆ­a China a una nación era automĆ”ticamente extendida a todos los demĆ”s Estados signatarios de los tratados. Con el tiempo se fraguó el control extranjero sobre toda la economĆ­a china. Los tratados marcaron los aranceles sobre los bienes importados por China en un mĆ”ximo de un 5% de su valor; esta disposición hizo que China fuera incapaz de recaudar suficientes impuestos sobre las importaciones, lo que impidió proteger a las industrias nacionales y promover la modernización económica.

7.4.2.3 La rebelión Taiping

Durante la dĆ©cada de 1850 se agitaron los cimientos del imperio por la rebelión Taiping, una revolución popular de origen religioso, social y económico. Su dirigente, Hong Xiuquan se llegó a considerar a sĆ­ mismo hermano pequeƱo de Jesucristo, al que por mandato divino se le habĆ­a ordenado deshacerse del mandato manchĆŗ de China y establecer una dinastĆ­a cristiana. La rebelión surgió en la provincia de Guangxi en 1851; hacia 1853 los Taiping se habĆ­an desplazado hacia el norte y establecido su capital en Nanjing. Aunque no fueron capaces de ocupar PekĆ­n, hacia 1860 estaban firmemente atrincherados en el valle del Yangzi Jiang y amenazaban Shanghai.

La dinastĆ­a manchĆŗ, enfrentada a la realidad de tener que mantener relaciones con los mĆ”s poderosos Estados occidentales y destrozada por una rebelión interna de proporciones sin precedentes, pretendió reformar su polĆ­tica para garantizar la supervivencia del imperio. Desde 1860 a 1895 se hicieron intentos para restaurar el gobierno siguiendo principios confucianos con el fin de solucionar los problemas internos, sociales y económicos, y permitir la introducción de tecnologĆ­a occidental que reforzara el poder del Estado. Los manchĆŗes eran incapaces de proporcionar las directrices para tales programas, por lo que los reformistas se dirigieron hacia los oficiales chinos de las provincias. Gracias al poder imperial que les habĆ­a concedido una mayor autoridad financiera, administrativa y militar, algunos de estos oficiales chinos habĆ­an tenido importantes Ć©xitos al llevar a cabo sus programas. Durante las dĆ©cadas de 1860 y 1870, en gran medida a travĆ©s de los esfuerzos de los gobernadores Tseng Kuo-Fan y Li Hongzhang, se sofocó la rebelión Taiping, se restauró la paz interna, se establecieron arsenales y astilleros, y se abrieron varias minas. Sin embargo, los objetivos de mantener un gobierno confuciano y desarrollar un poder militar moderno eran bĆ”sicamente incompatibles. La dirección de este programa de modernizaciones fue desempeƱada por los burócratas neoconfucianos, graduados siguiendo el sistema de exĆ”menes para funcionarios pĆŗblicos. Sin embargo, estos hombres estaban pobremente equipados o estaban encargados de llevar a cabo programas parciales de modernización cuyo objetivo era aumentar el poder estatal; en consecuencia, los esfuerzos de China por fortalecerse desde 1860 a 1895 fueron inĆŗtiles.

7.4.2.4 Esferas de influencia extranjeras

En principio, los Estados occidentales tendĆ­an a consolidar sus beneficios bajo la firma de tratados desiguales mĆ”s que a buscar privilegios adicionales. Sin embargo, en 1875 Occidente y Japón comenzaron a desmantelar el sistema chino de estados tributarios, mantenidos en el sureste de Asia. Desde 1875 las islas RyÅ«kyÅ« cayeron bajo el control japonĆ©s. La Guerra Chino-francesa de 1884 y 1885 puso TonkĆ­n bajo el imperio colonial francĆ©s y al aƱo siguiente Gran BretaƱa ocupó Birmania. En 1860 Rusia obtuvo las provincias marĆ­timas del norte de Dongbei Pingyuan (Manchuria) y los territorios al norte del rĆ­o Amur. En 1894 los esfuerzos japoneses por anexionarse Corea originaron la Guerra Chino-japonesa. China sufrió una derrota decisiva en 1895 y se vio forzada a reconocer la pĆ©rdida de Corea, pagar una enorme indemnización de guerra y ceder a Japón la isla de Taiwan y la penĆ­nsula de Liaodong, en el sur de Dongbei Pingyuan (Manchuria).

Rusia, Francia y Alemania reaccionaron de inmediato ante la cesión de la penĆ­nsula de Liaodong, pues suponĆ­a otorgar a Japón una posición prioritaria en la región mĆ”s rica de China. Estos tres Estados intervinieron demandando que Japón devolviera Liaodong a cambio de una mayor indemnización económica. Una vez que consiguieron esto, las tres potencias europeas le presentaron a China nuevas demandas. Hacia 1898, sin poder negarse a las demandas extranjeras, China habĆ­a sido dividida en esferas de influencia económica. Se le concedió a Rusia el derecho a construir el ferrocarril Transiberiano, la posesión del ferrocarril chino oriental, que a travĆ©s de Dongbei Pingyuan (Manchuria) llegaba hasta Vladivostok, y el ferrocarril del sur de esta región atravesando el extremo meridional de la penĆ­nsula de Liaodong, asĆ­ como derechos económicos adicionales exclusivos en el conjunto de Dongbei Pingyuan (Manchuria). Otros derechos de exclusividad para el desarrollo de ferrocarriles y la explotación de minas se concedieron a Alemania en la provincia de Shandong, a Francia en las provincias meridionales, a Gran BretaƱa en las provincias ribereƱas del Yangzi Jiang y a Japón en las provincias costeras del sureste. Como resultado de la Guerra Ruso-japonesa (1904-1905), la mayor parte del ferrocarril del sur de Dongbei Pingyuan (Manchuria) y los derechos rusos de esta zona fueron transferidos a Japón. Estados Unidos, en un intento de mantener sus derechos en China sin competir por el territorio, inició la polĆ­tica de puertas abiertas en 1899 y 1900. Esa polĆ­tica, consentida por las restantes potencias, estipulaba que sus nuevos privilegios en China no cambiaban en ninguna manera la posición igualitaria de todos los Estados acogidos a las clĆ”usulas de nación mĆ”s favorecida. Estados Unidos acometió la garantĆ­a de la integridad territorial y administrativa de China, aunque permaneció hasta 1941 sin respaldarla por la fuerza.

7.4.2.5 Movimientos de reforma y la rebelión Bóxer

Hacia 1898 un grupo de reformadores ilustrados adquirieron gran influencia sobre el joven y abierto emperador Guangxu. En el verano de ese aƱo, incitados por la urgencia de la situación creada por el aumento de las nuevas esferas de influencia extranjera, aplicaron un profundo programa de reformas diseƱado para convertir a China en una monarquĆ­a constitucional y modernizar su economĆ­a y sistema educativo. Este programa enfrentó a la oposición de la camarilla de oficiales manchĆŗes elegidos por la emperatriz Cixi, que se habĆ­a retirado poco tiempo antes. Cixi y los oficiales manchĆŗes secuestraron al emperador y con la ayuda de jefes militares leales sofocaron el movimiento reformista. Se extendió por todo el paĆ­s una reacción violenta, que alcanzó su punto Ć”lgido en 1900 con un levantamiento xenófobo de la sociedad secreta de los Bóxer, un grupo que gozaba del apoyo de la emperatriz viuda y de numerosos oficiales manchĆŗes. DespuĆ©s de que una fuerza expedicionaria occidental hubiera aplastado la rebelión Bóxer en PekĆ­n, el gobierno manchĆŗ se dio cuenta de la inutilidad de su polĆ­tica. En 1902 adoptó su propio programa de reformas e hizo planes para establecer un gobierno constitucional limitado, segĆŗn el modelo japonĆ©s. En 1905 se abandonó el antiguo sistema de exĆ”menes para los funcionarios.

Era tarde para los manchĆŗes. Poco despuĆ©s de la Guerra Chino-japonesa, Sun Yat-sen, formado segĆŗn el modelo occidental, habĆ­a iniciado un movimiento revolucionario dedicado a establecer un gobierno republicano. Durante la primera dĆ©cada del siglo XX, los revolucionarios atrajeron a estudiantes, comerciantes chinos con el extranjero y grupos nacionales poco satisfechos con el gobierno manchĆŗ. A mediados de 1911 tuvieron lugar levantamientos como protesta contra el programa de nacionalización del ferrocarril Qing y en octubre de ese aƱo estalló la Revolución republicana en Hankou (en la actualidad, parte de la ciudad de Wuhan), en China central, extendiĆ©ndose a otras provincias, mientras Sun tomaba el control de la revuelta. Los ejĆ©rcitos manchĆŗes, reorganizados por el general Yuan Shikai, eran claramente superiores a las fuerzas rebeldes, pero Yuan sólo aplicó una presión militar limitada y negoció con los dirigentes rebeldes ser designado presidente de un nuevo gobierno republicano. El 12 de febrero de 1912 Sun Yat-sen cedió su puesto de presidente provisional en favor de Yuan y sumisamente los manchĆŗes se retiraron del poder. El 14 de febrero de 1912 una asamblea revolucionaria reunida en Nanjing eligió a Yuan primer presidente de la RepĆŗblica de China.

7.5 La RepĆŗblica de China

La RepĆŗblica de China mantuvo una frĆ”gil existencia desde 1912 hasta 1949. Aunque se adoptó una Constitución y se estableció un Parlamento en 1912, Yuan Shikai nunca permitió que estas instituciones limitaran su control personal del gobierno. Cuando el reciĆ©n fundado Partido Nacionalista, o Guomindang, encabezado por Sun Yat-sen, intentó reducir el poder de Yuan, primero mediante tĆ”cticas parlamentarias y luego con la fracasada revolución de 1913, Yuan respondió con la disolución del Parlamento, la ilegalidad del Guomindang y el gobierno a travĆ©s de sus conexiones personales con los dirigentes militares provinciales. Sun Yat-sen se refugió en Japón. Yuan, sin embargo, se vio forzado por la oposición popular a abandonar sus planes de restaurar el imperio y convertirse en emperador. Murió en 1916, y el poder polĆ­tico fue ejercido por los jefes militares provinciales. El gobierno central mantuvo hasta 1927 una existencia precaria y casi ficticia.

Durante la I Guerra Mundial (1914-1918), Japón buscó obtener una posición de supremacĆ­a incuestionable en China. En 1915 presentó a China las denominadas “Veintiuna Demandas”, cuyos tĆ©rminos habrĆ­an reducido China a un virtual protectorado japonĆ©s. China, flexible ante una versión modificada de las demandas, accedió, entre otras concesiones, a transferir las posesiones alemanas en Shandong a Japón. La tardĆ­a entrada de China en la guerra en 1917 estaba destinada a conseguir participar en el futuro tratado de paz para revisar las ambiciosas peticiones japonesas. China esperaba que Estados Unidos, de acuerdo con su polĆ­tica de puertas abiertas, le ofreciera su apoyo. Sin embargo, en Versalles, el presidente estadounidense Woodrow Wilson retiró el apoyo de su paĆ­s a China en el tema de Shandong, cuando Japón retiró sus demandas de una clĆ”usula de igualdad racial en el Pacto de la Sociedad de Naciones, una disposición a la que se oponĆ­an duramente en Estados Unidos a causa de la posibilidad de que hubiera una afluencia ilimitada de mano de obra desde oriente. La delegación china, indignada, se negó a firmar el Tratado de Versalles. Sin embargo, China obtuvo posteriormente su admisión en la Sociedad de Naciones a partir de la firma de un tratado de paz por separado con Austria.

Los jóvenes e intelectuales chinos, que en la dĆ©cada precedente habĆ­an vuelto sus ojos cada vez mĆ”s hacia Occidente, en busca de modelos e ideales para la reforma de China, se sintieron traicionados por Wilson en Versalles. Cuando estas noticias llegaron, se inició en la Universidad de PekĆ­n una manifestación masiva de protesta en contra de los japoneses, el llamado ‘Movimiento del Cuatro de Mayo’, que se extendió por todo el paĆ­s en 1919.

7.5.1 El Guomindang y el ascenso del Partido Comunista

Tras ser sofocado, siguió un periodo de examen y reajuste, desde el cual surgieron dos objetivos claros: deshacerse del imperialismo que se cernĆ­a sobre China y restablecer la unidad nacional. Los chinos estaban desilusionados por el cĆ­nico interĆ©s de los poderes imperialistas occidentales y se fueron acercando progresivamente al pensamiento marxista-leninista y a la Unión SoviĆ©tica. El Partido Comunista Chino (PCCh) se fundó en Shanghai en 1921, contando entre sus primeros miembros con Mao Zedong. En 1923 Sun Yat-sen aceptó el consejo soviĆ©tico para reorganizar un Guomindang en proceso de desintegración, y fortalecer sus dĆ©biles fuerzas militares. Al mismo tiempo aceptó el ingreso de comunistas en el Guomindang. Los principios ideológicos de Sun (nacionalismo, democracia y socialismo) estaban Ć­ntimamente relacionados con un espĆ­ritu antiimperialista y la defensa de la unificación nacional. A pesar de la muerte de Sun en 1925, el rejuvenecido Guomindang, bajo el mandato del joven general Jiang Jieshi, lanzó una expedición militar en 1926 desde su base de Cantón. Jiang buscaba reunificar China bajo el mandato del Guomindang y liberar al paĆ­s del imperialismo y de la fuerza de los jefes militares provinciales (los llamados seƱores de la guerra). No obstante, antes de que el Guomindang completara la reunificación territorial de China ya en 1928, Jiang llevó a cabo una cruenta purga de los miembros comunistas del partido, y desde entonces confió en el apoyo de las clases propietarias y de las potencias extranjeras.

7.5.1.1 Los problemas de Jiang

El nuevo gobierno nacional que el Guomindang estableció en Nanjing en 1928 se encontró con tres problemas de gran magnitud. Primero, Jiang en realidad sólo tenĆ­a bajo su control cinco provincias, pues el resto del paĆ­s aĆŗn estaba gobernado por jefes militares locales. Segundo, hacia comienzos de la dĆ©cada de 1930 se encontró con una rebelión interna comunista. Los comunistas chinos, despuĆ©s la purga del Guomindang en 1927 se dividieron en dos facciones y pasaron a la clandestinidad. Uno de los dos grupos intentó fomentar los levantamientos urbanos; el otro, dirigido por Mao Zedong, tomó la zona rural de la China central, donde movilizó a los campesinos, formó un ejĆ©rcito con ellos y estableció algunas comunas siguiendo el modelo soviĆ©tico. La primera facción se unió finalmente a Mao en la China central. El tercer problema del nuevo gobierno Jiang fue la agresión japonesa en Dongbei Pingyuan (Manchuria) y el norte de China.

Durante la dĆ©cada de 1920 Japón habĆ­a moderado su polĆ­tica respecto a China. En la Conferencia Naval de Washington de 1922, habĆ­a aceptado devolver las antiguas posesiones alemanas en Shandong. Desde 1928, sin embargo, el nacionalismo militante del Guomindang chocó con los intereses imperialistas japoneses interesados en el control del ferrocarril del sur de Dongbei Pingyuan (Manchuria). El 18 de septiembre de 1931, los japoneses se valieron de un presunto bombardeo nacionalista del ferrocarril para extender su control militar sobre toda la región. La primavera siguiente los japoneses transformaron las tres provincias de Dongbei Pingyuan (Manchuria) en el nuevo Estado de Manchukuo y posteriormente convirtieron a Puyi, el Ćŗltimo gobernante de la dinastĆ­a manchĆŗ, en su emperador. A comienzos de 1933 la zona oriental de Mongolia Interior fue incorporada al Manchukuo. Hacia mediados de 1933, Japón habĆ­a conseguido de China un acuerdo para la desmilitarización del noreste de Hebei.

7.5.1.2 El incidente Sian

Mientras se ocupaba de estos tres problemas durante la dĆ©cada de 1930, Jiang Jieshi negoció con los jefes militares locales y contemporizó con los japoneses, dando prioridad a la supresión de la rebelión comunista. A finales de 1934, consiguió desalojar al EjĆ©rcito Rojo de su base de China central, pero los comunistas se desplazaron hacia el oeste y despuĆ©s al norte en la denominada Larga Marcha, que terminó en Yan’an, en la provincia de Shaanxi; hacia 1936 habĆ­an establecido una nueva base en el noroeste. Mientras se intensificaba la agresión de los japoneses, aumentó la presión popular para que los chinos pusieran fin a las luchas internas y se unieran contra Japón. Sin embargo, Jiang resistió hasta finales de 1936, en que fue secuestrado por uno de sus propios generales. Durante su periodo de cautiverio en Xi’an fue visitado por el propio dirigente comunista, con quien acordó la adopción de una polĆ­tica comĆŗn contra Japón. Cuando fue liberado moderó su postura anticomunista y en 1937 se formó un frente unido del Guomindang y los comunistas contra los japoneses.

7.5.2 La II Guerra Mundial

En 1937 Japón y China comenzaron una guerra a gran escala como resultado de una escaramuza en el puente de Marco Polo, cerca de PekĆ­n. Hacia 1938 Japón controlaba la mayor parte del noreste de China, interior del valle del Yang-tsĆŖ hasta Hankou, y la zona alrededor de Cantón en la costa sureste. El Guomindang cambió su capital y desplazó la mayor parte de su fuerza militar al interior a Chongqing en la provincia suroccidental de Sichuan.

Durante la II Guerra Mundial (1939-1945), el gobierno del Guomindang en Chonqing sufrió un importante debilitamiento militar y financiero mientras los comunistas, con su cuartel general en Yan’an, expandĆ­an de manera significativa sus bases territoriales y sus fuerzas militares gracias al aumento de la militancia en el partido. DespuĆ©s de haber sufrido importantes pĆ©rdidas humanas y materiales durante la batalla por la China oriental en 1937 y 1938, los mandos del ejĆ©rcito del Guomindang se reabastecieron con reclutas mal entrenados; ademĆ”s, el reequipamiento de estos ejĆ©rcitos hubo de posponerse hasta 1945, aƱo en que llegaron al gobierno nacionalista los primeros envĆ­os a gran escala de material militar estadounidense. No sólo estaban muy debilitadas las fuerzas militares del gobierno del Guomindang despuĆ©s de 1938 sino que tambiĆ©n la jefatura estaba desgarrada por las mĆŗltiples disidencias en su seno. Estos problemas se complicaron con unas condiciones de inflación creciente que comenzó en 1939, cuando el gobierno se desligó de su mayor fuente de ingresos en la China oriental ocupada por los japoneses. A pesar de la importante ayuda financiera estadounidense, la tendencia inflacionista empeoró con el posterior crecimiento de la corrupción oficial, pĆ©rdida de la moral entre las tropas y entre la población civil.

Por otro lado, los comunistas se habĆ­an dispersado desde Yan’an, ocupando una gran parte del norte de China y se habĆ­an infiltrado en muchas de las regiones rurales por la retaguardia de las lĆ­neas japonesas. AllĆ­ organizaron hĆ”bilmente a los campesinos para que ingresaran en las filas del Partido Comunista y del EjĆ©rcito Rojo. La unidad y la disciplina organizativa se mantuvieron a travĆ©s de una fuerte campaƱa de propaganda ideológica. Las fuerzas soviĆ©ticas, que ocuparon Dongbei Pingyuan (Manchuria) tras la declaración de guerra a Japón el 8 de agosto de 1945, entregaron a los comunistas gran cantidad de armas capturadas a los japoneses. Como resultado de ello, los comunistas salieron de la II Guerra Mundial con una fuerza mĆ”s fuerte, disciplinada y equipada que antes.

7.5.3 La lucha por la supremacĆ­a entre el Guomindang y el Partido Comunista

En 1945, poco despuĆ©s de que Japón capitulara, estalló la lucha entre los comunistas y las tropas del Guomindang por el control de Dongbei Pingyuan (Manchuria). Se alcanzó una tregua temporal en 1946 a travĆ©s de la mediación del general estadounidense George C. Marshall. Aunque de inmediato se reanudó la lucha, Marshall continuó sus esfuerzos para unir a las dos partes. En agosto de 1946, Estados Unidos intentó reforzar el papel de Marshall como mediador imparcial al suspender su ayuda militar al gobierno nacionalista. No obstante, las hostilidades continuaron y en enero de 1947, convencidos de la inutilidad de proseguir la mediación, Marshall abandonó China. Muy pronto el conflicto estalló en una guerra civil a gran escala y desaparecieron todas las esperanzas de un acercamiento polĆ­tico. En mayo de 1947, se reanudó la ayuda estadounidense a los nacionalistas. Sin embargo, las fuerzas gubernamentales estaban agotadas tras dos dĆ©cadas de un estado de guerra casi continuo, el mando estaba dividido por la desunión interna y la economĆ­a estaba paralizada por una espiral inflacionista; ademĆ”s, los campesinos recelaban de una prometida reforma agraria que no llegaba nunca, mientras que los liberales en el gobierno eran sometidos por los sectores mĆ”s conservadores. En 1947 la iniciativa militar pasó a los comunistas, cuyo EjĆ©rcito de Liberación Popular (nombre oficial) dirigido por Lin Biao derrotó a los nacionalistas en Dongbei Pingyuan (Manchuria) y en el verano de 1949, la resistencia nacionalista se derrumbó. El gobierno, con las fuerzas que pudo recuperar, buscó refugio en la isla de Taiwan. La Revolución comunista habĆ­a triunfado en China.

En septiembre de 1949 los comunistas reunieron la Conferencia Consultiva Popular PolĆ­tica China, un cuerpo constituyente de 662 miembros, que adoptó un grupo de principios y directrices polĆ­ticas y una ley orgĆ”nica para gobernar el paĆ­s. La conferencia eligió al Consejo de Gobierno Central Popular, que iba a servir de órgano supremo polĆ­tico. Mao Zedong, nombrado presidente de este organismo, era de hecho el jefe del Estado. De acuerdo con los poderes que habĆ­a delegado en Ć©l la conferencia, el Consejo de Gobierno Central Popular instituyó los diferentes órganos de gobierno central y local. En el plano nacional, el Consejo Administrativo de Gobierno, encabezado por Zhou Enlai, llevó a cabo funciones de gobierno tanto legislativas como ejecutivas. Subordinados al Consejo se encontraban mĆ”s de 30 comisiones y ministerios encargados de tratar diferentes aspectos de los asuntos estatales. La RepĆŗblica Popular China fue oficialmente proclamada el 1 de octubre de 1949.

7.6 La RepĆŗblica Popular

En 1953 despuĆ©s de que el control comunista se hubiera establecido con firmeza en la mayorĆ­a de las poblaciones, el Consejo de Gobierno Central Popular inició la elección de los congresos populares locales, que a su vez, eligieron los congresos del Ć”mbito administrativo inmediatamente superior. En 1954 se completó la red de congresos electos, con la elección del Congreso Nacional Popular, que aprobó el borrador de la Constitución que se envió al ComitĆ© Central del Partido Comunista Chino.

La Constitución de 1954, que reemplazó a la Ley OrgĆ”nica de 1949 como la ley fundamental del paĆ­s, confirmó la hegemonĆ­a del Partido Comunista Chino e introdujo cambios destinados a centralizar el control del gobierno.

7.6.1 La transformación de la sociedad

La polĆ­tica bĆ”sica del rĆ©gimen comunista fue transformar China en una sociedad socialista. Para alcanzar este fin se utilizaron ampliamente la educación en los principios del marxismo-leninismo y la propaganda polĆ­tica, en especial hacia los jóvenes. Se aseguró a las mujeres una posición de igualdad mediante las nuevas leyes de matrimonio, que pusieron fin a la prĆ”ctica del concubinato, la poligamia, la venta de niƱos y la interferencia en los nuevos matrimonios de las viudas, y aseguraban derechos iguales respecto al empleo, propiedad de los bienes y divorcio. Se controló estrictamente la religión; se obligó a los misioneros extranjeros a salir del paĆ­s y se colocó a clĆ©rigos chinos dispuestos a cooperar con los comunistas, al mando de las iglesias cristianas. Los intelectuales se vieron sujetos al control gubernativo dirigido a la erradicación de las ideas anticomunistas.

En los primeros aƱos de la RepĆŗblica Popular, el gobierno tambiĆ©n recurrió al terror en sus esfuerzos por eliminar a toda la oposición y a los enemigos potenciales; en 1951, las autoridades de PekĆ­n afirmaron que entre octubre de 1949 y octubre de 1950, se ejecutó a mĆ”s de un millón de los denominados elementos contrarrevolucionarios. Algunas autoridades extranjeras estimaron que esos datos podrĆ­an haberse incrementado a finales de 1951 a dos millones.

7.6.1.1 Política económica

La primera acción de los comunistas fue reconstruir la economĆ­a, que se habĆ­a visto afectada por las consecuencias de las dĆ©cadas de guerra continua. Inmediatamente instituyeron medidas severas para controlar la inflación, restaurar las comunicaciones y restablecer el orden interno necesario para el desarrollo económico. Su polĆ­tica económica potenció la colectivización agrĆ­cola para poder promocionar el ahorro necesario para el establecimiento de la industria pesada. La industria privada pasó gradualmente a estar bajo propiedad mixta estatal y privada. El control del Estado fue ejercido mediante una serie de programas que implicaban la incautación de los considerados sectores económicos bĆ”sicos y la paulatina desaparición de algunos propietarios mediante pagos compensatorios fijos. La reforma agraria se inició en 1950 y fue seguida de la creación de equipos de ayuda mutua, cooperativas y granjas colectivas. El primer plan quinquenal, que se inició en 1953 y se llevó a cabo con ayuda soviĆ©tica, potenció la industria pesada a costa de los bienes de consumo. La ayuda económica y el consejo tĆ©cnico soviĆ©tico contribuyeron en gran manera al Ć©xito inmediato del programa.

7.6.1.2 PolĆ­tica exterior

La polĆ­tica exterior china reflejaba la unidad existente en el movimiento comunista internacional en la dĆ©cada de 1950. China y la Unión SoviĆ©tica firmaron un tratado de amistad y alianza en 1950 y varios acuerdos complementarios, que concluyeron en 1952 y 1954, por los que la Unión SoviĆ©tica hizo grandes concesiones a China, como la desaparición de la presencia soviĆ©tica en Dongbei Pingyuan (Manchuria). China tambiĆ©n pretendió estrechar relaciones con sus vecinos comunistas. Durante la guerra de Corea las tropas chinas ayudaron al rĆ©gimen comunista de Corea del Norte contra las fuerzas de Naciones Unidas, enfrentĆ”ndose directamente a las tropas de Estados Unidos. Cuando este conflicto finalizó en 1953, los chinos aceleraron el flujo de la ayuda militar a los insurgentes comunistas que luchaban contra los franceses en Indochina. Zhou Enlai desempeñó un importante papel en las negociaciones de los Acuerdos de Ginebra de 1954, que terminaron momentĆ”neamente con las hostilidades en esta región.

Con su llegada al poder, el rĆ©gimen comunista tambiĆ©n intentó recuperar los territorios que consideraba dentro de las fronteras históricas de China. En 1950, las tropas chinas invadieron TĆ­bet y obligaron al paĆ­s a aceptar el mandato chino. En agosto de 1954, Zhou Enlai declaró oficialmente que la liberación de Taiwan era uno de sus principales objetivos, mientras que desde el campo nacionalista se insistĆ­a tambiĆ©n en volver a unificar el paĆ­s. Los comunistas comenzaron a bombardear a principios de septiembre la isla de Quemoy, que se encontraba en manos de los nacionalistas, y posteriormente atacaron otras islas mĆ”s allĆ” de la costa de la China continental, entre las que se contaban Matsu y las Tachens. Los nacionalistas respondieron con ataques aĆ©reos y navales contra el continente. Cuando en 1955 los comunistas intensificaron su ofensiva contra las islas, los nacionalistas, con la ayuda de la VII Flota de Estados Unidos, evacuaron las Tachens. Desde 1958 se ha mantenido de manera general por ambas partes un alto el fuego en los estrechos, aunque el rĆ©gimen comunista nunca ha renunciado a utilizar la fuerza para conquistar Taiwan.

7.6.1.3 El Gran Salto adelante

La prudencia y planificación que supuso el primer plan quinquenal fueron abandonadas en gran medida en el segundo, que comenzó en 1958. Se impusieron controles mĆ”s rĆ­gidos sobre la economĆ­a para incrementar la producción agrĆ­cola, restringir el consumo y acelerar la industrialización; se trataba en definitiva de realizar un “gran salto adelante”, como lo llamó la propaganda oficial. Sin embargo, a causa de una mala dirección e inadecuada planificación, el programa fracasó: la economĆ­a se desorganizó y la producción industrial descendió entre 1959 y 1962 hasta un 50 por ciento.

7.6.2 Creciente aislamiento

La situación empeoró en 1960 con la retirada de la ayuda económica y el consejo tĆ©cnico de los soviĆ©ticos. Mientras la Unión SoviĆ©tica avanzaba hacia una coexistencia pacĆ­fica con Occidente, surgieron diferencias ideológicas entre las dos potencias comunistas hegemónicas. Su alianza se fue deteriorando con rapidez a comienzos de la dĆ©cada de 1960 y en 1962 China condenó abiertamente a la URSS por retirar sus misiles de Cuba ante las presiones de Estados Unidos, manteniendo que la revolución era el Ćŗnico medio para poder lograr el objetivo mĆ”ximo del comunismo: poner fin al capitalismo. En particular, los chinos acusaron al dirigente soviĆ©tico Nikita S. Jruschov de revisionismo moderno y de traicionar la ideologĆ­a marxista-leninista. Como resultado de ello, la URSS cortó totalmente su financiación al desarrollo económico de China. Los chinos comenzaron a competir abiertamente con la Unión SoviĆ©tica por la jefatura del bloque comunista y por la influencia entre los nuevos Estados surgidos de la descolonización; con este fin Zhou Enlai viajó a Asia y Ɓfrica en 1963 para obtener el apoyo a China.

Sin embargo, el irredentismo chino y las tĆ”cticas subversivas impidieron los esfuerzos diplomĆ”ticos para obtener este fin. En 1959, tropas chinas penetraron y ocuparon unos 31.000 km2 de territorio que reclamaba la India. Las negociaciones entre los dos paĆ­ses no fueron concluyentes y de nuevo en 1962 se iniciaron fuertes enfrentamientos, cuando las tropas chinas avanzaron a lo largo de las fronteras reclamadas por la India. Aunque posteriormente los chinos retiraron sus tropas a las posiciones de 1959, la agresión hizo disminuir el prestigio de China entre los Estados neutrales de Asia y Ɓfrica. En el Sureste asiĆ”tico, China prestó su apoyo moral asĆ­ como ayuda tĆ©cnica y material a los movimientos comunistas de Laos y Vietnam. AdemĆ”s, en Indonesia, los numerosos oficiales chinos colaboraron activamente en el fomento de la fracasada revolución comunista que provocó su expulsión en 1965, despuĆ©s del triunfo del golpe de Estado militar que colocó en el poder al general Suharto, y en la que sufrieron enormes pĆ©rdidas de vidas y propiedades. Birmania y Camboya, aunque mantenĆ­an relaciones de amistad con China, se encontraban mĆ”s vinculadas con la Unión SoviĆ©tica. Tan sólo Albania se mantuvo como un aliado incondicional de China.

7.6.3 La Revolución Cultural

Mientras los comunistas luchaban por construir la sociedad china, aparecieron diferencias entre Mao, que favorecĆ­a una ideologĆ­a comunista pura y los intelectuales, profesionales y burócratas, que querĆ­an un acercamiento mĆ”s racional y moderado que animara la eficacia y productividad del paĆ­s. En mayo de 1956, los dirigentes del partido preocupados por las crĆ­ticas de los moderados, mĆ”s pragmĆ”ticos, lanzaron una campaƱa animando a los chinos a “dejar florecer cien flores, dejar luchar a cien escuelas de pensamiento.” Los intelectuales fueron instados a exponer sus quejas al sistema para que los problemas pudieran ser identificados y solucionados. A comienzos de 1957 Mao amplió la campaƱa de las “cien flores”, invitando a la libre crĆ­tica de la polĆ­tica gubernamental. Se asumió, por supuesto, que tales crĆ­ticas se encontrarĆ­an dentro del marco del comunismo. Sin embargo en junio de 1957 se volvieron a imponer estrictos controles sobre la libertad de expresión, que pusieron fin a la denominada “primavera de PekĆ­n”.

7.6.3.1 Ampliación de la división

La escisión entre Mao y los moderados se amplió. En 1959 abandonó la presidencia de la RepĆŗblica y le sucedió el moderado Liu Shaoqi; sin embargo, retuvo parte de su poder. La influencia de Mao se vio disminuida posteriormente por el fracaso económico que supuso el Gran salto adelante. La escisión se convirtió en un conflicto pĆŗblico en 1966, cuando Mao y sus seguidores lanzaron la Revolución Cultural proletaria para erradicar lo que perdurara de las ideas y costumbres burguesas y para recuperar el celo revolucionario del primitivo comunismo chino. Mao tambiĆ©n querĆ­a debilitar la burocracia del partido, ahora atrincherada en los privilegios y modernizar el sistema educativo para beneficiar a los trabajadores rurales y manuales.

Estudiantes autoproclamados guardias rojos, a los que se unieron grupos de trabajadores, campesinos y soldados desmovilizados, tomaron las calles para manifestarse a favor de Mao, a veces violentamente, convirtiendo a los intelectuales, funcionarios estatales y del partido y trabajadores urbanos en sus principales objetivos. Se desmontó la estructura central del partido ya que se destituyó a los numerosos altos dignatarios, entre los que se encontraba el jefe de Estado, Liu, y se los expulsó del partido. Se cerraron las escuelas y la economĆ­a quedó paralizada.

7.6.3.2 Tensión internacional

Durante 1967 y 1968 los enfrentamientos entre maoĆ­stas y antimaoĆ­stas, asĆ­ como entre diferentes facciones de los guardias rojos, costaron miles de vidas. En algunas zonas la rebelión condujo a la anarquĆ­a. Al final, se tuvo que recurrir al ejĆ©rcito, dirigido por el ayudante de Mao, Lin Biao, para restaurar el orden.

La Revolución Cultural tuvo un efecto adverso sobre las relaciones exteriores. La actitud de los guardias rojos inspiró comportamientos similares en Hong Kong que dieron lugar a un caos económico y social. La propaganda a favor de los guardias rojos y la agitación de los chinos residentes en el extranjero dificultaron las relaciones con muchos Estados, especialmente con la URSS, y la prueba positiva de una bomba de hidrógeno china en 1967 no hizo sino agravar la preocupación soviĆ©tica. La tensión entre las dos potencias fue aumentando mientras los chinos acusaban a los dirigentes soviĆ©ticos de imperialismo despuĆ©s de que en 1968 la URSS invadiera Checoslovaquia. En 1969 los crecientes ataques chinos sobre la policĆ­a soviĆ©tica en el rĆ­o Ussuri, en Dongbei Pingyuan (Manchuria), crearon una situación explosiva.

7.6.4 Los últimos años de Mao

Mao emergió victorioso de la Revolución Cultural y su presencia en la vida diaria china fue absoluta. El IX Congreso del Partido Comunista Chino, celebrado en abril de 1969, intentó restablecer su organización central. Mao fue reelegido presidente seƱalĆ”ndose que su pensamiento inspirarĆ­a al partido y a toda la nación; el ministro de defensa Lin Biao, fue nombrado su sucesor eventual, una elección personal de Mao. Sin embargo, las figuras mĆ”s destacadas no fueron los maoĆ­stas sino los moderados: altos oficiales militares seguidores de Lin Biao y personalidades caracterizadas por su pragmatismo como el primer ministro, Zhou Enlai.

En 1971 la desaparición de Lin Biao (que oficialmente falleció en un accidente de aviación) y a quien se acusó posteriormente de planear el asesinato de Mao, supuso la hegemonĆ­a en el partido de Zhou. El X Congreso del Partido, que tuvo lugar en agosto de 1973, eliminó la supuesta herencia de Lin como sucesor de Mao y se reafirmaron las posiciones de Mao y Zhou. El compromiso de Mao para la movilización de las masas y su arraigada desconfianza en la burocracia fueron expresadas en 1973 y 1974 en una nueva campaƱa de reforma ideológica que atacaba tanto al confucianismo como a Lin Biao. El pensamiento radical de Mao se reflejó en una nueva Constitución que, muy simplificada, fue adoptada por el IV Congreso Nacional Popular en enero de 1975; pero el moderado Deng Xiaoping, una vĆ­ctima rehabilitada de la Revolución Cultural, fue nombrado primer viceprimerministro y vicepresidente del Partido.

Durante este periodo las relaciones exteriores de China mejoraron en gran manera, en especial con Estados Unidos, que en 1971 retiró su veto a la incorporación de la RepĆŗblica Popular China en las Naciones Unidas, tras lo cual fue admitida en sustitución de la RepĆŗblica de China (posteriormente conocida como Taiwan), no reconocida por la RepĆŗblica Popular China. En 1972 el presidente estadounidense Richard M. Nixon realizó una visita oficial a China, durante la cual se planteó la necesidad de establecer contactos diplomĆ”ticos entre ambos paĆ­ses como paso previo para una eventual retirada de las tropas de Estados Unidos de Taiwan. Con este fin, se crearon oficinas de enlace en PekĆ­n y Washington en 1973; anteriormente, en 1972 se establecieron relaciones diplomĆ”ticas con Japón.

7.6.5 Los sucesores de Mao

Tanto el primer ministro Zhou como el presidente Mao murieron en 1976, dejando un vacĆ­o de poder. La muerte de Zhou precipitó la lucha por el mismo entre los dirigentes radicales y los moderados. Los radicales obtuvieron su primera victoria al impedir que Deng Xioaoping fuera elegido primer ministro y al lograr que fuera expulsado de sus cargos en el gobierno y en el partido. Como solución de compromiso, Hua Guofeng, un administrador sin lazos cercanos con ninguna de las facciones enfrentadas, se convirtió en primer ministro. Bajo su gobierno se impusieron las polĆ­ticas moderadas. Para consolidar su posición hizo arrestar y acusó de varios crĆ­menes a la Banda de los Cuatro —nombre dado por los moderados a la viuda de Mao Jiang Qing y otros tres dirigentes radicales—. En ese tiempo fue nombrado sucesor de Mao como presidente del Partido Comunista Chino.

Hua se centró en desarrollar una polĆ­tica de estabilización, en ayudas para superar los efectos de los terremotos que habĆ­an devastado Tangshan y otras regiones del norte en julio de 1976 y en favorecer el desarrollo económico. Para llevar a cabo su programa nombró a dirigentes moderados para ocupar altos cargos. En 1977 se reinstauró a Deng como primer sustituto del primer ministro y tambiĆ©n en los otros cargos de los que habĆ­a sido expulsado, mientras seguidores de la Banda de los Cuatro fueron depurados. El XXI Congreso del Partido Comunista Chino, celebrado en agosto de 1977, estuvo dominado por el presidente Huan, el vicepresidente Deng y Ye Jianying. Nuevamente la dirección fue ocupada por los militares y oficiales veteranos del partido.

El Ć©nfasis puesto en la moderación polĆ­tica y en la modernización económica del gobierno se reflejó en el V Congreso Nacional Popular, que se reunió en febrero y marzo de 1978. Hua fue reelegido como primer ministro, con Deng como sustituto del primer ministro. Ye fue nombrado presidente del ComitĆ© Permanente del Congreso Nacional, un cargo que, segĆŗn la nueva Constitución, equivalĆ­a a la jefatura del Estado.

7.6.6 Relaciones internacionales

Mientras se realizaban estos reajustes internos, las relaciones con Vietnam empezaron a ser tensas. Para disgusto de China, la influencia soviĆ©tica en Vietnam iba en aumento y la minorĆ­a china se veĆ­a obligada a cerrar sus negocios privados en el sur reciĆ©n conquistado. El resultado fue un Ć©xodo de chinos que se establecieron en el sur de China, colapsando la situación interna de esas regiones; hacia julio de 1978 China cerró sus fronteras. Cuando mĆ”s adelante Vietnam invadió Camboya y en enero 1979 derrocó al gobierno de ese paĆ­s, que estaba respaldado por los chinos, China tomó represalias y un mes despuĆ©s envió tropas a Vietnam.

Por miedo a quedar rodeados por los soviĆ©ticos y los vietnamitas, China aumentó sus contactos exteriores. En enero de 1979 se establecieron relaciones diplomĆ”ticas con Estados Unidos y en julio se realizó un acuerdo comercial. TambiĆ©n se estrecharon los lazos con Japón y Europa occidental.

7.6.7 La peculiar ‘vĆ­a china al capitalismo’

Deng Xiaoping fue la figura dominante en China a lo largo de la dĆ©cada de 1980 y los primeros aƱos de la de 1990, manteniendo su influencia de forma oculta incluso cuando cedĆ­a sus tĆ­tulos pĆŗblicos. Favoreció una polĆ­tica que permitĆ­a el desarrollo comercial e industrial, atrayendo inversiones extranjeras. Deng y la envejecida cĆŗpula dirigente de China tenĆ­an una posición mucho menos dogmĆ”tica sobre la polĆ­tica económica que sobre los temas polĆ­ticos.

En 1980, Hua Guofeng renunció a ser primer ministro y le sucedió Zhao Ziyang, un seguidor de Deng. A comienzos de 1981, fueron declarados culpables los miembros de la Banda de los Cuatro e ingresaron en prisión. En junio, otro de los aliados de Deng, Hu Yaobang, sustituyó a Hua como dirigente del partido. En 1982 se adoptaron una nueva Constitución y una nueva reorganización del Partido Comunista Chino. La primera restableció el cargo, en gran manera representativo, de presidente de la RepĆŗblica (anteriormente presidente de Estado), que en 1968 habĆ­a sido abolido por Mao.

La polĆ­tica desarrollada por Deng generó un rĆ”pido desarrollo económico, pero tambiĆ©n desencadenó una crisis social considerable (las grandes urbes crecieron a un ritmo mayor que el resto del paĆ­s, lo que originó graves desequilibrios entre el campo y la ciudad, asĆ­ como dentro de las ciudades) y aspiraciones polĆ­ticas entre los grupos sociales mĆ”s beneficiados por la apertura de consecuencias imprevisibles, pues enseguida se puso de manifiesto que los mĆ”ximos dirigentes del paĆ­s no tenĆ­an la menor intención de comprometer el poder absoluto del Partido Comunista.

En enero de 1987, Zhao Ziyang fue nombrado secretario general del Partido Comunista y Hu Yaobang fue obligado a dimitir, en tanto que Li Peng fue nombrado primer ministro. Los cambios en la jefatura llegaron tras una ola de manifestaciones estudiantiles que reclamaban una mayor democratización y libertad de expresión. La muerte de Hu en abril de 1989 inició una nueva ola de manifestaciones a favor de la democracia, que aumentaron en mayo cuando el dirigente soviĆ©tico Mijail Gorbachov visitó PekĆ­n para poner fin a las desavenencias entre la URSS y China, que ya duraban treinta aƱos. Los manifestantes ocuparon la plaza de Tiananmen en PekĆ­n hasta la maƱana del 4 de junio, en que las tropas armadas tomaron al asalto el centro de la ciudad, matando al menos a cuatrocientos civiles (vĆ©ase Sucesos de Tiananmen). Gran parte de la comunidad internacional criticó la forma violenta en que se resolvió el conflicto y la posterior vulneración de los derechos humanos que tuvo lugar contra aquĆ©llos que participaron en la protesta. En el posterior periodo de represión polĆ­tica, Zhao Ziyang fue despojado de sus cargos en el partido y Jiang Zemin se convirtió en secretario general. La VIII reunión de la Asamblea Nacional Popular eligió en marzo de 1993 a Jiang como presidente de China y reeligió a Li Peng como jefe de gobierno.

Jiang Zemin tuvo que enfrentarse, como mĆ”ximo dirigente del paĆ­s, a graves problemas: pĆ©rdida de influencia del Partido Comunista, incremento de la inflación y del dĆ©ficit comercial, aumento de las diferencias económicas entre las distintas regiones (lo que lleva aparejado diferencias sociales), corrupción generalizada entre los empleados pĆŗblicos y empeoramiento de las relaciones con algunos paĆ­ses occidentales, debido fundamentalmente al quebrantamiento de los derechos humanos. En este sentido, la entrega o devolución (segĆŗn el punto de vista) de Hong Kong a China es un posible elemento de tensión entre las potencias occidentales y el ‘gigante asiĆ”tico’.

Jiang desarrolló grandes esfuerzos para resolver estos asuntos, realizando una gestión en la que la eficacia fue el principio bĆ”sico de actuación. En abril de 1995 consiguió que el ComitĆ© Central destituyera por el cargo de corrupción al poderoso alcalde de PekĆ­n, Chen Xitong. La inflación se redujo del 22% en 1994 a menos del 15% en 1995, gracias a la aplicación de medidas tales como el control de precios y el incremento de la producción agrĆ­cola. Jiang fortaleció su base de apoyo nombrando aliados en Shanghai, si bien el respaldo hacia su figura dentro del estamento militar fue considerado menos firme.

Aunque Jiang ha seguido la lĆ­nea ideológica marcada por Deng (que podrĆ­a resumirse en el principio de ‘apertura económica sin cambio polĆ­tico’), ha procurado, no obstante, dejar su impronta en la acción de gobierno y reafirmarse como lĆ­der por derecho propio. AsĆ­, en el campo económico, favoreció la liberalización en la lĆ­nea establecida por Deng, pero a un ritmo mĆ”s moderado, prestando mayor atención a las consecuencias negativas que el desarrollo económico puede tener entre la población.

Con la muerte de Deng Xiaoping el 19 de febrero de 1997, Jiang Zemin, en su condición de presidente de la RepĆŗblica y jefe de las Fuerzas Armadas, se convirtió en la figura indiscutible de la escena polĆ­tica china.

En septiembre de 1997 se celebró el XV Congreso del Partido Comunista Chino, en el que se apoyó el mantenimiento de la lĆ­nea polĆ­tica, conocida como 'marxismo neoliberal' (caracterizado por dar prioridad a los mĆ©ritos y la competencia como factores clave del desarrollo económico), se reforzaba la figura de Jiang Zemin al frente del paĆ­s, seguido del primer ministro, Li Peng, y del nuevo 'nĆŗmero tres', Zhu Rongji, y se reducĆ­a el nĆŗmero de efectivos del EjĆ©rcito, al que se conminaba a doblegarse a las directrices del PCCh.

A comienzos del mes de noviembre de ese aƱo tuvo lugar en PekĆ­n una cumbre chino-rusa (la quinta en seis aƱos) de tres dĆ­as de duración, en la que se acordó establecer la demarcación fronteriza definitiva entre ambos paĆ­ses, asĆ­ como acuerdos comerciales de gran envergadura.

De acuerdo con lo establecido en el XV Congreso del PCCh, en marzo de 1998 la Asamblea Nacional Popular aprobó el inicio de una drĆ”stica reducción del aparato estatal, en la que se preveĆ­a el despido de la mitad de los funcionarios y una fuerte contención del gasto pĆŗblico; asimismo, la Asamblea ratificó a Jiang Zemin como presidente de la RepĆŗblica para un nuevo mandato de cinco aƱos, sustituyó a Li Peng (que pasó a desempeƱar la presidencia de dicha cĆ”mara legislativa) en el cargo de primer ministro y nombró como sustituto a Zhu Rongji.

Las enmiendas a la Constitución de 1982, mediante las que se reafirmaban los principios de reforma y apertura económica —considerando la propiedad privada como base del desarrollo ulterior del paĆ­s en tanto que “un importante componente de la economĆ­a de mercado socialista”—, fueron aprobadas el 15 de marzo de 1999 por la Asamblea Nacional Popular, pese a la fĆ©rrea oposición de los diputados ortodoxos, contrarios a la liberalización.

En otro orden de cosas, durante los meses de julio, agosto y septiembre de 1998 se produjeron inundaciones en China que provocaron mĆ”s de 3.000 muertos y cuantiosos daƱos en las infraestructuras del paĆ­s asiĆ”tico.

Jiang Zemin reforzó la alianza china con Rusia cuando el 25 de agosto de 1999 firmó con el presidente de ese paĆ­s, BorĆ­s Yeltsin, una declaración de confianza respecto de los miles de kilómetros fronterizos entre sus respectivos paĆ­ses, asĆ­ como entre China y otros tres estados pertenecientes a la desaparecida URSS: TayikistĆ”n, KazajstĆ”n y KirguizistĆ”n. Ambos presidentes ampliaron su estrategia internacional comĆŗn al rechazar la polĆ­tica exterior de Estados Unidos y de la Organización del Tratado del AtlĆ”ntico Norte (OTAN).

En noviembre de 1999, China se integró a la carrera espacial (tras Rusia y Estados Unidos), 42 aƱos despuĆ©s del inicio de Ć©sta: el primer vuelo orbital terrestre chino duró 21 horas y consistió en 14 vueltas a la Tierra, tras las cuales se pudo recuperar la nave no tripulada. Portugal devolvió su colonia de Macao (que ocupaba desde mediados del siglo XVI) a China en la medianoche del 19 de diciembre de ese aƱo. Se ponĆ­a asĆ­ fin a la presencia europea en territorio chino.

A menos de un mes de las elecciones presidenciales en Taiwan, el gobierno de la RepĆŗblica Popular China emitió el 21 de febrero de 2000 una seria advertencia a las autoridades taiwanesas, que incluĆ­a el posible “uso de la fuerza” en caso de que Ć©stas retrasaran indefinidamente las negociaciones para la reunificación con China. El resultado de los comicios taiwaneses, favorables al candidato defensor de la independencia clara y definitiva de la isla, no supuso sin embargo el inicio de una actividad bĆ©lica como se habĆ­a anunciado.

7.6.8 Acontecimientos recientes

El 10 de noviembre de 2001 fue aprobado el ingreso de China en la OMC, hecho que fue considerado un hito histórico, no sólo para el propio paĆ­s, sino para el conjunto de los intercambios comerciales mundiales. Justo un aƱo despuĆ©s se celebró el XVI Congreso del PCCh, en cuyo transcurso Jiang Zemin fue sustituido como secretario general del partido por Hu Jintao. El relevo de la tercera generación de polĆ­ticos comunistas culminó en marzo de 2003, en el marco de la X Asamblea Nacional Popular. Durante Ć©sta, Hu Jintao sucedió tambiĆ©n a Jiang Zemin en la presidencia del paĆ­s, Wen Jiabao a Zhu Rongji en el cargo de primer ministro, y Wu Bangguo a Li Peng al frente del propio Parlamento.

La nueva cĆŗpula dirigente no tardó en tener que afrontar un grave problema: el derivado del brote de una enfermedad, el sĆ­ndrome respiratorio agudo severo (SRAS, tambiĆ©n conocido como neumonĆ­a asiĆ”tica o atĆ­pica), cuyo primer caso reconocido se registró en febrero de 2003. En el orden internacional, Hu Jintao se convirtió en junio de ese aƱo en el primer mĆ”ximo mandatario chino que asistĆ­a a una reunión del Grupo de los Ocho. Durante ese mismo mes, Wen Jiabao y el primer ministro indio, Atal Bihari Vajpayee, firmaron una declaración conjunta en la que sobresalĆ­a el reconocimiento del gobierno indio de la plena soberanĆ­a china sobre la Región Autónoma del TĆ­bet. Asimismo, en este nuevo marco, China e India establecieron diversos acuerdos para potenciar la cooperación polĆ­tica y económica entre ambos estados.

En octubre de 2003, en el transcurso de una reunión del ComitĆ© Central del PCCh, Hu Jintao dejó ver su intención de promover cierta democratización interna del partido; ya con anterioridad, el nuevo mĆ”ximo mandatario habĆ­a realizado declaraciones que dejaban abierta la posibilidad a una reforma aperturista del sistema polĆ­tico chino. Durante ese mismo mes, China efectuó su primer vuelo espacial tripulado, hecho que se convirtió en un sĆ­mbolo del progreso tecnológico del paĆ­s. Asimismo, en marzo de 2004, la Asamblea Nacional Popular aprobó sendas enmiendas constitucionales presentadas por el nuevo gobierno para garantizar la propiedad privada y el respeto a los derechos humanos. En septiembre de ese aƱo, Hu Jintao sustituyó a Jiang Zemin en la jefatura de la Comisión Militar Central y se consolidó como mĆ”ximo dirigente del paĆ­s en todos los Ć”mbitos.

En marzo de 2005, la Asamblea Nacional Popular aprobó la denominada Ley Antisecesión, que autorizaba al EjĆ©rcito a hacer uso de la fuerza frente a Taiwan en caso de incidentes o si se agotaba la vĆ­a de la reunión pacĆ­fica, entre otros supuestos. Al mes siguiente, Wen Jiabao y el primer ministro indio, Manmohan Singh, sellaron una asociación de carĆ”cter estratĆ©gico para fomentar de forma conjunta la paz y la prosperidad de sus respectivos estados; este acuerdo habrĆ­a de sentar las bases para poner fin a las disputas que China e India mantenĆ­an sobre sus fronteras comunes. En marzo de 2007, la Asamblea Nacional Popular aprobó la primera ley de propiedad privada, que materializaba la anteriormente referida reforma constitucional de 2004 al otorgar la misma protección a la propiedad pĆŗblica (estatal o colectiva) y a la individual.

En el transcurso del XVII Congreso del PCCh, desarrollado en octubre de 2007, Hu Jintao fue reelegido secretario general de la organización. De igual modo, en marzo de 2008, la Asamblea Nacional Popular reeligió a Hu Jintao presidente del paĆ­s; a Wen Jiabao, primer ministro; y a Wu Bangguo, como presidente de la Asamblea. Durante ese mismo mes, se inició en el TĆ­bet una oleada de protestas contra China, que fue respondida por PekĆ­n con una dura represión.

Soy una persona que me encanta la tecnologƭa para sacar el mejor provecho en todas las Ɣreas del conocimiento y la vida prƔctica.
Mi Biblioteca... Bienvenido a whatsapp chat
Hola, En que podemos ayudarte?
Escriba aquĆ­...